Euroflasback 1989: Caen los muros a ritmo de Rock me
Sábado noche. Siempre lo es cuando nos recostamos a escudriñar Eurovisión. En este caso era el nombre del show de variedades donde el 6 de mayo de 1989 Rocío Jurado presentaba en TVE-1 su Punto de partida, rivalizando en horario y gusto musical con Nina, que vio relegado a la vetusta UHF su Nacida para amar porque se entendía que el Festival estaba en decadencia aunque siguiera creciendo el número de fieles europeos ante la pantalla.
Enfundada en un vestido de Mercedes Salazar, un escotado rosa de seda drapeado con tres lazos negros de complemento y zapatos negros de tacón alto, la musa de Xavier Cugat, que el popular concurso Un, dos, tres descubrió como azafata de altos vueltos, interpretó con sumo gusto la composión de Juan Carlos Calderón hasta alojarla en un sexto puesto, con 88 puntos, que supo a poco, mientras se encaramaba a la cabeza el Rock me de los yugoslavos Riva, una especie de “En tu fiesta me colé, Coca Cola para todos y algo de comer…” embelesado por el pegadizo y onomatopéyico “Whoa oh oh oh” con el que expiraba la canción en cada estrofa.
Lausana acogió el certamen gracias que Celine Dion, antes de subirse al Titanic, había puesto en el mapa a Suiza con su Ne partez pas sans moi, con el que se inició aquella gala y fue de nuevo, sin duda, mucho mejor que la propuesta de los 22 países participantes, donde volvía Chipre, sin debutantes y con Islandia llevándose el rosco de turno.
Aquella edición, con Lolita Morena y Jaques Descheneux como maestros de ceremonias, marcó un antes y después en la reglas, en tanto que fue la última vez en que compitieron menores de 16 años, como la francesa Nathalie Pâque, de 11 años, o el israelí Gili Natanael, de 12. También fue cuando se decidió que en caso de empate vencería la delegación con más doces recibidos por parte de los jurados que, en el caso español, estuvo capitaneado ese año por Inka Martí, habitual en las galas de rigor, y presidido por el realizador Sergi Schaaf, mientras ponían nota, entre otros, Antonio Banderas, Antonio Ozores, Pitita Ridruejo, Javier Clemente y la desaparecida Emma Penella, que en su alegato a modo de epílogo reclamó que España “no vaya más” a Eurovisión, regaño del que se conservan imágenes y que sigue repitiéndose en cada descalabro.
Pinchó el sueco Tommy Nilsson (cuarto con 110 puntos) con su En dag (Algún día) que emocionó en el Melodifestivalen con su estética Europe, la rumba exótica de Finlandia o el austríaco príncipe azul Thomas Forstner que arrancó bien en la votación, y se quedaron con la miel en los labios los ingleses Live Report, con Why do I always get it wrong?
La entonces líder musical yugoslava intentó nuevamente presentarse a Eurovisión tomando parte en la preselección croata de 2008, el Dora, donde acabó sexta sin alcanzar su propósito. Habían pasado ya dos décadas de aquel certamen en que la holandesa Justine vio cómo se le quebraba la voz en el momento del aplauso, meses donde triunfaba el Like a prayer de Madonna, España bailaba al ritmo de la Lambada de Kaoma y el verano sonaba con el inhumano Qué difícil es hacer el amor o el refrescante Aquí no hay playa; días en los que la audiencia se pegaba lloreras ante el Cristal en la sobremesa con el desamor entre Jeanette Rodríguez y Carlos Mata; mientras los americanos descubrían en la Fox el primer capítulo de Los Simpson y transportaban al otro lado del océano las hazañas de McGyver y los entresijos de Santa Bárbara. Los niños españoles vivían en Los mundos de Yupi y sus madres aún estaban Con las manos en la masa contemplando cómo se derribaban los muros, como el de Berlín, y desaparecían las fronteras en Europa, esas que algunos quieren otra vez elevar.
Fue el año en que Dinamarca se erigía en el primer país que permitía las uniones entre personas del mismo sexo; los alumnos hacían trabajos sobre las desgracias que cometió el dictador rumano Nicolae Ceausescu, capitulado entre oropel; Checoslovaquia clamaba por la democracia mediante la Revolución del Terciopelo; Bush y Gorvachov ponían fin a la Guerra Fría; Camilo José Cela ganaba el Nobel de Literatura; y Pedro J. fundaba El Mundo del Siglo XXI. Miles de personas morían en la plaza del Tian Anmen por la represión del gobierno chino contra los estudiantes; el ayatolá Jomeini ordenaba la caza y muerte de Salman Rushdie por sus Versos Satánicos; y 95 aficionados perdían la vida en Sheffield asistiendo a un partido de fútbol entre Liverpool y Nothingham. Perdíamos a Bette Davis, Fernando Martín, Salvador Dalí, Dolores Ibarruri, Ignacio Ellacuría, Von Karajan, Laurence Olivier, Hiroito o Samuel Beckett; mientras llegaban a la vida Daniel Radcliffe, Gareth Bale, Jordi Alba o María Villalón. La Perestroika abría posibilidades a la URSS, ergo a Rusia, y con ella a Ucrania…
Caían las vallas que ahora quieren electrificar. No pasarán. “Rock me baby, it doesn´t matter what… Rock me baby, just let it persist… Rock me baby, this is nerve-wrecking… Whoa oh oh oh…”
Conversación
Un buen festival el de ese año con el lustre de la magnífica actuación de Nina...y el punto negro de la victoria de Riva,abanderados diría yo del saco de injustas victorias en Eurovisión....si es que en aquellas épocas actuar último ha hecho más daños que beneficios....cosas...
