La representante de Francia, La Zarra, ha salido a la palestra para interpretar por vez primera frente al público, y acompañada de un piano, la canción con la que competirá en Liverpool, Évidemment. La abanderada gala será una de las artistas que estará presente en la PrePartyES 2023, la séptima edición de los conciertos de Eurovision-Spain que se celebrarán los próximos viernes 7 y sábado 8 de abril en La Riviera de Madrid. Recientemente, Alexandra Redde-Amiel, jefa de la delegación francesa del festival, mostró su esperanza en que el país vuelva a codearse en lo alto de la tabla, como sucedió en 2021 con Barbara Pravi. “La Zarra combina la gran canción francesa, un estilo eurovisivo, una artista con carácter y visión artística completa”, consideró.

En una entrevista al podcast francés 12points-le podcast qui décrypte l’Eurovision, argumentó cómo Francia logró escapar de los últimos lugares y movilizar el interés local e internacional en varias de sus recientes participaciones. La receta del éxito, según Alexandra, tiene varios niveles. Todo parte de la determinación de quienes toman la decisión de brindar buenas participaciones al concurso para que opten a la victoria. “Tengo mucha suerte de que mis supervisores nunca me hayan puesto límites sobre Eurovisión”, señaló al tiempo que subrayaba la importancia de la calidad de la canción y de su interpretación. “La participación francesa debe ante todo ser amada por el pueblo francés y contener elementos que representen las tendencias actuales”, afirmó.

Al hilo de este argumento, la delegación gala valora el atrevimiento a probar ideas diferentes estos últimos años, que entienden como el camino a la victoria. Esta estrategia no se limita a la selección de canciones. Incluye un plan de comunicación completo para promocionar la canción, la preparación del artista para su puesta en escena, la cooperación con artistas y productores, y sobre todo una dirección escénica bien preparada y explicada con todos los detalles para evitar problemas durante los ensayos. Sin embargo, el artista mantiene la libertad de su expresión artística y es quien toma la mayoría de las decisiones, como en el caso de La Zarra.