RTVE desmiente contactos de la ORF para evitar su retirada de Eurovisión si Israel participa

La estrategia de «diplomacia» anunciada por la televisión pública austriaca (ORF) para calmar las tensiones en torno a la 70ª edición de Eurovisión ha encontrado un punto de fricción. Jose Pablo López, presidente de la corporación pública española RTVE, ha desmentido en X hoy cualquier contacto de la ORF con la delegación con el objetivo de convencerles para permanecer en el festival si finalmente Israel participa. Esta declaración pone en entredicho la efectividad de las gestiones diplomáticas que, según el director General Roland Weissmann de la ORF, están en marcha.
La contradicción surge apenas 24 horas después de que Weissmann adelantase una esperada reunión el 4 y 5 de diciembre para votar nuevas reglas. Weissmann había enfatizado que era el «momento de la diplomacia en el seno de la UER», prometiendo «discutir, hablar y escuchar y tratar de convencer» a las delegaciones críticas. Sin embargo, la ausencia de acercamiento a RTVE, una de las voces más destacadas entre los países que han expresado su malestar por la presencia de Israel, sugiere que esta «diplomacia» podría ser unilateral o selectiva. El directivo de RTVE ha sido claro: «Aquí no han llamado» para ese propósito.
Este desmentido de RTVE cobra mayor relevancia al recordar que el propio Weissmann se reunió la semana pasada con el presidente de Israel y la KAN israelí, garantizando su bienvenida y el respeto a las reglas del certamen. La situación plantea interrogantes sobre la naturaleza de la «política sin complejos» en el festival, donde se percibe un esfuerzo por asegurar la participación de un lado, mientras la preocupación de otros miembros —como España, Eslovenia, Irlanda, Islandia y Países Bajos, que ya se habían mostrado públicamente «más contrarios»— parece no estar siendo abordada de la misma manera activa para retenerlos.
La falta de un diálogo directo con delegaciones clave como RTVE, que mantiene su postura crítica, podría complicar seriamente el objetivo de celebrar un 70º aniversario verdaderamente «United by Music». A pesar del optimismo por el regreso de Bulgaria, Moldavia y Rumanía, la UER enfrenta una crisis sin precedentes. Todos los ojos estarán puestos en las votaciones de diciembre para ver si las nuevas reglas logran salvar la próxima edición del festival en Viena.
Conversación
¡La que quieres, la que tú quieres! Así sí. Genial por José Pablo López. Ya está bien de bailarle el agua a genocidas y aliados. ¡Anda a la mierda la UER!