Queridos Eurociegos,

¿Qué tal? Dije que no hablaría de Misión Eurovisión hasta haber visto varios programas y así ha sido, pero aún así, no hablare de los cantantes en detalle, me fío de las columnas de mis compañeros. Tras la tercera gala ya tengo elementos suficientes como para decir que sí, que me gusta, pero que no está del todo bien hecho, especialmente en lo referente a sonido: muchas veces se oye poco y mal porque los micros no están ajustados desde el comienzo de la actuación.

Me gusta Paula Vázquez que se emociona presentando, me gusta el formato del programa, donde la presentadora apenas aparece entre las canciones, donde los vídeos promocionales del artista se convierten en postcards. No me parece que sea un programa de ritmo lento, me parece bastante divertido, con una realización decente y un escenario bastante bueno para este tipo de programas.

Pero algo falla. Un miserable 13% de share en la primera gala, un 11 en la segunda y un paupérrimo y anémico 9% en la última no es algo digno de recordar, pero es así. La audiencia pasa olímpicamente de nuestra perselección nacional. PArece ser que les gusta que se lo den todo hecho, como el año pasado, parece ser que los esfuerzos de los eurofans luchadores no tenían razón de ser, porque Eurovisión no interesa. Entonces, ¿por qué el Festival tiene tanta audiencia y no la preselección?

Quizá sea la falta de costumbre de una preselección, pero esta excusa no es válida, menos acostumbrados estábamos cuando OT. Quizá sea la dura competencia de los martes televisivos. Quizá sea que la gente ha huido definitivamente lejos de las tierras de TVE, que apenas logra buenas cuotas de pantalla los lunes por la noche (Mira quién baila) y en la franja de tarde (España directo).

Como resultado de esta desesperación en búsqueda del televidente, nuesta cadena pública ha decidido, con muy buen criterio, cambiar el día de emisión. Cuando comenzaron diciendo que sería un martes, a mí me pareció bastante mala noticia, especialmente después de saber que los votos serían por comunidades (eso siempre alarga la gala y al día siguiente los curritos madrugamos), así que el cambio a los sábados me parece un muy buen acierto. Sigue habiendo competencia, pero es mejor día, sin duda. Por lo menos para que yo lo pueda ver entero.

Y sobre los participantes… que me parece que las galas finales serán muy difíciles, por lo menos para mí, puesto que mis favoritos siempre están pasando, bien por votos (Nessa, Mirela) bien por la organización(Paco Arrojo), y que me parece que, según avanzan las galas, los mejores son cada vez mejores. Tengo muchas ganas de ver la final, a ver cómo resulta todo, quién va y con quién canción. Es un formato muy emocionante, aunque parece ser la prueba palpable que un Melodi a la española, hoy por hoy, no funcionaría. A ver los sábados.