Eurovisión 2023 supondrá un nuevo hito en el sistema de votación del festival: desaparecen los jurados en la semifinal y se añade un televoto internacional en la final. Si miramos atrás, la mayoría de canciones se habría clasificado igualmente con jurado o sin él en semifinales. Sin embargo, hay países que tienen las de ganar y otros las de perder con este cambio y es lo que vamos a demostrar en este blog. ¿Cuál será el impacto en los resultados de la final?
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EL CAMBIO DE NORMAS PARA EUROVISIÓN 2023
De forma inesperada y con anticipación la organización de Eurovisión ha publicado unas nuevas normas que afectarán al sistema de votación de Eurovisión de 2023 que se celebrará en Liverpool. Aunque anunciadas como tres, en realidad son dos medidas: eliminar el criterio del jurado en las semifinales de Eurovisión y añadir un televoto internacional en los tres eventos.
Puedes leer la declaración oficial aquí y la publicación de Eurovisión en forma de FAQs aquí.
Respecto de la segunda, poco se puede adelantar sin ningún precedente, pero como bien señala la UER, decantará la balanza (aún más) hacia el televoto.
Nosotros vamos a detenernos en la primera novedad, la eliminación del jurado en semifinales. Aparentemente la medida se toma como consecuencia de los últimos incidentes del jurado en Turín. De hecho, parece entreverse que el jurado se conserva en la final para poder mantener el sistema actual de entrega de puntos: primero los jurados nacionales por país y después el televoto en bloque.
Como siempre los hay que estar a favor de este cambio y los hay que están en contra, cada uno con sus argumentos. ¿Qué impacto puede tener en los resultados del festival? ¿Es cierto que el jurado ha beneficiado a los países pequeños y occidentales?
OJO CON EL PERIODO DE ESTUDIO Y LOS SISTEMAS DE VOTACIÓN
Antes de iniciar el análisis, un pequeño apunte sobre el periodo de estudio. A la hora de analizar los clasificados y no clasificados conviene recordar que los sistemas de votaciones han evolucionado desde la reintroducción de los jurados en Eurovisión.
En la siguiente imagen (que podéis ampliar haciendo clic en ella) se muestra un eje cronológico con los cambios más importantes en las votaciones de Eurovisión desde la introducción del televoto en 1997.
Desde 2016 la comparativa es fácil puesto que tanto para jurado como televoto se generaba una votación por país, fabricándose votaciones sustitutivas si fuera el caso por problemas o por falta de significación (como es el caso del televoto de San Marino).
No obstante, en los años anteriores a 2016 la estimación de los clasificados por televoto y jurado es más difícil puesto que si no había un televoto o un jurado, no se estimaba, se utilizaba el que fuera válido de los dos. Por ejemplo, si el jurado de un país era invalidado, se usaba solo su televoto para decidir su puntuación. Estas ausencias de puntos abren el criterio para ver como queda una clasificación general: ¿la hacemos solo con los votos válidos? ¿Sustituimos los puntos del jurado invalidado con su televoto para que se mantenga el equilibrio?
Por ejemplo, para que lo tengamos en cuenta, en la Wikipedia las votaciones ausentes han sido remplazadas con el jurado o televoto existente, de forma que sean comparables bajo este criterio, pero no son el resultado exacto. Aun así, por ser buenos estimadores, para los años de 2010 a 2015 se ha usado esta metodología para los cálculos que van a continuación. Obviamente, se omite el año 2013 por falta de un resultado por puntos del televoto y del jurado en semifinales.
EL EFECTO REAL, LA PISTA DE ALGO MÁS GRANDE
En su declaración, la UER indica que se ha estudiado el periodo de 2017 a 2022 y se concluye que la mayoría de los clasificados por el televoto coincide con los clasificados por la suma de televoto y jurado, en torno a 9 de 10. Lo cierto es que para el citado periodo, el acierto está más cercano a 8 de 10, tal y como podéis comprobar en la noticia que ya publicamos en esta web.
