25012020_051300_FONDO41_original

El sorteo salomónico

_22112017_064816_Avatar_Silosnumeroscantaran_logo

Si los números cantaran

El sorteo salomónico

25 de enero de 2020


Entradas anteriores

Escrito por Jesús Manuel Rodrigo Céspedes | 21 de Marzo

La forma de las preselecciones nacionales

Escrito por Jesús Manuel Rodrigo Céspedes | 28 de Febrero

El dilema del precio del televoto

Escrito por Jesús Manuel Rodrigo Céspedes | 09 de Febrero

BenidormFest 2024: Tirando los números

Escrito por Jesús Manuel Rodrigo Céspedes | 24 de Enero

BeniCalculadora 2024 + NúmerosFest

El pistoletazo de salida en las recientes ediciones lo protagoniza el sorteo de semifinales. Con este reparto más o menos aleatorio empiezan a configurarse las semifinales y los caminos de cada país de cara a la gran final de Róterdam. La organización divide a los países en diferentes grupos con factores en común para que evitar que los afines caigan en masa en alguna semifinal y descompensen la balanza. ¿Cómo es este reparto? ¿Es la alternativa más justa? ¡El martes 28 de enero a las 16:00 conoceremos el resultado!

UNA PREDICCIÓN INICIAL

Hace unos días, en nuestra cuenta de twitter @SLNC_es, hicimos una predicción sobre cómo podrían ser estos bombos. El resultado de nuestra predicción podéis verlo en la siguiente imagen:

De los 12 sorteos que se han hecho, en 9 de ellos se utilizaron 6 bombos y 5 en el resto de casos, por lo que, a priori, 6 grupos era la opción preferente (si bien con 5 el reparto es exacto para todos). ¿Por qué repartimos así los países? Para empezar, tomamos los datos históricos de todos los sorteos y observamos cuántas veces cada país había coincidido con el resto de países. El resultado nos refleja que hay unos cuantos países que siempre han coincidido en el mismo bombo. Estos grupos son:

Todos atienden a factores que ya hemos analizado en este blog (yugoslavos, nórdicos, soviéticos, helenos…). Además, hay otra pareja formada por Australia y Portugal que es en principio más fruto de la casualidad y el descarte que otra cosa. También Bélgica y Países Bajos siempre han estado en el mismo bombo, pero este año, Países Bajos no tiene que pasar por este trámite al ser el organizador. En definitiva, parecería obvio pensar que estas estructuras se repetirían en cada bombo para 2020.

El bombo nórdico se habría completado con Estonia, que es la que más veces lo ha hecho; mientras que Eslovenia y Suiza lo harían en el yugoslavo. En el soviético, Armenia y Azerbaiyán, aunque Israel también podía haber sido una opción. Letonia, Lituania e Irlanda debían también estar juntas, lo mismo que Bulgaria con Grecia y Chipre y Rumanía con Moldavia. Israel, Chequia y Austria forman una relación más débil. Todas estas piezas encajaban en los grupos que sirvieron para nuestra predicción de más arriba. No obstante…

al final han sido 5 bombos de 7 países cada uno. La estructura tampoco tiene muchas diferencias con la que habíamos predicho: En el bombo 1 han incluido a Austria, la opción preferente para este bloque. En el soviético han asociado a Moldavia, con quienes tiene muy buena relación según hemos visto en el blog, aunque suponga separarla de Rumanía. En el tercero se ha tomado la decisión sin precedentes de acoplar a Australia con los nórdicos, pero realmente era la mejor opción y los patrones de votación así lo reflejan, puesto que Irlanda a mostrado más afinidad con los bálticos.

En el bombo de Grecia y Chipre han descartado a Bélgica incorporando a Portugal y Rumanía, opciones lógicas. De ahí que los belgas, abandonados por los holandeses, hayan caído en un grupo con menos vinculación, pero que queda unido sobre todo por Polonia e Israel. En definitiva, los tres primeros grupos son muy consistentes entre sí, mientras que el cuarto y el quinto son grupos de relaciones más individualizadas.

Con un desenlace salomónico, la mitad de cada grupo irá a parar a una semifinal distinta el día 28. Falta por conocer cómo se repartirán los séptimos países de cada bombo y qué semifinal tendrá 18 miembros. También conoceremos si actuarán en la primera o segunda mitad de cada semifinal. Recordemos que el Big5 y Países Bajos también serán repartidos a partes iguales para saber en qué evento vota cada uno. Este sorteo es totalmente aleatorio y, según como sea, puede beneficiar a unos países o a otros.

