La composición de los jurados que componen el 50% de la votación de Eurovisión será secreta hasta la noche de la gran final. Un cambio de reglas desde que en 2014 se comenzó a exigir la publicación de cada miembro con anterioridad a la celebración del certamen.

Será este mismo sábado, día de la gran final de Eurovisión, cuando conoceremos las 195 personas que forman parte de los jurados nacionales. Hasta la fecha, era habitual que los países publicaran su panel de expertos dos semanas antes de tener lugar el festival.

La identificación del jurado con anterioridad tenía como objetivo asegurar la transparencia, pero en algunos casos provocaba cambios en algunos de ellos. Este año no conoceremos a los expertos de los 39 países hasta la gran final de Eurovisión, cuando ya no ejercerán su labor, ya que votan sobre el visionado del ensayo general del día anterior, que suele retransmitirse privadamente para ellos habitualmente en los propios estudios de cada emisora nacional.

La Unión Europea de Radiodifusión volverá a contar con PwC para supervisar la votación de estos jurados. En ocasiones pueden llegar a realizar inspecciones, y si detectan irregularidades pueden invalidar la votación. Por ejemplo, en 2019 la UER eliminó el fallo del jurado bielorruso al detectar que algunos miembros habían revelado su veredicto en una entrevista tras la primera semifinal. En estos casos el organismo europeo asigna una votación fruto de la media de puntuación de países que suelen votar tradicionalmente de manera similar a este país.