Eslovenia ha estrenado esta noche la nueva canción de Ana Soklič para Eurovisión, Amen. Curiosamente, se trata del segundo tema de la edición con este título, como anunció ayer el abanderado austríaco. La candidatura, elegida a dedo, se presentó en una edición muy especial del tradicional EMA, convertido en esta ocasión en un programa homenaje al 60º aniversario del país en el festival, efeméride del debut de Yugoslavia en Cannes 1961 con la intérprete serbia Ljiljana Petrovic y la composición del legendario músico esloveno Jože Privšek, Neke davne zvezde.

La delegación había anunciado inicialmente una preselección pública de canciones en la que participarían entre tres y cinco propuestas, pero a posteriori cambió de opinión y decidió apostar por una elección interna que rompería drásticamente con las características de la precursora Voda. El tema en cuestión ha sido seleccionado en dos fases. En la primera, la representante eslovena en Dublín 1995 y Jerusalén 1999, Darja Švajger; el autor de la ganadora Molitva en Helsinki 2007, Vladimir Graić; y la propia Ana realizaron el cribado inicial entre las 191 propuestas recibidas; y en la segunda, la directiva de la discográfica de la radiotelevisión pública Mojca Menart, el cantautor Matevž Šalehar Hamo y, nuevamente, Darja Švajger, tuvieron la última palabra entre las tres finalistas, ya interpretadas por Ana.

La eurovisiva Lea Sirk (2018) y Nejc Šmit han sido los presentadores del programa desde el Estudio 1 de la RTVSLO en Liubliana. La velada contó con las actuaciones de grandes estrellas eslovenas del festival como Zalagasper (2018), Omar Naber (2017, 2005), Eva Boto (2012), Rebeka Dremelj (2008), Alenka Gotar (2007), Nusa Derenda (2001) y Darja Svajger (1999, 1995).

¿QUIÉN ES ANA SOKLIC?

Ana Soklic nació el 10 de abril de 1983 en Bohinj, Eslovenia, un pueblo de interior cerca del conocido lago de Bled. Según su biografía, crecer en una naturaleza maravillosa y paradisíaca fue una de sus grandes inspiraciones. Desde muy pequeña, mostró un espíritu muy creativo que finalmente se decantó por el ámbito musical, y siempre tuvo la intención de crear su propio estilo. Con este objetivo, se formó en estilos como ópera o jazz e interpretación de blues, jazz, rock o soul. También compone sus propias canciones desde los 18 años, algo que considera algo mágico y único.

Su salto a la fama llegó en el año 2012, cuando participó en la primera edición de la versión eslovena de Factor X, donde alcanzó la quinta posición. A partir de este momento inicia una fructífera carrera internacional. En 2014 realizó un concierto en solitario en el Festival de Jazz del Veneto, Venecia, en el que se agotaron todas las entradas y compartió cartel con nombres tan conocidos como Cassandra Wilson, Chick Corea o Keith Jarred. En 2016 fue escogida como la representante de Eslovenia en el Festival Internacional de Jazz de Washington, Estados Unidos.

En 2017 también actuó con la Orquesta Sinfónica Marco Polo de Lignano, Véneto; formó parte del famoso coro góspel de Harlem, Nueva York, con el que cantó ante personalidades com Barack Obama o el Papa Francisco, y siguió actuando en lugares tan dispares como Dubai, Mónaco o Nápoles. En 2018 realizó varios conciertos en su país junto con la Big Band de la RTVSLO, así como un recital en solitario en Zagreb. Ya en 2019 participó en el festival esloveno Slovenska Popevka con la canción Temni svet que recibió los premios del jurado a la Mejor Interpretación y Mejor Canción. También ha colaborado con músicos como Elton John o U2.

Su discografía no es muy extensa y se limita a un puñado de singles, pero la cantautora manifiesta su deseo de centrarse en los conciertos en directo, ya que en ellos no hay lugar para la manipulación con todo el peso de la interpretación recayendo directamente en el oyente. Sus actuaciones siempre son alabadas por su atmósfera en la que se puede sentir las influencias de todos los estilos musicales de los que se nutre su formación.

Ana también formó parte del grupo Diona Dimm con el que se presentó al EMA en 2004 y 2007, la final nacional de Eslovenia para Eurovisión, clasificándose en la octava posición en su primer intento y siendo eliminada en las semifinales del segundo. La banda, sin embargo, obtuvo un contrato discográfico con la discográfica sueca TMC que duró por tres años. Gracias a este acuerdo grabaron su primer y único álbum, Drama Fatale, aunque no llegó a ser publicado comercialmente y su uso se limitó a promoción interna. Su gran oportunidad eurovisiva le llegaría en 2020, ganando el EMA, y obteniendo el pasaporte a Róterdam con la canción Voda de la que es autora. Tras la cancelación del festival ante la pandemia mundial de Coronavirus, la televisión pública eslovena le comunicó en directo el sábado 16 de mayo durante el programa previo al Europe: Shine a Light su designación directa para la próxima edición del certamen.