VENTAJAS E INCONVENIENTES

La gran ventaja de estos bombos es lo fácil que es entenderlos y lo igualmente distribuidos que están. Además, todos son evidentes cuando vemos las votaciones, quizá a excepción del último. No obstante, también tienen algunos inconvenientes que vamos a repasar

El bombo yugoslavo, de 7 miembros, quedará dividido en 3 y 4 países en cada semifinal. Por tanto, podría darse el caso de que Croacia, Eslovenia, Macedonia del Norte y Serbia terminaran en la misma semifinal, mientras que Albania, Austria y Suiza se irían a la otra. Es decir, los yugoslavos como tal no serían separados y podrían hacer fuerza en el televoto. Este es uno de los inconvenientes de los grupos grandes. También podrían darse los mismos casos con Dinamarca, Finlandia, Islandia, Noruega y Suecia, donde solo fallaría uno, o el trinomio de Bulgaria, Chipre y Grecia.

¿Cómo podría resolverse esto? Hay solución, pero supone complicar el proceso y hacerlo desigual. En primer lugar la organización tendría que ver que no toda Europa se divide en grupos tan uniformes ni en relaciones tan estrechas. Lo vemos reflejado en esos grupos de países que siempre han coincidido en los mismos bombos. Por ello, se debería establecer bombos en función de los grupos reales independientemente de su tamaño, de forma que, por ejemplo, Rumanía y Moldavia no pudieran quedar emparejadas o que los 5 nórdicos se repartan 2 y 3 en cada semifinal. De esta forma se garantizaría el reparto equitativo de estos grupos.

El problema estaría en qué relaciones podemos considerar que deben separarse y cuáles no, lo que para algunos podría ser una injusticia. Además, de hacerse así, países como Grecia y Chipre nunca se verían en una misma semifinal, eliminando cierta libertad. En una entrada anterior, Los bombos de Lisboa, ya establecimos un método para separar a los países en función de sus votaciones pero sin la utilización de bombos. Podéís ver cómo sería el reparto para este año con el mismo método (semifinales en azul y rojo). Y es que, si el orden de actuación ha dejado ya de ser aleatorio ¿por qué no el sorteo de las semifinales?

El sorteo de las semifinales es el primer paso para este festival y empezará a marcar las opciones de las naciones participantes de cara a la final del 16 mayo. ¿Te ha parecido justo el reparto de bombos? ¿Qué corregirías tú? ¡Que la suerte nos acompañe!

¡No olvides seguirnos en twitter e instagram @SLNC_es!
También puede interesarte:

– Los bombos de Lisboa
No es festival para vecinos
Semifinales, mitades y viceversa

Conversación

0
TOP
01/03/2020

@Mekhi perdona el retraso, en este enlace puedes consultar la entrada https://www.eurovision-spain.com/iphp/blogs_ver.php?id=114&numero=80

0
TOP
28/01/2020

@Mekhi Suiza está con los yugoslavos porque Serbia y Albania son su top de preferencias. Más lejos le quedan los otros centroeuropeos que mencionas. Puedes consultarlo en nuestra entrada "El minuto yugoslavo". A los occidentales les pasa que votan por los orientales y ya no es tan fácil agruparlos como a estos por su ubicación ;)

8
TOP
04/02/2020

Y ¿dónde puedo encontrar la entrada "El minuto yugoslavo"? No la localizo :(

8
TOP
28/01/2020

En cuanto al grupo heleno, yo más bien crearía uno atlántico-mediterráneo que estuviera formado por Portugal, Malta, San Marino, Grecia, Chipre, Bulgaria e Israel.

8
TOP
28/01/2020

Nunca entenderé por qué a Suiza se la mete sistemáticamente en el bombo de los yugoslavos. ¿No sería más lógico crear un bombo con los países centroeuropeos a los que podría unirse Irlanda?Ahí estarían Suiza, Bélgica, Austria, Rep. Checa, Países Bajos, Hungría e Irlanda). Este año habría que quitar a dos de ese bombo, vale pero podría añadirse a Polonia sin problema.Por otro lado, Australia me parece bien ubicada con los escandinavos.