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Albania, Bulgaria, Chequia, Dinamarca, Lituania, Países Bajos, Rusia y San Marino protagonizan la segunda parte del Panel

12 miembros de Eurovision-Spain valoran (y puntúan) los temas de Anxhela Peristeri, Victoria, Benny Cristo, Fyr og Flamme, The Roop, Jeangu Macrooy, Manizha y Senhit en esta nueva sección previa a la próxima edición del festival
Vicente Rico · Fuente: Eurovision-Spain.com
Publicado el día 01 de mayo de 2021
victoria
Victoria (Lora Musheva)

Albania, Bulgaria, Chequia, Dinamarca, Lituania, Países Bajos, Rusia y San Marino protagonizan la segunda parte del Panel

Eurovision-Spain estrena una nueva sección previa a la inminente 65ª edición de Eurovisión que se celebrará los próximos 18, 20 y 22 de mayo en el Ahoy de Róterdam y en la que 12 de nuestros redactores y colaboradores opinan y votan a las canciones del festival. Al finalizar cada uno de los cinco capítulos de este especial se realizará una clasificación provisional que, a su vez, irá conformando el top 39 definitivo de nuestro equipo.

El panel, formado por Alonso Pérez, Daniel Adell, Emma Izquierdo, Eneko Cassi, Fran Bautista, Javi Regalado, Juan Manuel García, Lucas Vaquero, Milena González, Sandra Manzano, Sergio Castrelo y Vicente Rico, analiza en esta ocasión las candidaturas de Albania con Karma de Anxhela Peristeri, Bulgaria con Growing Up Is Getting Old de Victoria, Chequia con Omaga de Benny Cristo, Dinamarca con Ove os pa hinanden de Fyr og Flamme, Lituania con Discoteque de The Roop, Países Bajos con Birth of a New Age de Jeangu Macrooy, Rusia con Russian Woman de Manizha y San Marino con Adrenalina de Senhit.

Albania: Anxhela Peristeri - "Karma"

Alonso Pérez: Albania me ha causado una extraña sensación, me ha empezado a gustar de manera progresiva desde 0, no tenía ningún interés por Karma el día de su elección, pero ahora ha llegado este revamp y la he tenido que subir varios puestos en mi ranking. El instrumental me parece muchísimo más trabajado y ese sonido balcánico nos encanta. Espero que Anxhela consiga su pase a la final. Nota: 6

Daniel Adell: Me parece una canción de calidad y potente, marca albanesa. El problema es que este sello empieza a cansarme. Albania lleva enviando la misma artista y el mismo tema desde su debut, salvo honrosas excepciones. No me aporta nada nuevo y eso hace que la baje en mi top personal. Nota: 6

Emma Izquierdo: Podríamos decir que Albania lleva “lo de siempre” y ya no sorprende. Sin embargo, “lo de siempre” es calidad vocal, sonidos característicos e idioma propio, puntos que siempre suman. Aun así, es una propuesta que pasa desapercibida. Nota: 6

Eneko Cassi: La intérprete albanesa demuestran que tiene una gran calidad vocal y el revamp que han hecho ha mejorado mucho la canción dándole tintes étnicos que funcionan muy bien. Creo que la veremos en la final. Nota: 6

Fran Bautista: Albania siendo Albania. Karma es más o menos lo que nos esperamos que gane el FiK y, por ende, acabe representando al país adriático en Eurovisión, pero tal vez ese punto predecible hace que esté en la mitad de la tabla en la mayoría de los tops, incluyendo el mío. Tiene un aire que evoca a las grandes baladas balcánicas de los 2000, y Anxhela tiene un directo más que solvente, pero no apostaría mi dinero por una victoria albanesa. Y, ahora mismo, ni siquiera por su pase a la final. Nota: 6

Javi Regalado: La enésima cantante con vozarrón con la enésima canción con tintes étnico-dramáticos hace que la propuesta albanesa parezca la misma año tras año. Sigue teniendo las mismas virtudes pero, personalmente, ya aburre. Eugent fue un chorro de aire fresco, pero se ve que no hay muchos en Albania. La letra es todo lo intensa que prevé la música y habla de una chica que lo está pasando muy mal, la pobre. Un drama. En definitiva, es lo que se espera de Albania, y ese es tal vez su hándicap. Pasará a la final porque está en la semifinal floja, pero no creo que la veamos en el lado izquierdo de la tabla. Nota: 5

Juan Manuel García: Baladón épico típico balcánico, siguiendo la estela de los temas a los que nos tiene acostumbrados el Festivali i Këngës. Comienzo demasiado lento que da suficiente tiempo como para cambiar de canal, pero con paciencia se puede disfrutar del vozarrón de la recargada Anxhela. Nota: 7

Lucas Vaquero: Albania siendo Albania. Por ¡séptima! vez en 10 años, el jurado del Këngës elige como ganadora a una solista femenina con vozarrón, una balada épica y una carrera relativamente consolidada. Una pena que esta apuesta sea más conservadora y predecible que otras de corte similar, como en 2016 o 2019. Al menos el revamp no ha destrozado (tanto) la canción como en otras ocasiones y, afortunadamente, Anxhela ha tenido la valentía de mantenerla en albanés. De todas formas, los arreglos que le vendrían de perlas en el festival serían los de una orquesta en directo. Mención especial al vídeo que, sin ser muy original, al menos cuenta una historia, y a una de las letras más profundas y significativas del año. Nota: 6

Milena González: Tiene todo lo tradicional de una canción albanesa: Sonidos étnicos, interpretación dramática, una voz potente y un revamp maravilloso; y esto es algo que personalmente me fascina. Este año, contando con el increíble directo de Anxhela y la calidad de producción y promoción que se está viendo en los meses anteriores al festival, creo (y espero) que Albania acabará mejor de lo que dicen las apuestas y encuestas y al menos la veremos en la final. Nota: 8

Sandra Manzano: Una candidatura que a mí me pasa desapercibida, en la línea a lo que nos tiene acostumbrados Albania, y no le encuentro nada especial salvo el vozarrón de Anxhela. Nota: 6

