Después del notable sexto puesto logrado por Amir en Estocolmo 2016, e incluso de luchar por el triunfo en las apuestas previas, el espíritu eurovisivo se ha multiplicado en Francia hasta el punto de recibir alrededor de 300 propuestas para abanderar al país en Kiev 2017. No es de extrañar que France 2 quiera repetir el éxito con una nueva elección interna.

La sorpresa podría llegar del hecho de que el cantante escogido sea virtual y no de carne y hueso, en concreto uno denominado Alys, un personaje con forma de humano cuya voz procede de un sintetizador. Sus creadores usarían un proyector para gestar un holograma y plasmar la imagen de dibujos animados.

El 17 de diciembre se descubrirá en París el primer show de Alys titulado Rêve de Machine coincidiendo con el periodo navideño, siendo ahí cuando salga a la palestra este artista virtual de pelo azul trenzado, a quien se le asignan 21 años, pero que comenzó su carrera el 10 de marzo de 2014 y que tiene unos 13.000 fans en las redes sociales. Completamente digital, su voz es una colaboración entre VoxWave y Plogue Art & Technologies, quienes desarrollan sintetizadores vocales usando Alter/Ego. Se promociona a Alys como un cantante que viaja entre universos desde canciones pop a electro o rock.

Desde luego, el año pasado se notó el giro de Francia en Eurovisión gracias a que existió un relevo en la cúpula que dirige la candidatura después del último puesto de Twin Twin en 2014 y, pese a emocionar al público, del mal resultado de Lisa Angell en 2015. J'ai cherche cambió el rumbo con la mejor posición desde 2002, y ahora quién sabe si los franceses pueden dar otra vuelta de tuerca con una puesta en escena nunca vista antes.

 PRECEDENTES Y CONFLICTO

A pesar de que el concepto de Alys nunca se ha visto en Eurovisión, el proyecto sí ha rondado el universo eurovisivo recientemente, y es que otra candidatura digital se quedó a las puertas del festival el año pasado por Estonia. Cartoon con Kristel Aaslaid, con la canción Inmortality, se clasificaron en tercera posición del Eesti Laul 2016 con esta innovadora y sorprendente propuesta digital. Musicalmente, también existe algún referente previo, el más destacable, quizá, el grupo animado Gorillaz liderado 'en la sombra' por Damon Albarn de Blur.

La candidatura de Alys sería válida escénicamente. Los efectos digitales han llegado en los últimos años al festival, desde la lluvia de Ruth Lorenzo o la desaparición de Paula Seling en 2014 hasta el holograma de Iveta Mukuchyan en 2016. Sin embargo, las normas especifican que las actuaciones deben ser en directo, por lo que el equipo tendría que, como mínimo, sustituir los sintetizadores por una vocalista para traer a la primera cantante animada a Eurovisión.