Zena vuelve a la preselección bielorrusa para Eurovisión 2021, según la prensa local
Zinaida Kupriyanovich, más conocida como Zena, quiere volver a representar a Bielorrusia en Eurovisión, tras su pase a la final en Tel Aviv 2019 con el tema Like it. Así lo ha afirmado hoy el portal de noticias TUT.by, que sitúa a la cantante como una del “alrededor de medio centenar” de propuestas que han sido remitidas a la BTRC. Esta revelación viene después de que la propia Zena anunciase en sus redes sociales el pasado mes de enero su voluntad de volver a representar a su país en Eurovisión. Además, estas Navidades la artista interpretó su nuevo single Tantsy pod lunoi (Bailes bajo la luna) en el especial televisivo de Año Nuevo de la televisión pública. La canción, de tres minutos de duración, es también el primer tema que Zena publica tras su paso por el certamen hace ahora dos años.
Por otra parte, el ente público bielorruso sigue sin proporcionar más detalles acerca del proceso de selección de su abanderado para Róterdam. Tras el cierre del período de recepción de candidaturas el pasado 31 de enero, muy pocos artistas han anunciado abiertamente su participación en la convocatoria, entre ellos Kazna con Braids, la cantante y actriz Elena ZheludOK y el dúo formado por Daz Sampson (Reino Unido 2006) con Katya Ocean. Las subcampeonas de la preselección de 2020, CHAKRAS, también habrían enviado una propuesta para la competición, según TUT.by, así como otros artistas destacados en el país como Alyona Gorbachova o Vitaly Voronko.
El secretismo con el que la BTRC mantiene su proceso de deliberación ha sumido a muchos artistas en la incertidumbre, máxime teniendo en cuenta que el año pasado la cadena apenas dejó pasar diez días desde el fin del plazo de recepción de propuestas hasta el anuncio de la lista de finalistas. Es por ello que los rumores apuntan cada vez más hacia la primera elección interna del país desde hace diez años. En palabras del mánager y relaciones públicas de diversos artistas, Sergey Adrianov: “los nombres de los participantes no han sido públicamente revelados por primera vez desde 2011, cuando se envió a Anastasia Vinnikova con I love Belarus mediante una selección a puerta cerrada”. La situación recuerda, asimismo, al proceso de elección de representante para la última edición de Eurovisión Junior, donde el país apostó por primera vez en su historia por la elección a dedo, que recayó en Arina Pehtereva con Aliens.
LA PERMANENCIA DE LA BTRC EN LA UER, ¿EN RIESGO?
Los preparativos de la candidatura bielorrusa para Róterdam se desarrollan en medio de un clima político y social extremadamente turbulento en la exrepública soviética. Desde las masivas protestas desatadas el pasado verano tras la polémica reelección del presidente Aleksander Lukashenko, considerada por muchos como un fraude electoral, el país vive inmerso en una profunda crisis política que se ha saldado, incluso, con el exilio de la jefa de la oposición, Svetlana Tijanóvskaya, quien actualmente trabaja codo con codo con el director de la Fundación por la Solidaridad Cultural Bielorrusa, Siarhei Budkin, para intentar ejercer como grupo de presión en el Parlamento Europeo y conseguir expulsar a la BTRC de la UER. Para lograr sus propósitos, argumentan que el ente público obtiene beneficios económicos y de reputación como consecuencia de su participación en eventos internacionales como Eurovisión.
Sin embargo, y pese a que Tijanóvskaya y Budkin han logrado atraer a algunos cargos políticos pertenecientes al centro liberal, entre ellos Karin Karlsbro, la vicepresidenta de la Delegación del Parlamento Europeo en Bielorrusia, la UER sigue siendo un órgano independiente de la Unión Europea y, por tanto, toma sus decisiones de forma autónoma. El director general del organismo, Noel Curran, publicaba hace unos días una carta en la que se limitaba a exigir a la BTRC que defendiese “valores periodísticos profesionales” y que garantizase a sus ciudadanos “acceso a una información que les permita escuchar una pluralidad de opiniones y formar sus propios juicios independientes”, para pasar a afirmar que “Eurovisión es un concurso musical sin una agenda política. Nosotros nos oponemos de forma vigorosa y consistente a cualquier intento por instrumentalizar políticamente este evento musical”. A su vez, Budkin ha respondido a esta carta de forma muy directa: “si la UER afirma ser ‘independiente de la política’, ¿entonces cómo puede incluir a una organización que ha violado repetidamente los derechos humanos y el derecho internacional?”
Conversación
Me vais a perdonar pero a mi la apropiación cultura me parece una tonteria, si la chica se quiere llevar trenzas que las lleve, vive y deja vivir.
Kiss N' Gun de Danny Shark creo que también es candidata y no la habéis puesto, y ojalá la elijan, porque es buena. Aunque lo mejor que harían sería retirarse para separar la polémica del concurso... pero bueno.
Espero que no. Zena, Hurricane, Albina, la mitad de los del Melodifestivalen... demasiada insulsez. Prefiero canciones con raíces propias, originales y personales. Y no estas americanadas y radiofórmulas para oír hoy y olvidar mañana.