Sergio Castrelo: Personalmente, es una de las pocas propuestas que suelo saltarme y apenas he escuchado dos o tres veces. No creo que ni siquiera con una buena propuesta escénica logre acaparar suficientes votos ni en la semifinal ni en una hipotética final. Nota: 3

Vicente Rico: Cliché eurovisivo y, digo más, topicazo albanés elevado a la enésima potencia. En su contra, una discutible, innecesaria y recargadísima versión para Róterdam y un horroroso videoclip que no deja muchas esperanzas para la puesta en escena. A su favor, el indudable vozarrón y la imponente belleza de Anxhela. Su público afín podría inclinar la balanza en la igualada segunda semifinal y podría llegar a ser un placer muy culpable. Nota: 5

NOTA MEDIA: 5,8

Lituania: The Roop - "Discoteque"

Alonso Pérez: El año pasado habría dicho eso de, #UnpopularOpinion, no me gusta On Fire. Quizá, no es que no me gustara, sino que no me parecía para tanto. Esta edición me retracto momentáneamente de esa mala idea porque Discoteque me convenció desde el principio. Tiene la esencia de The Roop, pero un poco más comercial. A día de hoy, no sé si ha envejecido todo lo bien que debiera, así que vamos a esperar a los ensayos para ver si cae alguna sorpresa para Lituania. Nota: 8

Daniel Adell: El estilo de este grupo es irreverente, despreocupado y apasionado por su música. Está claro que o gusta, o no gusta, y eso en Eurovisión siempre es bueno. Discoteque está bien trabajada, intenta alejarse de On Fire, pero manteniendo la esencia de The Roop. Un aplauso muy grande a este grupo y ojalá que Lituania no pierda la oportunidad de albergar Eurovisión, opción que cada día veo más lejana. Nota: 9

Emma Izquierdo: The Roop había puesto su propio listón muy alto en 2020 y, aunque para muchos Discoteque no esta al nivel de On Fire, el grupo ha dejado claro que este 2021 quiere seguir ganando el festival con una propuesta llamativa y original, de esas que se quedan en la retina del espectador. Nota: 9

Eneko Cassi: Los que se iban a proclamar ganadores en la edición del 2020 vuelven con una canción actual que, en mi opinión, supera a la del año pasado. Lo malo de The Roop es que ha perdido el factor sorpresa de su excentricidad. Sin duda, los veremos en la gran final, pero ganar ya es otro tema. Nota: 8

Fran Bautista: A The Roop los necesito ganando su semifinal y acababando en el top 5 de la final. On Fire era un temazo y una clara aspirante al triunfo, además de mi favorita personal, con el permiso de Italia, y creo que Lituania fue el país más perjudicado por la cancelación de Róterdam 2020, pero Discoteque no se queda atrás y tiene mucho mérito que el grupo haya sacado dos canciones tan buenas en dos años consecutivos. Yo, por mi parte, pienso ver la final con mi bufanda lituana y votaré por ellos varias veces en la final. Nota: 8

Javi Regalado: El gran problema de las grandes favoritas del año pasado que repiten este es que llegan con unas expectativas muy altas y es difícil cumplirlas. Parece claro que Discoteque no es On Fire, pero no se queda lejos, tiene el mismo aire y la misma originalidad en el sonido, solo que esta edición ya no nos suena tan original. También digo que ni la una ni la otra son mis preferidas y, además, tengo esa sensación de que si solo las escuchase no me llamarían la atención en absoluto. Sin embargo, su presencia escénica es brutal, y eso le dará muchos puntos. La letra dice lo que puede decir una canción que se titula Discoteque: que siente el ritmo y que vamos a bailar. La veremos ahí, bailando entre las 10 primeras. Nota: 8

Juan Manuel García: Tema actual y retro al mismo tiempo, ingenioso y cautivador, un producto innovador. La letra más simple puede a veces conducir al resultado más motivador y atractivo. Lituania merece el mejor de los éxitos este año simplemente por el serio interés que han mostrado en competir. Nota: 8

Lucas Vaquero: Uno de los patitos feos del festival se ha convertido en toda una pequeña potencia eurovisiva en dos años. The Roop ha dado en la tecla para arrasar entre los eurofans y entre el público lituano de a pie y, aunque no han inventado nada, sí han sabido combinar su carisma absolutamente arrollador con un sonido especial y característico y una propuesta escenográfica atractiva. El resultado es hipnótico y por momentos adictivo. Además, han sido muy inteligentes reinventándose y encontrando el equilibro propio entre su esencia y la necesaria innovación para seguir sorprendiendo. Ojalá consigan la mejor clasificación histórica del país en el festival o, por qué no, su primer micrófono de cristal. Nota: 8

Milena González: A The Roop no les importa jugar la carta bizarra y esto es algo que les beneficia. Discoteque no me ha atrapado de la misma forma que lo hizo On Fire, pero entiendo que pueda ser por esta experiencia previa. Aún así, la candidatura de este año tiene muchos puntos a favor, entre ellos la letra con la que toda Europa se puede sentir identificada. Nota: 6

Sandra Manzano: Para mí, mucho mejor que la del año pasado. Me parece una propuesta súper diferente y animada. Sin duda, se merecen estar en el Top 10. Nota: 8

Sergio Castrelo: Aún a sabiendas de que es una candidatura potente, no consigo visualizarla como potencial ganadora. Un tema pegadizo con una estética impactante, pero una coreografía y teatralidad que resulta excesiva, un claro ejemplo de que es necesario medir bien cada uno de los elementos de una propuesta para el festival. Si consiguen ese adecuado equilibro adecuado, el top 10 estará asegurado. Nota: 8

Vicente Rico: The Roop no solo se han igualado sino que se han superado a sí mismos. Entre los favoritos de Eurovisión 2020, han sido capaces de crear otra candidatura perfecta y, además, perfectamente hilada con la anterior. La escenografía, el vestuario y la coreografía son hipnóticos y, para embrujo, el del vocalista Vaidotas que es uno de los artistas más carismáticos y atractivos de la historia reciente del festival. Después de dos ediciones en vigor y tras su temprana designación este año, están llegando a Róterdam con una discreta inteligencia, pero no nos llevemos a engaño, van a estar y deberían estar muy arriba: Nota: 10