Gracias, Igor, por este resumen eurovisivo e histórico redondo. Me quedo a la espera de tu próxima entrega. Sin duda pensar en la apabullante victoria de Céline Dion el año anterior provoca un sonrojo aún mayor por la canción vencedora en 1989. Teniendo temas y voces tan grandes como Dinamarca, Italia, Suecia o España, fue desastroso que ganara "Rock Me". Haciendo recuento histórico, es una de las más vergonzantes canciones ganadoras de Eurovisión, junto a Marie N de Letonia. Como curiosidad, sorprende el ritmo latino de la canción finesa, con una cantante mezcla de Karina y Mayra Gómez Kemp. A destacar los extravagantes vestuarios y peinados ochenteros de la mayoría. Eran otros tiempos por suerte superados.
Un vozarrón vale más que las fiestas de Barei... pero hay que decir que no son comparables, puesto a que, aunque la canción de Barei fuese mala, tuvo un directo emocionante...
El 89 es mi gran favorito entre todos los festivales. E Islandia mi canción entre todas las del 89. Quedó la última con 0 puntos... jajaja ??... ESC es así ...
Un dato sin mayor importancia, pero que no deja de ser significativo: el de 1989 fué el último ESC en francés.
Enhorabuena por la sección. Coincido contigo en que la mejor actuación de la noche fue la de Céline Dion (reconozco que tengo debilidad por los temas en francés). Nina lo hizo muy bien, pero le faltaba algo a la canción, aún así creo que muchos firmaríamos obtener su misma posición en próximos festivales. Tras volver a ver el vídeo de Emma Penella (DEP), me gustaría saber que opinión tendría ahora sobre la conveniencia de abandonar el Festival
Qué recuerdos! Me acuerdo como si fuera ayer que la orquesta entera se levantó a aplaudirle y yo completamente emocionada. También recuerdo como con un boli y un papel en mi familia hacíamos nuestros top.Me encanta esta sección.
Por cierto aunque no viene a cuento, este año en Eurovision Barei debió tener 81 puntos, puesto a que el jurado de Dinamarca se equivocó y en vez de 5 nos dieron 1 o 2 no sé... pueden verlo en la wikipedia perfectamente.
Ayer oia la cancion de Nina y se pusieron el vello como escarpias no digo nada mas.... el sello de Juan Carlos Calderón siempre estara revoloteando en la sensible y elegancia de sus propuestas...
Gracias por el reportaje, estupendo de principio a fin. Mi numero uno de las participaciones españolas es la de Nina. El vídeo del ensayo es una rareza que, como Eurofan ha sido un regalo. Me gusta la canción en su versión rápida, no sé por qué el autor decidió ralentizarla, para aquel entonces yo tenía diez años y no percibía cambios tan sutiles, pero si me daba cuenta de que eurovision ya me iba corriendo por las venas. Gran acruacion que mereció ganar. saludos a tod@s!
Yo aun no nacia. Nina de lo mejor que ha enviado España, del 89 solo la reconozco a ella. Rock me baby no era para ganar pienso yo. Me gusta mucho esta nueva seccion.
Cuando le preguntaron a Celine Dion cual era la cancion que le gustaba , pues respondio que era "Nacida para amar".Es una cancion que hubiera podido cantar.Nina lo hizo muy bien: sexta es una buena posicion , ojala pudieramos hacerlo ahora pero se merecia mejor!
Grande Nina. Hay canciones que oidas varias veces encuentras ese punto de gracia por encima de su calidad, pero Rock me es de esas que siempre suenan igual de horrorosa y boba.
Con lo buena que era la canción española, magníficamente interpretada por Nina, y Portugal no nos dio ni un sólo voto, mientras que nosotros si le dimos a ellos.Me quedo con ese dato.
Buenas! grande actuación la de NINA, recuerdo ese festival porque en las votaciones nos sobrecogimos cuando un fallo en la señal de televisión en mi pueblo nos dejaba sin poder ver los puntos viendo la carta de ajuste todos con caras de bobos. Uk traía una joya, Yugoslavia no era de mis favoritas la verdad, muy pegadiza eso sí; felicidades por este artículo, sois unos artistas! gracias al equipo por hacernos revivir momentos pasados y familiares, vividos ante el ESC todos reunidos. GRACIAS!