Como hemos señalado anteriormente, analizar los datos de periodos anteriores a 2016 se vuelve más arduo, en tanto que hubo votaciones no emitidas y eso dificulta comparar los resultados de jurado y televoto. En cualquier caso, las discrepancias entre televoto y jurado ni son nulas ni son grandes.
Si visualizamos en un mapa los beneficiados y perjudicados por el televoto desde 2016, tendremos el siguiente resultado. En tonos cálidos están los países beneficiados y en azul claro los que habrían sido perjudicados, es decir, los que no se habrían clasificado si solo hubiera existido televoto.
El mapa está bastante blanco porque son pocas observaciones, pero se aprecian ciertas zonas. Por ejemplo el báltico habría salido reforzado, así como en su mayoría los balcánicos y helénicos. En cambio, como zonas más perjudicadas están los caucásicos y el entorno de Alemania, algo que contrasta con Polonia, que se habría clasificado en 2018 y 2019, siendo la mayor beneficiada por el cambio de normas.
En definitiva, a primera vista y con estos datos, no se observan grandes beneficiarios o perjudicados por las nuevas normas, pero sí se advierten zonas que sugieren que la ausencia de los jurados en las semifinales podría tener un cierto impacto.
En este punto conviene hacer una distinción. Efectivamente el impacto real de este cambio de normas se da en si afecta a los clasificados o no. Es decir, lo que tiene consecuencias es si se traspasa o no la barrera del décimo clasificado. Sin embargo, este punto de vista no permite ver el efecto completo. Es como si estuviésemos observando a través de la mirilla de una puerta: vemos una parte pero no el completo. Por eso, ¿cuál es el efecto completo de la ausencia del jurado en el resto de posiciones? ¿Existen regiones o países que se verían perjudicados o beneficiados? Abramos la puerta de par en par.
EL EFECTO SUBYACENTE: VUELTA AL DESEQUILIBRIO GEOGRÁFICO
Como decimos, es crucial observar el efecto del jurado en todas las posiciones y no solo en la barrera del décimo clasificado, puesto que eso no nos garantiza ver si hay un impacto real. Por tanto, en este apartado vamos a analizar el efecto del jurado en todas las posiciones.
Para ello vamos a empezar elaborando la diferencia entre la posición media de los países semifinalistas tanto en el televoto como en el jurado. El resultado está en el mapa siguiente. Los tonos cálidos indican los que tienen mejor posición media en el televoto y los colores fríos aquellos con mejor valoración en el jurado.
En cuanto a los beneficiados destacan 3 países: Polonia, Rusia y Turquía. En general se aprecia que los países al Este son mejor vistos por el televoto que por los jurados. Respecto a los mejor valorados por el jurado, volvemos a observar que se trata de países de Europa central además de los países insulares de Australia y Malta.
En los nórdicos no se ve un criterio conjunto, siendo Suecia el único que se beneficia más de los jurados. Tampoco hay criterio único ni en el báltico y en el Cáucaso. En cuanto a los yugoslavos, el televoto ve mejor a Serbia y Bosnia, los cuales ya hemos indicado que son los grandes beneficiados del televoto yugoslavo, mientras que en los periféricos, Eslovenia, Croacia y Macedonia del Norte, tienen mejor promedio en el jurado. Por último destacar el extremo balcánico, en donde no se observan diferencias entre televoto y jurado.
La conclusión de este gráfico es que ese beneficio que obtienen los países en azul del jurado va a desaparecer. El caso más destacable es el de Malta, que en los jurados tiene una media de 5,18 mientras que en el televoto es de 12,45, más de 7 puestos de diferencia. En el lado contrario la que más respira es Polonia, que promediaba una posición de 13 en los jurados y de 8,2 en el televoto.
Esto que vemos coincide en parte con el análisis parcial de cambios en los clasificados reales que veíamos al principio, que ya reflejaba que sin jurados Polonia saldría más beneficiada. Por tanto, lo que podemos esperar es que a la larga, no hablo ni de uno, ni dos, ni quizá tres años, empecemos a observar que los países en azul alcanzan menos la final mientras que los países en rojo se clasifican más fácilmente. Sin duda puede desmotivar la participación de los primeros, haciendo más improbable un retorno de Eslovaquia, por ejemplo; o favorecer el retorno de Turquía al festival, que promediaba 5,3 en el televoto frente al 9 del jurado.