NOTA MEDIA: 8,2

Chequia: Benny Cristo - "Omaga"

Alonso Pérez: El año pasado no era nada fan de Benny Cristo, y su canción era una de esas que no me apetecía escuchar, pero de repente nos ha traído Omaga y… oh my god, ¡Me encanta! Un claro ejemplo de como saber aprovechar su segunda oportunidad en el festival y espero que le lleve directo a la final. Nota: 8

Daniel Adell: Empiezo por lo que no me gusta: la letra. Me parece basiquísima y a veces rozando la tontería. El ritmo de la canción salva los muebles y, sobre todo, la actitud de Benny que es arrolladora y la gran baza de esta candidatura. Si consigue transmitir buen rollo y jovialidad, tendrá mucho camino recorrido. Nota: 5

Emma Izquierdo: Omaga es una canción pegadiza que combina sonidos actuales con la esencia más étnica y callejera que Benny Cristo ya nos presentó en 2020 con Kemama. Aunque en mi opinión se queda algo lejos de su predecesora, el país confirma que no quiere ser carne de semifinal. Nota: 7

Eneko Cassi: Omaga es una canción fresca que la escucharíamos perfectamente en la radio del coche mientras estamos en el atasco de primera hora camino al trabajo. ¿Pasará a la gran final? Tengo mis dudas. Nota: 5

Fran Bautista: Benny puede ser uno de los tapados de esta edición, ahora mismo está de los últimos en las apuestas y en muchos tops (spoiler: incluido el mío), pero no descartemos un buen puesto. Omaga tiene un ritmo interesante y, sobre todo, él tiene un gran directo y funciona muy bien en el escenario. Además, muchas veces las canciones que quedan mejor en el festival son las que se alejan del cliché. Con todo, no le puedo dar más que un aprobado. Nota: 5

Javi Regalado: Una canción movida y supuestamente bailable que se me hace insufrible, monótona hasta la exasperación, y con una letra completamente insulsa coronada por ese irritante «Omaga». Para mí, es de lo peor del año, y me cuesta pensar que alguien vaya a mover un dedo para votar por esta canción que pasará por la historia del festival como si fuera una mosca volando entre el telespectador y la pantalla: ni te enteras. Nota: 2

Juan Manuel García: Chequia ha querido seguir la estela de los éxitos cosechados en los últimos años con un tema rítmico y envolvente interpretado por un joven solista masculino. Sin embargo, las similitudes con las propuestas que el país ha llevado en anteriores ediciones juegan en su contra, así como la dificultad para distinguir el puente del estribillo. Nota: 6

Lucas Vaquero: Eurovisión se va abriendo a nuevos estilos, pero algunos tienen más problemas que otros para encajar, por eso me parecen tan necesarias candidaturas como esta. Igual que el año pasado, me parece una propuesta infravaloradísima, de esas que dan la sorpresita en el televoto. Omaga tiene a su favor un sonido propio y diferenciado de casi todas sus competidoras, pero en contra pierde parte de la personalidad y autenticidad de Kemama, quizá tratando de agradar al público generalista. Hay que atreverse a destacar en Eurovisión. Benny me cae muy simpático y el videoclip plagado de referencias es una maravilla. Ojalá sea el «dark horse» de la edición. Nota: 8

Milena González: Siendo consciente de que probablemente no le den el premio a la mejor letra, ya que es bastante insulsa, Omaga me parece una propuesta realmente buena. A Chequia hay que agradecerle que estos últimos años nos haya dado temas tan juveniles y radiables que pueden tener mucho recorrido después del festival. Contando también con el carisma que irradia Benny Cristo, es una de las candidaturas que más ganas tengo de ver en el escenario de Róterdam. Nota: 8

Sandra Manzano: Justo lo que necesitábamos este año. Una candidatura fresca, divertida y alegre. Además, Benny Cristo ya demostró que tenía un directazo. Mi favorita, sin duda. Nota: 10

Sergio Castrelo: Una candidatura que parece perderse en medio de un año en el que las propuestas más uptempo no llegan a destacar. Casi aventuraría que Benny Cristo se apeará en su semifinal en medio de muchas sombras y pocas luces. Nota: 4

Vicente Rico: Una fortaleza y una debilidad: Omaga es una canción perfecta para la radiofórmula, especialmente para el inminente periodo estival, pero a la vez es tan genérica que puede perderse con facilidad en una competición. A pesar de que la escucho con agrado, personalmente pienso que la denostada Kemama tenía mucha más personalidad y autenticidad. El carisma y encanto de Benny, no obstante, podría ser suficiente para conseguir por sí sólo dar la sorpresa y clasificarse para la gran final. Nota: 6

NOTA MEDIA: 6,2

Rusia: Manizha - "Russian Woman"

Alonso Pérez: Russian Woman es una canción que me atrae en directo, pero luego la escucho en Spotify y me quedo frío. El descaro que desprende Manizha unido a su interpretación, estos sonidos y la letra feminista hacen que sea un cóctel explosivo. A pesar de no poder contar con la presencia de Little Big en Róterdam, han sabido elegir a una buena sustituta para luchar por una buena posición en el festival. Nota: 7

Daniel Adell: ¡Me vuelve loquísimo! Es de lo más original de esta edición, con un mensaje claro e importante, y más viniendo del país que viene. Ella tiene una telegenia arrolladora y la fusión de sonidos actuales con los tradicionales me parece lo más. Ojalá quede mejor que muchas otras canciones de la historia de Rusia en Eurovisión. Nota: 8

Emma Izquierdo: Una de las pocas canciones de la edición que no he podido escuchar más de dos o tres veces. Tanto en lo musical como en lo estético, es una propuesta diferente acompañada de un mensaje más que necesario, pero después de la candidatura tan potente de Little Big se me queda muy corta. Nota: 5

Eneko Cassi: Bajonazo máximo después de Little Big en 2020. Manizha lo intenta, pero ni tiene buena canción, ni buena voz. Pasará a la final porque es Rusia, y al menos tiene un estilo que se diferencia de otras, pero para mí es un gran «no». Nota: 3

