Especial 2025: Nuestra despedida a las figuras eurovisivas que nos han dejado este año

2025 ha sido un año negro, por muchos motivos. El pasado 3 de enero nos dejaba Stipica Kalogjera, director de orquesta yugoslavo, y el 28 de diciembre la representante de Francia de 1997, Fanny Biascamano. Entre ambas fechas, Eurovisión ha perdido a algunas de las figuras más queridas y representativas de su larga historia. Hoy, como ya es tradición, el equipo de Eurovision-Spain mandamos un mensaje de cariño, recuerdo y respeto hacia su trabajo.

Por suerte, pocos han sido los representantes que nos han dejado huérfanos este año. Entre ellos se encuentran nombres inolvidables como Clodagh Rodgers, quien representó a Reino Unido en 1971 con el ya icónico Jack in the Box; la alemana Inge Brück, intérprete de Anouschka en 1967; el finlandés Jarkko Antikainen, que a dúo con Laura en 1969 inmortalizó Kuin silloin ennen; o las inigualables hermanas Kessler, Alice y Ellen, que conquistaron Europa en 1959 con Heute Abend wollen wir tanzen geh’n.

Este año han sido más las personalidades relacionadas con el mundo eurovisivo que han fallecido que representantes en sí. En España, hemos despedido a Manuel de la Calva, conocido por ser integrante del Dúo Dinámico y compositor de la ganadora La, La, La (1968) y el movido Bailemos un vals (1978). Desgraciadamente, tenemos que decir adiós a gente joven como Helga Wéber, corista de Hungría 2012 y 2013 —con especial protagonismo en esta última—, y a compositores espléndidos como el prolífico Bernd Meinunger o el padre de Vicky Leandros, Leo Leandros. Mención especial merecen figuras tan ligadas al certamen como Colin Berry, histórico presentador y portavoz del Reino Unido, y George Niarchos, director de orquesta griego.

Este pequeño obituario les rinde tributo, reivindicando su legado, ya que su arte y su profesionalidad nos han brindado muchas de las canciones que hoy forman parte de la historia del festival y de nuestra banda sonora personal. A través de una versión más solemne de Esa diva, la canción con la que Melody nos representó en Basilea, hemos querido homenajear a las doce personalidades que nos han dejado. La familia eurovisiva nunca os olvidará. ¡Gracias y hasta siempre!