One Morning Left aporta el toque rockero al UMK 2025 con Puppy

El punto canalla y metalero del UMK 2025 vendrá de la mano de One Morning Left, una banda que lleva 16 años en activo y está formada por cinco miembros de distintas partes de Finlandia: Mika Lahti es el fundador, líder y vocalista principal; Leevi Luoto le acompaña también como vocalista, como guitarrista y como compositor; Miska Sipiläinen toca el bajo y hace los coros; Dennis Hallbäck es batería y Juuso Turkki compone, toca la guitarra y también hace las veces de corista.

La historia de la banda comenzó cuando Lahti conoció a Teemu en la IRC-Galleria, una red social. Sus gustos musicales compartidos llevaron a la formación de One Morning Left en 2008. El primer EP se publicó ese mismo año, y en 2009 la banda se embarcó en su primera gira europea.

En 2010 la firmaron un contrato discográfico con Spinefarm Records y al año siguiente lanzaron su primer álbum, The Bree-TeenZ. El disco Metalcore Superstars de 2016 incluyó la exitosa canción You’re Dead, Let’s Disco, que fue especialmente popular en Japón, por lo que la banda agotó las entradas para sus conciertos en Tokio.

En 2022, One Morning Left realizó una gira por Europa con los ganadores del UMK Blind Channel y la banda alemana Electric Callboy. Hoy en día, la formación hace música bajo el sello alemán Arising Empire.

Se describen a sí mismos como «una banda buenrollera, hiperactiva y que rompe fronteras». El humor es lo que les diferencia de otros grupos de metal nórdico.

«Musicalmente, cogemos referencias de los años 80 y 90 y no nos lo tomamos demasiado en serio. A veces tenemos una visión perversa del humor. O también puedes bailar con nuestra música, y eso es genial.»

Su canción para este UMK, Puppy, es exactamente lo que parece: un tema sobre un cachorro. El comité de selección la ha definido así:

«No puedes escuchar la canción Puppy y que te resulte indiferente. El metal moderno y los elementos dance se unen en esta canción de una forma genial. El paisaje sonoro es anguloso y nervioso, pero al mismo tiempo la canción está llena de alegría y el pegadizo estribillo te mete de lleno en el ritmo. El tema, de tres minutos de duración, está repleto de ganchos musicales. Es fácil imaginarse a un Nokia Arena con las entradas agotadas berreando esto en febrero.»