Fran Bautista: A primera escucha, me pareció una canción un pelín estridente y solo me resultó interesante el coro del estribillo. Sin embargo, después de prestarle más atención a la letra, ver la actuación un par de veces más y conocer la historia de Mazinha, creo que es una de las grandes propuestas de este año: la canción tiene un mensaje muy necesario, más aún en la Madre Rusia, Mazinha reivindica con ella sus raíces y el estilo es bastante diferente de todos sus competidores y, por último, se agradece volver a escuchar el ruso en Eurovisión. Además, ella tiene un gran directo. Nota: 7

Javi Regalado: Ni el revuelo ocasionado, ni todo el ruido, ni lo bien que pueda caerme Mazinha o lo muy de acuerdo que pueda estar con sus reivindicaciones y lo muy en contra de los ataques que ha recibido, consiguen que me entre esta canción. Lo siento. No consigo desprenderme de la idea de estar escuchando «El chiki-chiki» en ruso, y únicamente el estribillo y sus tres segundos de duración, me parece potente y salvable. La canción es un grito feminista, y eso hace que le suba un par de puntos a mi nota final, pero ni así llega al aprobado. Si fuera cualquier otro país, se quedaría en semifinales, pero Rusia siempre juega con un bonus de puntos extra que igual le alcanza para pasar. Nota: 4

Juan Manuel García: Pastiche de ritmos y lenguas. Se agradece que el tema sea interpretado parcialmente en ruso, aunque esto no suple ni mitiga el toque freak de la propuesta que probablemente desconcertará al espectador medio. Pese a todo, las inercias habituales en la votación la ponen en buena disposición para conseguir el pase a la final. Nota: 6

Lucas Vaquero: Bienvenido sea que la televisión rusa apueste por un cambio tan radical de estrategia, personalmente, estaba saturado de la artificiosidad y control que acostumbra a rodear a este país en el festival y prefiero, con mucha diferencia, la espontaneidad y naturalidad de Manizha que tiene muchísima garra, se crece en el directo y nos trae de nuevo el idioma ruso. Su talón de Aquiles, estar demasiado destinada al público local, lo que le dificultará la escalada especialmente en el jurado. A destacar, la valentía de Manizha de presentar un tema tan controvertido y mantenerse firme frente al odio. Ojalá se recompense y a partir de ahora redescubramos a una Rusia más auténtica y menos impostada en Eurovisión. Nota: 9

Milena González: Russian Woman es auténtica y actual a partes iguales, el coro al comienzo del estribillo conecta con la tradición y las estrofas son mucho más modernas, es una canción muy bien construida y gana muchísimo en directo. Ojalá esto sea el comienzo de una nueva etapa para Rusia en Eurovisión. Nota: 7

Sandra Manzano: Otra candidatura muy diferente, cada día que la escucho me va gustando un poco más, aunque aún no termina de convencerme del todo. Nota: 6

Sergio Castrelo: Sin lugar a dudas, 2020 hubiese sido un gran año para Rusia, pero este 2021 ha sido un cartucho desaprovechado sin una clara motivación. Russian Woman es una canción correcta con un arreglo actual que perfectamente podría ser la pista de relleno en un disco modelo. Nota: 4

Vicente Rico: Canción que se crece en directo gracias al carisma, la naturalidad y la personalidad arrolladora de Manizha, lo cual es de agradecer en una candidatura rusa, siempre tan prefabricadas y pretenciosas. El turbo folk es una de mis debilidades, aunque aquí le habría dado una vuelta a la versión de estudio que se queda un poco cortita de vodka. La mayoría sentimos el descarte de Little Big, aunque solo sea por todo lo que su nombre puede aportar a la marca Eurovisión, pero no tengo ninguna duda de que esto va a estar en la final y en la parte izquierda del tablero. Nota: 7

NOTA MEDIA: 6,1

San Marino: Senhit - "Adrenalina"

Alonso Pérez: Tengo una gran debilidad con San Marino desde que se presentó Adrenalina. Senhit ha dado un paso de gigante, tras ser una de las colistas en las apuestas del año pasado con Freaky!, y ha dado un golpe en la mesa trayendo uno de los mejores bops de la edición. Esta «adrenalina» es puro fuego, un exitazo de principio a fin, y la fusión con Flo Rida me parece brutal. Olé por San Marino que este año ha venido a ganar. Nota: 10

Daniel Adell: Entiendo el furor que ha causado esta candidatura, pero los dos factores que la caracterizan me parecen mediocres, ella, una cantante con un registro bastante limitado, y Adrenalina, una petardada más sin nada que destacar. Me da miedo la mamarrachada que puedan presentar en directo, y esto será crucial para ofrecer una actuación decente y original o montar un circo. Voy a decirlo: prefiero a Senhit cantando Stand By en 2011. Nota: 7

Emma Izquierdo: Independientemente de su resultado y la presencia de Flo Rida con Senhit en Róterdam, San Marino seguirá siendo sin duda la sorpresa de la edición y uno de esos hits eurovisivos que seguiremos escuchando dentro de muchos años. Nota: 9

Eneko Cassi: El sorpresón de la edición. Senhit llega a Róterdam con una canción que te hace moverte y se te queda en la cabeza como en su día Fuego o Toy. Flo Rida, realmente, me sobra. Deseando ver pelucones de colores y tonterías varias en el escenario. Estará en la final y conseguirá un top 5. Nota: 9

Fran Bautista: Menuda fantasía de representante ha resultado ser Senhit, entre su Freaky Tour to Rotterdam, su participación en la PrePartyES y su simpatía innata, no se le puede reprochar nada. Encima, se ha sacado de la manga un temazo con nada más y nada menos que Flo Rida. Tal vez no es la mejor canción del mundo, ni la más innovadora, pero sí es una buena propuesta para bailar y disfrutar en el festival y fuera de él y, tal vez lo más importante, es una candidatura que demuestra la cantidad de cosas que puede hacer una delegación que lucha por ganar o, al menos, quedar bien. Ya veremos qué tal les funciona. Yo tengo mis reservas. Nota: 7