No parece correcto extender el criterio a un enfrentamiento entre occidentales y orientales. Por ejemplo, en el lado occidental Portugal, Irlanda o San Marino tienen mejor promedio de televoto que de jurado. La falta de unanimidad también se da en el Este, donde Letonia, Georgia, Azerbaiyán e Israel son mejor vistas por el jurado.
En el gráfico anterior hemos visto la diferencia entre televoto y jurado. Ahora, vamos a visualizar la diferencia de puestos medios entre el resultado combinado de los últimos años, el real; y el televoto, que será el nuevo criterio a partir de ahora. El mapa es un resumen de los dos anteriores y vemos como los países que circundan Alemania han tenido más éxito gracias al resultado combinado. En cuanto a los beneficiados, solo destaca Polonia y en general el Este.
La conclusión principal de este análisis es que sí, a primera vista parece que no hay perjudicados o beneficiados, pero en cuanto al global de posiciones sí los hay y es de esperar que con el paso de los años se manifieste en los clasificados. Todo esto no tendría sentido si se debiera puramente a las canciones que cada año se envían, pero una vez que observamos patrones geográficos existe un desequilibrio que es ajeno al espíritu del concurso.
¿Y CÓMO AFECTARÁ AL RESULTADO DE LA FINAL?
Como extra, vamos a tratar de razonar cuál sería el efecto de la ausencia de jurados en las semifinales en los resultados de la final. Recordemos que la final se mantiene como hasta ahora, con televoto y jurado además del novedoso televoto internacional.
Con toda seguridad en las semifinales el televoto clasificará entre 1 y 3 canciones que el jurado no lo haría. Resumiendo, la audiencia clasificará a todas sus mejores canciones, pero no se clasificarán todas las favoritas del jurado. La competitividad, en consecuencia, será mayor en el televoto que entre los expertos.
Por tanto, los puntos en el televoto van a estar mucho más caros en la final, puesto que este criterio ha clasificado a las mejores canciones para ellos. En contraposición, los puntos del jurado serán más baratos puesto que les han clasificados temas que para ellos no lo merecían.
Sobre todo de cara al organizador y el Big5, será más fácil obtener puntos de los jurados pero será más difícil conseguirlos del televoto. Así que no sería de extrañar que los clasificados directos traten de seducir más a los jurados con baladas o canciones íntimas. Un doble cero como el de Reino Unido en 2021 sería mucho más difícil de obtener con este cambio y, de ocurrir, tendría mucho más mérito.
Muy curioso es estimar si este cambio afectaría al peso real del televoto y del jurado. Tradicionalmente hemos visto que el televoto tiene más peso puesto que discrimina más, mientras que el jurado reparte sus puntos de forma más equitativa y por tanto influye menos en el resultado final. El gráfico superior muestra la puntuación recibida por el ganador del televoto y del jurado en cada año. Se pone de manifiesto que el televoto entrega más puntos y por ello es más decisivo en el resultado final.
La disminución de la competitividad bajo el criterio de los expertos probablemente ayude a hacerlos más decisivos y a discriminar más, por lo que podrían ganar peso en el resultado final. Si a esto le añadimos un televoto más competido y no unánime, el jurado podría imponer más su criterio.
Aunque resulte paradójico o irónico, quitar un criterio de las semifinales, en este caso el jurado para dar más poder a la audiencia, aumentará el peso de la opinión de los expertos de cara a la final.
Para finalizar este blog, hemos comprobado que aunque a primera vista no exista un impacto real de la eliminación de los jurados en las semifinales de Eurovisión, sí existe un efecto subyacente que se pondrá de manifiesto a medida que pasen los años. Por otro lado, la decisión de dar más peso a la audiencia podría volverse en su contra de cara a la final. ¿Cuál es tu opinión sobre estos cambios? ¿Se quedan cortos o son muy ambiciosos? ¡Os leemos en los comentarios!