El Festival de Viña del Mar y el Benidorm Fest se alían para promocionar a sus ganadores

El Festival de Viña del Mar y el Benidorm Fest se alían para proyectar internacionalmente a sus ganadores, que podrán asistir como invitados al otro lado del charco.

El Mercurio, periódico chileno, ha publicado esta información en la que el director del certamen latinoamericano, Daniel Merino, explica que el acuerdo busca «entregar a los ganadores algo que vaya más allá de la gaviota de plata y el importe en metálico del premio». Otro objetivo es fortalecer la marca Viña del Mar a nivel internacional, ya que para los artistas representa «una puerta muy grande, porque es muy difícil para ellos entrar en el mercado europeo», señala Merino.

Tras 63 ediciones, Mega, la televisión chilena que se encargará de emitir Viña del Mar el año que viene, se ha puesto como propósito internacionalizar el festival. El diario local, antes mencionado, asegura que fue a mediados de este año cuando se firmó la alianza con el festival español, que ahora empieza a concretarse. Ambos ganadores acudirían al otro festival. Daniel Merino afirma que esta unión se hará efectiva en la edición de 2025. Por lo tanto, el ganador del micrófono de bronce en Benidorm llegaría hasta la Quinta Vergara, en febrero. A España le correspondería acudir, en esta ocasión, al mexicano Eddy Valenzuela, ganador de la competición internacional de Viña 2024.

Curiosamente, la primera edición del entonces Festival de Benidorm, en 1959, la ganó la chilena Monna Bell, con Un telegrama. Tras este triunfo, comenzó su carrera internacional como cantante y actriz. En 1960, otro artista chileno, Arturo Milán, se alzó como ganador en la ciudad alicantina. Volvió a ganar un chileno años más tarde, en 1982, el cantautor Fernando Ubiergo. Por otra parte, dos eurovisivos españoles, Raphael y Julio Iglesias, ganaron el Festival de Benidorm, aunque años antes de acudir al festival europeo. Iglesias, que venció con La vida sigue igual, en 1968, fue parte de ese intercambio que ahora se rescata, y debutó en el Festival de Viña en 1969.