Javi Regalado: Senhit se ha pasado el año versionando canciones históricas del festival y ya sólo por eso me resulta simpática. Además, no hay duda de que San Marino va a por todas y eso siempre es de agradecer. Un festival en la Serenísima República sería una fantasía, literalmente, ya que no cuentan con ningún recinto apropiado. La canción, sin embargo, parece estar hecha por el algoritmo de los hits eurovisivos de los últimos años y tiene todos los clichés post Foureira. Esto le resta autenticidad y la hace aburrida. La letra, para colmo, también habla del tópico «ven y arde conmigo», así que nada que rascar por ahí tampoco. Pasará holgadamente a la final, porque así lo vaticinan las apuestas, pero para mí es un bluf. Nota: 5

Juan Manuel García: San Marino se lo toma en serio esta edición, aunque llega tres años tarde con esta canción que suena a versión 2.0 de Replay. La parte semirapeada resulta innecesaria por anacrónica. Pese a todo, San Marino presenta una de sus mejores propuestas. Si Serhat consiguió el pase cantando como una cabra, es justo que Senhit también lo logre. Nota: 7

Lucas Vaquero: La Serenísima ha pegado el mayor petardazo de este año. Por si la insistencia de la Monetta o las excentricidades de Serhat no habían sido suficientes, Senhit tira la casa por la ventana y se trae ni más ni menos que a Flo Rida. Adrenalina es un tiro, un bopazo sin complejos que entra directo y se queda grabado a primera escucha. San Marino es, con diferencia, el país que más ha mejorado desde la pasada edición y mayúscula tendría que ser la catástrofe para que no alcanzar su mejor resultado histórico. Eso sí, me genera muchísimas dudas el directo y la escenografía, porque la fiesta y la estética del videoclip serán muy difíciles de trasladar al escenario, pero este barco zarpa hacia muy buen puerto. Nota: 7

Milena González: Adrenalina es el temazo eurovisivo del año que escucharemos, si nos dejan, en los bares y discotecas. Es una canción buena, pegadiza, muy bien producida y con un feat reconocible aunque, admitámoslo, Flo Rida es una superestrella de hace 10 años. Tiene el potencial de darle a San Marino su primer Top 10. Quizá, lo que más incertidumbre me produce es su actuación, ya que teniendo en cuenta las superproducciones de Senhit en el Freaky Trip to Rotterdam, mezclando temas de años anteriores con conceptos escenográficos muy particulares, una puesta en escena demasiado extravagante podría restarles posibilidades. Nota: 7

Sandra Manzano: Un temazo en toda regla. Una canción súper pegadiza con la que te entran ganas de bailar y cantarla a pleno pulmón. Nota: 8

Sergio Castrelo: Ritmos bailables y el carisma de Senhit; una combinación que explota en Adrenalina. A pesar de ello, la canción no parece contar con el coctel perfecto para destacar y deberá contentarse con ofrecer un poco de luz en medio de las baladas y ritmos más oscuros de la edición. Nota: 5

Vicente Rico: Candidatura de laboratorio, pero muy bien defendida y trabajada. Senhit no tiene nada que ganar ni que perder, ha venido a pasárselo bien, y ese disfrute traspasa la pantalla y va a atraer muchas simpatías y muchos votos. La compañía de Flo Rida ha sido una estrategia promocional muy inteligente para llamar la atención y llegar a nuevos públicos que de otra forma sería imposible, pero artísticamente a mí me sobra por completo. Adrenalina se va a convertir en un clásico de Euroclub y debería ser el perfil de propuesta que represente a España, pero no lo hará hasta que lo hayan probado todos los países y la teta ya esté ordeñada. Nota: 8

NOTA MEDIA: 7,4

Dinamarca: Fyr og Flamme - "Øve os på hinanden"

Alonso Pérez: Le he intentado dar múltiples oportunidades a esta canción pero, por más que intento encontrar su atractivo, no sé donde lo tiene. Personalmente, me produce más indiferencia que la Vuelta Ciclista a España, y si alguna vez suena en mi móvil le diré a Siri que la pase. No sé si es porque los coros están muy altos, pero en directo no me suena bien, y tampoco me convence ni el vestuario ni la puesta en escena. A ver qué ocurre en la semifinal este año. Nota: 5

Daniel Adell: Tengo una contradicción con esta propuesta. La considero una de mis «protegidas», porque me gusta bastante y creo que no está muy bien valorada por el público en general, pero a la hora de ponerla en mi top se me queda en el #28. Me gusta por ese sonido ochentero, y ya no es que se haya inspirado en los 80’s, sino que realmente parece que ha sido compuesta hace 30 años. Ellos dos me parecen majos, pero sin más. Nota: 6

Emma Izquierdo: Personalmente es una canción que no me disgusta, se deja escuchar y saca una sonrisa. Sin embargo, se queda lejos de las anteriores candidaturas danesas y no está al nivel de las propuestas de la mayoría de sus competidores en la segunda semifinal. Nota: 6

Eneko Cassi: Sé que los ochentas han vuelto, pero Dinamarca ha partinado con Fyr & Flamme y nos presenta un espectáculo bastante casposito a la altura de «La Toñi» y realizado por José Luis Moreno. Se hace aburrido y no tiene gracia. Nota: 2

Fran Bautista: El dúo de nombre impronunciable que canta la canción danesa de este año, también de nombre impronunciable, tiene un claro propósito: revivir la esencia schlager de los ochenta. Y es lo que hacen. Y a lo grande, viendo los resultados en el DMGP y su número 1 de ventas en Dinamarca. Por mi parte, es un estilo con el que no comulgo en absoluto y no me gustaría aunque fuera el mejor tema de su clase, pero creo que es una clara finalista, por mucho que nos pueda pesar a algunos. Como no me gusta suspender a nadie, mi nota es un aprobado. Nota: 5

