¡Róterdam será la anfitriona de Eurovisión 2020 el 12, 14 y 16 de mayo!
Vicente Rico · Fuente: eurovision-spain.com
Después de meses de incertidumbre y tras un minucioso proceso de selección, por fin hay confirmación oficial: Róterdam y su estadio Ahoy serán la sede de Eurovisión 2020 los próximos 12, 14 y 16 de mayo. Así lo han decidido conjuntamente la televisión pública neerlandesa NPO y la UER en una decisión final en la que ha salido derrotado el complejo MECC de Maastricht. El recinto elegido tiene un aforo para 16.000 personas y una experiencia más que probada experiencia en eventos musicales y deportivos, habiendo acogido los MTV Europe Music Awards de 1997 y 2016 y el propio Eurovisión Junior en 2007, o conciertos de artistas como Lady Gaga, Queen, Shakira o U2.
LA IMPORTANCIA DEL APOYO POLÍTICO Y PRESUPUESTARIO
El apoyo y la implicación de la gran mayoría de las formaciones políticas de Róterdam han sido claves en la decisión de la UER. Ya en el pasado mes de julio, el ayuntamiento declaró haber reservado una partida de 15 millones de euros, así como la gratuidad de unas 3.000 habitaciones de hotel, en caso de que la ciudad fuese finalmente la elegida. El VVD, principal partido político del país, se mostró especialmente receptivo a esta candidatura desde sus inicios, llegando una de sus concejalas, Dieke van Groningen, a proponer un crowdfunding o sistema de micromecenazgo en el que cualquier roterdamés pudiese participar, ya fuese con una donación económica o aportando ideas a través de las redes sociales. También ha contribuido el apoyo de La Haya, después de retirar su propia candidatura, con el objetivo de promover una gran fuente de ingresos para toda la región de Holanda Meridional.
Con alrededor de 635.000 habitantes en el municipio y más de 2.800.000 en su área metropolitana, Róterdam es actualmente la segunda ciudad más poblada de Países Bajos, sólo por detrás de Ámsterdam. La localidad es principalmente conocida por su vibrante vida universitaria y por su enorme puerto, el más grande de Europa y el segundo mayor del mundo. Esta será la primera vez que la ciudad sea sede del certamen eurovisivo, para lo cual el ayuntamiento ya había enviado, a mediados de julio, una delegación especial a Tel Aviv con el fin de recibir consejo de primera mano en cuanto a la organización del evento.
UN COMPLEJO PROCESO DE SELECCIÓN
No había ni finalizado el mes de mayo cuando Países Bajos se ponía ya manos a la obra con la búsqueda del recinto que acogería Eurovisión 2020. En un primer momento, llegaron a ser diez las candidatas que mostraron interés por albergar el concurso, Róterdam, Maastricht, Arnhem, Bolduque, Utrecht, Ámsterdam, La Haya, Breda, Enschede y Leeuwarden. Sin embargo, solamente las cinco primeras llegaron a presentar formalmente su solicitud en el plazo que concluía el pasado 10 de julio y, posteriormente, la criba fue reducida a las dos finalistas.
Países Bajos se convierte en el país que puede presumir de haber organizado Eurovisión en más ciudades, después del Reino Unido. Hasta la fecha, celebraron la edición de 1958 en la pequeña localidad de Hilversum, famosa por ser la sede de los estudios centrales de la televisión neerlandesa, así como la de 1970 en Ámsterdam, y las de 1976 y 1980 en La Haya, esta última tras la renuncia a organizar por segundo año consecutivo de Israel. También será esta la primera vez que Países Bajos acoja el festival en su etapa contemporánea.
Duncan Laurence con Arcade se convirtió el pasado mes de mayo en el primer solista masculino en vencer Eurovisión en representación de Países Bajos, poniendo fin a una sequía de 44 años en el palmarés de la dilatadísima trayectoria eurovisiva del país, uno de los siete fundadores del certamen europeo de la canción en 1956 y solo ausente en 1985, 1991, 1995 y 2002. Se trata de la quinta victoria neerlandesa en el festival, tras los éxitos de Corry Brokken en 1957 con Net als toen, Teddy Scholten en 1959 con Een beetje, Lenny Kuhr en 1969 con De troubadour y Teach-In en 1975 con Ding-a-dong.
Conversación
Era lo lógico. Y Xarinixx, en Holanda todo el mundo habla inglés perfectamente, no es necesario aprender un idioma algo complicado para nosotros para solo para ir a ver el festival.
Yo ví un albergue muy barato con habitaciones compartidas con más gente, pero yo eso no se lo recomiendo a nadie
Feliz por la elección, este verano he estado en Rotterdam y me ha enamorado. Ojalá pueda volver, y esta vez para este acontecimiento que nos enamora a todos. Ojalá pueda ser mi primera vez en el festival y en una ciudad que me encanta. Fingers crossed! Rotterdam 2020, here we go!
!Fantástico!, ya tenía reservado alojamiento y en cuanto distéis la noticia reservé vuelo para ese fin de semana ahora lo más difícil... ¡las entradas!
@Vike_Slin que suerte que tengas ya alojamiento, yo estoy buscando pero de momento no he encontrado.
Exe. Es muy distinto vivirlo en directo que por televisión. En directo se disfruta de una manera muy diferente. Si vas alguna vez olvídate de las pantallas de televisión que haya puestas en el recinto. Mira el escenario. Vas a alucinar.
Que guay! Capaz el año que viene pueda disfrutar en directo con mi familia, espero que sea igual de disfrutable que en la tv.
encantado con Rotterdam, era la elección más lógica por todo, estadio, infraestructura, hoteles, transporte, etc.
El vídeo de presentación es muy épico. Rotterdam seguro y la televisión pública harán una buena edición de Eurovisión, de eso estoy seguro.
Rotterdam, sí, sí y sí. Era mi elección predilecta desde el primer momento. Ahora bien, las fechas no me vienen nada, pero nada, de bien. Pero aun falta mucho. Quién sabe, quizá este sea mi primer ESC en directo en la sede. Ojalá los astros se alineen.
Era la desición esperable. El recinto propuesto por Maastricht tenía el techo muy bajo, y hubiese sido la ciudad sede más pequeña desde Millstreet.
Pues la sede me encanta, la verdad. Lo que no me gusta tanto son las fechas, para entonces tendré compromisos que me impedirán estar pendiente al 100% del ESC, los cuales son muy difíciles de eludir. Pero bueno, igualmente trataré de disfrutar en la medida que me sea posible.