La final de Eurovisión arrasa en audiencia en varios países europeos
Poco a poco las cadenas de televisión que han participado en Eurovisión 2024 han ido desvelando las audiencias que consiguieron los tres shows de la semana. Los datos de la final vuelven a ser muy esperanzadores, ya que en más de un país se superó el 80 % de share. En esta entrada hemos recopilado, con ayuda de los datos facilitados por nuestros compañeros de ESCPlus, las audiencias de las diferentes naciones participantes, desde la discreta Chequia hasta los eufóricos nórdicos, que si ya de por sí no suelen perderse el certamen, al celebrarse este en la ciudad sueca de Malmö han cosechado cifras estratosféricas.
EL BIG 5
No es ningún misterio que los cinco países que están automáticamente clasificados para la final son la locomotora de Eurovisión. Su aportación económica y de audiencia es descomunal: en total, más de 30 millones de personas vieron el certamen desde España, Francia, Alemania, Italia y el Reino Unido. Este último, al ser el anfitrión el año pasado y contar con un abanderado como Olly Alexander, un nombre bastante conocido en la industria musical británica, ha cosechado el mejor dato: la gran final fue seguida por 7.562.300 ingleses, galeses, escoceses y norirlandeses, alcanzando un 56,27 % de audiencia. A continuación, España: en nuestro país la final subió respecto a 2023 con 4.886.000 espectadores y un 41,8 % de cuota de pantalla. En Alemania fue al revés: perdió espectadores en su cadena principal, Das Erste, con un total 7.380.000 espectadores y un 36,8 % de audiencia, sin embargo, en ONE, un canal más juvenil, subió, alcanzando los 600.000 espectadores y un 3 % de cuota de pantalla. Francia e Italia, a pesar de ser las que obtuvieron un mejor puesto, solo sumaron unos 5.400.000 espectadores aproximadamente cada una, en torno al 37 % de share.
LOS NÓRDICOS
Eurovisión, tradicionalmente, sobresale en el occidente europeo, y para muestra, un botón: Noruega marcó un 85,20 % de share (eso sí, con peor dato de espectadores desde 2008); Finlandia un 83 % y Suecia un espectacular 87,29 %, propiciado sin duda por su condición de anfitriona. Dinamarca, que lleva desde 2019 sin pasar a la final, tuvo que conformarse con 59,8 % de cuota de pantalla y 585.289 espectadores, bastante mejor que el año pasado. Si bien estos números son apabullantes, hay que recalcar que el mercado nórdico no está tan fragmentado como, por ejemplo, el español, pues la YLE finesa, la SVT sueca y la DR danesa manejan medias anuales alrededor del 25 %, mientras que la NRK noruega roza el 40%. El caso islandés es un poco distinto este año: no suele ser raro que esta pequeña isla supere el 90 % de rating, ya que allí es una tradición ver el festival y solo hay tres canales en abierto: la RÚV, la RÚV 2 y la televisión cristiana Omega, y el resto de emisoras son de pago, a través de suscripción directa o mediante plataformas digitales y no están sometidos a medición. Sin embargo, este año los islandeses no parecen haberse interesado tanto por el concurso como los anteriores: «solo» el 60,3 % de la población entre 12 y 80 años quiso escuchar las canciones de los amigos y rivales de Hera Björk en la final, lo que supone una caída del 30 % respecto a 2023, cuando también se perdieron la gran cita del sábado. Este dato, no obstante, no eclipsa en ningún caso el euforia eurovisiva en el norte que también se ha contagiado a sus vecinos bálticos donde aproximadamente dos de cada tres espectadores conectaron con Liverpool, un valiosísimo 70,2 % en Lituania, un 65,8 % en Estonia y un 61,8% en una Letonia que volvió a la final después de ocho años. Naturalmente, fue el báltico donde más creció la audiencia con respecto al año anterior, cuando rondó el 24 %.
LA PARTE POSITIVA
En el país ganador, Suiza, la gran final fue seguida en la televisión de habla alemana, la más potente, por 614.000 espectadores, alcanzando un 53,3 % de cuota de pantalla. En Croacia, que consiguió la medalla de plata y más puntos de televoto que cualquier otro país, logró una audiencia histórica con un 80,45 % de cuota de pantalla y 1.557.254 espectadores de media.
En Grecia, que puso toda la carne en el asador con Marina Satti, la final de arrasó con un 68,6 % de cuota de pantalla. En Austria, a pesar de su mala posición, consiguió con un 49,6% de cuota de pantalla con 1.006.000 espectadores de media.
LA PARTE NEGATIVA
Hasta ahora, Chequia ha sido el país que cuenta con las cifras más modestas. El hecho de que Aiko no se clasificara para la final fue determinante en que en este país centroeuropeo Eurovisión solo enganchara a 121.600 personas, lo que supuso un 5,19 % de share.
Por su parte, Portugal no tenía excusa para no ver el certamen el sábado: la ganadora del Festival da Canção no solo pasó a la final, sino que terminó en el top 10. A pesar de ello, solo 924.500 lusos siguieron la andadura eurovisiva de iolanda, apenas un 21,9 % de los que vieron la tele en ese momento.
LA CURIOSIDAD
El número 666 se asocia popularmente al diablo, y nada más terminar la final los más avispados se dieron cuenta de que Bambie Thug y su peculiar ritual terminaron sextos en televoto, sextos en jurado y sextos en general (666), lo cual no deja de ser una curiosa coincidencia. No obstante, esto no acaba aquí, pues el número de irlandeses que encendió la televisión esa noche para ver a Bambie fue 666.000.
EUROVISIÓN 2024: Las audiencias
- Alemania: 7.980.000
- Australia: 435.000
- Austria: 1.006.000 (49,60 %)
- Bélgica: 1.114.903
- Chequia: 121.600 (5,19 %)
- Croacia: 1.557.254 (80,45 %)
- Dinamarca: 585.279 (59,80 %)
- Eslovenia: 271.200 (47,00 %)
- España: 4.885.690 (41,83 %)
- Estonia: 233.000
- Finlandia: 1.130.465 (83,00 %)
- Francia: 5.396.000 (36,8 %)
- Grecia: 2.803.000 (68,2 %)
- Irlanda: 666.000 (54,00 %)
- Islandia: 111.580 (60,3 %)
- Italia: 5.341.000 (35,96 %)
- Letonia: 251.700 (61,8 %)
- Lituania: 584.500 (70,2 %)
- Noruega: 852.000 (85,20 %)
- Portugal: 924.500 (21,9 %)
- Reino Unido: 7.562.300 (56,27 %)
- Suiza [SRF1]: 614.000 (53,30 %)
- Suecia: 2.318.000 (87,29 %)