Javi Regalado: Da un poco de ternurita ver a esta pareja salir a darlo todo con una canción que bien podría ser la representación de Dinamarca en 1986. El problema es que, aparte de ese toque vintage y nostálgico, aquí no hay nada más que sea salvable. Ni siquiera han hecho un videoclip que hiciese olvidar la esperpéntica y desafinada actuación en el Dansk Melodi Grand Prix. La canción no tiene ni una letra que la rescate, una también ochentera oda a las pistas de baile, ni un cantante solvente ni mucho menos carismático. Reconozco, eso sí, que con un poco de alegría extra en el cuerpo yo bailaría más esta canción que la Adrenalina de Senhit. Nota: 2

Juan Manuel García: Dinamarca sorprende con un tema retro ochentero. El problema es que el retro ochentero ya es en sí retro y los anteriores intentos eurovisivos de este estilo no consiguieron fructificar. Calidad vocal discutible del cantante del dúo. A valorar que Dinamarca vuelva a cantar en su propio idioma tras varios años sin hacerlo. Nota: 6

Lucas Vaquero: El DMGP es, posiblemente, la preselección europea que menos me suele interesar. Canciones de radiofórmula, básicas, genéricas, y así desde 2014. Sin embargo, esta me chifla y es mi guilty pleasure de la edición. No sólo es que canten en danés por primera vez desde 1997, ni que recuperen descaradamente un sonido ochentero que por momentos recuerda a Tommy Seebach, sino que además me parece un tema mucho más sencillo y menos pretencioso de lo habitual en los países escandinavos, no es ambiciosa ni genera expectativas y se limita a ser una melodía alegre y pegadiza. Además, ellos me convencen, tienen telegenia y un directo más o menos solvente, Me gustaría que diese la sorpresita. Nota: 8

Milena González: Cuando escucho Øve Os På Hinanden me divierte, tiene un sonido ochentero y alegre que hace fácil que disfrutes la canción. El problema en mi caso es la actuación, al menos en su presentación en el DMGP, ya que capta tan exactamente la esencia de los 80 como la actitud, los gestos o el vestuario que me recuerda a un karaoke a altas horas de la noche. Teniendo la última plaza en la semifinal, espero que cambien o actualicen el concepto. Nota: 5

Sandra Manzano: No termina de convencerme, reconozco que es una canción muy alegre, pero no creo que tenga nada de especial. Nota: 4

Sergio Castrelo: Una ración de sintetizadores, teclados y reminiscencias de los 80’s y 90’s que no pasará desapercibida en un momento en el que se ha puesto de moda este estilo musical de nuevo. No considero que vaya a ser una candidatura destacada y tal vez deba luchar para hacerse un hueco en la final. A pesar de ello, es un producto solvente. Nota: 6

Vicente Rico: 100% Dinamarca, para lo bueno y para lo malo. Dentro de la ya insoportable fiebre ochentera que estamos sufriendo y que, como no podía ser de otra forma, ha terminado contagiando también al festival, me parece la propuesta más auténtica en su estilo de la edición. La reencarnación sonora de Tommy Seebach, por una parte, me gusta bastante, pero la imagen de Fyr og Flamme, por la otra, no, hasta tal punto que su actuación me resulta exasperante. Sin embargo, a buena parte del público centro europeo podría traerle buenos recuerdos y caerles en gracia. Nota: 4

NOTA MEDIA: 4,9

Países Bajos: Jeangu Macrooy - "Birth of a New Age"

Alonso Pérez: Me encanta la música de Jeangu y, aunque haya bajado varios puntos desde Grow, personalmente tengo que reconocer que estos sonidos (creo que) africanos que nos ha presentado en esta ocasión me flipan. No es la canción más competitiva del uni-universo, pero en mi cabeza suenan tantas veces estos ritmos de rebelión que, aunque quede última, voy a disfrutarla todo lo que pueda en su camino a Róterdam. Nota: 8

Daniel Adell: Me da lástima que el público genérico no vaya a valorar como se merece una propuesta tan distinta y apasionada. Siempre agradezco estos sonidos indígenas no-europeos porque traen aire fresco y diversidad. Además, Jeangu tiene pinta de ser muy respetuoso con sus raíces. Sé que la canción no es competitiva y tiene el último lugar de la final grabado a fuego en la frente, pero en esta casa se apoya este año a Países Bajos. Nota: 7

Emma Izquierdo: Probablemente a Países Bajos le pase lo que a muchos países cuando son anfitriones, presentan una buena propuesta de calidad y con entusiasmo, pero pasa sin pena ni gloria entre el resto de candidaturas. Aún así, por su originalidad, los sonidos africanos y la voz de Jeangu Macrooy el tema se lleva mi notable. Nota: 7

Eneko Cassi: Veo esta candidatura y me pregunto: ¿Es lo mejor de Países Bajos para este año? Canción de relleno en el festival para darnos un respiro durante la final y hacer nuestros “quehaceres”. De no tener, no tengo ni siquiera una opinión de esta canción. Nota: 3

Fran Bautista: Este tipo de candidaturas me generan sentimientos encontrados. Por un lado, me parece muy loable que Jeangu haya compuesto algo tan diferente y tan alejado de los estereotipos. Además, siempre se agradece añadir nuevas lenguas al libro de historia eurovisiva. Por otro, Birth Of A New Age me parece una canción relativamente plana, que puedes disfrutar escuchando, pero de la que a los pocos minutos apenas recuerdas el “Broko mi” que tantos memes nos ha dado. Nota: 5

Javi Regalado: Las canciones con raíces africanas rara vez han triunfado en el festival. En esta ocasión, el origen no es África, sino Surinam, pero la el tema respira por todas partes aires de África. Desde luego no opta a ganar y le falta algo de gancho, pero está bien hecha, es auténtica, tiene unas voces e imagen coherentes, está bien cantada y tiene unos estupendos coros que esperamos que en Róterdam suenen en directo. La letra habla de la época del fin de la exclavitud, pero lanzando un mensaje de energía que es aplicable al hoy y roza, además, la actualidad del Black Lives Matter. El pase a la final ya lo tiene, aunque mucho me temo que no la veremos salir de los fondos de la tabla. Nota: 6

Juan Manuel García: Decepcionante propuesta neerlandesa. Excesivamente repetitiva, con un inicio demasiado largo que no termina de enganchar, y cuando crees que llega el estribillo, era aquello que pensabas que era el puente, y vuelta a empezar. A destacar los ritmos étnicos y la capacidad interpretativa de Jeangu, pero poco más. Nota: 5

Lucas Vaquero: Jeangu Macrooy es uno de los mejores artistas del año por su personalidad, su madurez artística y por la calidad musical de su todavía breve trayectoria. Precisamente, ese talento y cualidades le han permitido reinventarse y tomar una dirección completamente distinta a la de 2020. Frente a la opinión mayoritaria, Birth of a New Age me parece una de las mejores propuestas de la edición, rotunda, original y totalmente alejada de lo que podría esperarse del anfitrión. Quizá, la tranquilidad como organizadores les ha permitido arriesgarse con algo fuera de lo ordinario. No me atrevo a pronosticar cómo quedará el 22 de mayo, probablemente, mal, pero ese «Yu no man broko mi» va a sonar memorable en casa. Nota: 9

Milena González: Más allá de que la melodía o estilo de la canción puedan gustar más o menos, creo que hay mucho que decir sobre la letra, para mí la mejor de todo Eurovisión 2021. Aprecio mucho la valentía de Jeangu, y también la de Países Bajos, por cantar sin ningún tipo de tapujos sobre la represión y colonización de las que muchos países de Europa han sido partícipes y por dar voz a los territorios que sufrieron estas consecuencias. La llamada a la rebelión, a las raíces y la inclusión del sranan tongo hacen a esta propuesta totalmente auténtica y muy especial, y considero que su mensaje merece ser escuchado el próximo 22 de mayo. Además, a mí me parece pegadiza. Nota: 9

Sandra Manzano: Una propuesta súper diferente a la del año pasado. A mí esta canción me deja un poco fría, sobre todo teniendo en cuenta que la de la pasada edición me encantaba. Nota: 4

Sergio Castrelo: Como anfitrión la desventaja siempre es mayor y, por tanto, la mejor opción siempre es llevar un producto de calidad y diferenciado. Y Jeangu Macrooy ha traído una canción llena de referencias culturales que bien podría ser la propuesta más arriesgada de esta edición. Nota: 7

Vicente Rico: Mi protegida de la edición. Me fascina el góspel, los sonidos africanos y caribeños y la fusión de todo ello con el rock, pero más allá de mis gustos personales, no entiendo el odio que recibe esta candidatura. Probablemente no sea competitiva, actúe entre dos favoritas y termine al fondo de la tabla, pero desde luego es una delicatessen. Sí comparto que es una propuesta extraña como anfitriona, pero también es cierto que cuándo mejor que ahora. Nota: 9

NOTA MEDIA: 6,6

Bulgaria: Victoria - "Growing Up Is Getting Old"

Alonso Pérez: La verdad es que Victoria me parece el culmen de la delicadeza y la sencillez. Bulgaria lleva ya varios años llevando buena música a Eurovisión y este cuenta con muchos ingredientes para llevarse el micrófono de cristal a casa. Growing up is getting old tiene un puente tan bonito que me provoca un huracán de emociones. La quiero en el top 5, por favor y gracias. Nota: 10

Daniel Adell: La delicadeza es su seña de identidad y tanto la intérprete como la delegación búlgara saben jugar con esto. Quizá su mayor problema es la falta de impacto inicial que sí tuvo el año pasado. Aun así, la canción me parece una delicia y consigue emocionarme por su calidez. Victoria tiene tablas y con una escenografía sobria pero efectista puede arrasar en muchos aspectos. ¿Ganar? Eso ya lo pongo en duda está edición. Nota: 9

Emma Izquierdo: Victoria trae de nuevo elegancia, serenidad y emoción al festival, aspectos que siempre tendrán asegurado un puesto en la final, más si se trata de una propuesta con calidad indiscutible. Sin embargo, la canción puede pecar de plana y hacerse larga si no consigue captar tu atención desde el principio. Nota: 7

Eneko Cassi: Victoria tiene una bonita voz y poca expresividad a lo Lana del Rey. Canción intimista digna de ser parte de una banda sonora de una película adolescente de Netflix. Una propuesta bonita que pasará a la final sin dudas. Nota: 7

Fran Bautista: Victoria tiene una voz mágica y su proyecto A Little Dramatic es muy interesante como “preselección”, además de un gran disco en el que prácticamente todas las canciones habrían sido dignas representantes de Bulgaria en Eurovisión. Growing Up Is Getting Old tal vez palidece un poco en comparación con la grandiosa Tears Getting Sober, pero confiaremos en que consiga un buen puesto en Róterdam, que además será muy merecido. Nota: 8

Javi Regalado: Empiezo por el final: es mi único 10 de la edición. Tears Getting Sober ya era maravillosa y mi absoluta ganadora, pero Growing Up is Getting Old no le va a la zaga. Es deliciosa, con una sensibilidad única, con personalidad y complejidad, y con un crescendo que, sin caer en tópicos, te va atrapando y te envuelve en su atmósfera mágica hasta desembocar en un final dulce y frágil. La letra, que habla de las dificultades para entenderse a uno mismo cuando la cabeza y la lucidez no acompañan, es igualmente bella. En definitiva, una auténtica joya que, si consigue trasladar toda su magia al escenario del Ahoy, tiene muchas papeletas para ganar. Y yo tan contento. Nota: 10

Juan Manuel García: De esos temas para los que se tiene que tener paciencia y escuchar hasta el final por ir desarrollando una historia que rompe y emociona en sus últimos acordes. Un estilo intimista y minimalista que ha demostrado funcionar en los últimos años en el festival, con una intérprete con una calidad vocal y color de voz incuestionables. Nota: 7

Lucas Vaquero: Sin ser mi canción favorita, Tears Getting Sober me sonó a ganadora absoluta desde la primera vez que la escuché, y a pocos países les perjudicó tantísimo la cancelación de Eurovisión 2020 como a Bulgaria. Lamentablemente, ninguno de los temas del nuevo EP de Victoria tiene esa magia, a pesar de ser geniales en su mayoría. Growing Up Is Getting Old era la opción más segura y conservadora, pero la delicadeza, el dramatismo y la tristeza general de su proyecto artístico ha perdido parte de la seducción que conquistó a tanta gente a primera vista, y eso podría pasarle factura entre el resto de favoritas. Sus mejores bazas siguen siendo su carisma y una actuación que logre emocionar a Europa. Nota: 8

Milena González: Sé que el tema como candidatura no debería juzgarse comparando con el resto de opciones de la preselección, pero Growing Up is Getting Old era de las que menos me gustaban del EP. Me parece agradable de escuchar y Victoria tiene una voz y un directo preciosos, pero no consigue emocionarme de ninguna de las maneras como lo hizo con Tears Getting Sober. Aún así, creo que el concepto estará muy cuidado y nos dará una muy buena actuación el próximo mes. Nota: 6

Sandra Manzano: Qué bonita es Victoria, qué bonita su voz y qué bonita esta canción. Siempre se me termina cayendo una lagrimita cada vez que la escucho. Es una preciosa. Nota: 10

Sergio Castrelo: Victoria nos aporta una de esas voces que, por su peculiaridad, destaca. Un producto moderno muy en consonancia con la actualidad musical inernacional. Bulgaria nos tiene acostumbrados a una calidad musical y puestas en escena que conseguirán explotar al máximo el producto de Victoria y acercarla a un mas que posible top 10. Nota: 9

Vicente Rico: Victoria tenía imposible igualar la obra maestra de Tears Getting Sober, pero puede darse por satisfecha de haberse quedado cerca. Una joyita de canción, delicada y dulce, y a la vez fuerte y emotiva. La única pega que puedo y quiero poner es que me llegan más sus interpretaciones desnuda, sin disfraces innecesarios, y creo que la naturalidad y sencillez que en ocasiones pierde es una clave para su actuación y resultado. Me parece una de las artistas más interesantes de esta doble edición y ojalá siga tan bien rodeada en lo que debería ser una prometedora carrera musical. Nota: 9

NOTA MEDIA: 8,3

EL PANEL: Clasificación provisional

CAPÍTULO 2

1º. Bulgaria: Victoria – Growing Up Is Getting Old: 8,3
2º. Lituania: The Roop – Discoteque: 8,2
3º. San Marino: Senhit – Adrenalina: 7,4
4º. Países Bajos: Jeangu Macrooy – Birth of a New Age: 6,6
5º. Chequia: Benny Cristo – Omaga: 6,2
6º. Rusia: Manizha – Russian Woman: 6,1
7º. Albania: Anxhela Peristeri – Karma: 5,8
8º. Dinamarca: Fyr og Flamme – Ove os pa hinanden: 4,9

CAPÍTULO 1

1º. Malta: Destiny – Je me casse: 8,7
2º. Rumanía: Roxen – Amnesia: 6,9
3º. Serbia: Hurricane – Loco loco: 6,4
4º. Moldavia: Natalia Gordienko – Sugar: 6,3
5º. Letonia: Samanta Tina – The Moon is Rising: 5,8
6º. Austria: Vincent Bueno – Amen: 5,7
7º. Portugal: The Black Mamba – Love Is On My Side: 5,4

TOTAL

1º. Malta: Destiny – Je me casse: 8,7
2º. Bulgaria: Victoria – Growing Up Is Getting Old: 8,3
3º. Lituania: The Roop – Discoteque: 8,2
4º. San Marino: Senhit – Adrenalina: 7,4
5º. Rumanía: Roxen – Amnesia: 6,9
6º. Países Bajos: Jeangu Macrooy – Birth of a New Age: 6,6
7º. Serbia: Hurricane – Loco loco: 6,4
8º. Moldavia: Natalia Gordienko – Sugar: 6,3
9º. Chequia: Benny Cristo – Omaga: 6,2
10º. Rusia: Manizha – Russian Woman: 6,1
11º. Albania: Anxhela Peristeri – Karma: 5,8
12º. Letonia: Samanta Tina – The Moon is Rising: 5,8
13º. Austria: Vincent Bueno – Amen: 5,7
14º. Portugal: The Black Mamba – Love Is On My Side: 5,4
15º. Dinamarca: Fyr og Flamme – Ove os pa hinanden: 4,9

Conversación

11
TOP
03/05/2021

Pues a mi Dinamarca me encanta, alegre, divertida, juvenil, sencilla, te levanta el animo, me da igual que sea ochentera o noventera, de las que más me gustan de este año.

8
TOP
02/05/2021

Para mí una canción que repite Loco loco, que no cuenta nada en el resto de las estrofas, con ritmo machacón y con 3 chavalas en continuo postureo y morritos no me parece de calidad. Nos puede gustar más o menos, pero calidad musical tiene poca. En cambio, Portugal lleva una historia real detrás, con un estilo exportado de Estados Unidos pero que lo hacen propio, con una voz muy personal... Años luz uno de otro. Que también tienen que ver los gustos personales y que nos parezcan más o menos aburridas o divertidas, por supuesto, pero la diferencia cualitativa es evidente. Pero bueno, no deja de ser sólo mi opinión. Y valoro y agradezco la opinión de los demás.

3
TOP
02/05/2021

@MJD a qué te refieres cuando hablas de calidad musical?, a estilo o género musical será, porque en carisma es inferior a otras que has nombrado, en personalidad lo mismo, en directo igual, y en diferenciación si, es diferente. Luego podemos hablar de otras muchas cosas en la que son inferiores también, espectáculo, diversión, producción, presencia escénica..,a tí te gusta más que las otras canciones pues chapeau, pero no hables de calidad musical.

8
TOP
01/05/2021

Sigo pensando que se infravalora demasiado a Portugal. No puedo entender cómo está tan baja en la tabla y encima superada por canciones de calidad discutible como Serbia, Moldavia, Letonia o República Checa. Ya sé que es cuestión de gustos (y en eso no hay nada que rebatir), pero también es cuestión de calidad musical, de personalidad y carisma, de buen directo, de diferenciación con el resto... y en todo esto Portugal este año va más que sobrado (y eso que me da rabia que no vayan en portugués). Y lo mismo que digo esto, también tengo que reconocer que me alegro mucho de la valoración que le habéis otorgado a Países Bajos, que también es original, personal y diferente.