El director de TVE cree que la UER ha trasladado la final de Eurovisión 2010 a un miércoles

Insólitas declaraciones del director de TVE, Javier Pons, sobre el Festival de Eurovisión 2010 en el programa de la Defensora del Espectador, RTVE responde, que ha emitido este sábado La 2. Según Pons, TVE ya ha manifestado su extrañeza a la Unión Europea de Radiodifusión (UER) por que «se haya modificado el día de emisión de la final de Eurovisión de un sábado a un miércoles, y que encima ellos [en alusión a la UER] no hayan tenido en cuenta que coincide con un gran evento deportivo internacional y de dimensión mundial» como es la final de la Champions League.

«Hemos dado a conocer a la UER nuestra extrañeza y nuestra petición de que reconsideren la celebración del certamen en esa fecha, primero porque no responde a la tradición programática del festival de Eurovisión, que está emplazada a los sábados por la noche y porque es incompatible con la final de la Champions, que se emitirá por La 1 de TVE y esperemos que con equipos españoles, como este año», indicó Pons al hablar sobre el festival musical más importante de Europa, que, por cierto, reporta a la corporación pública que dirige audiencias millonarias, situándose el último Festival de Moscú en el programa no deportivo de mayor audiencia de TVE en el mes de mayo.

Así ha explicado Pons la supuesta coincidencia de fechas entre la final del Festival de Eurovisión de 2010 y la final de la Champios League de fútbol, en teoría el 22 de mayo de 2010. Ahora bien, lo que parece desconocer el máximo responsable de TVE es que quien ha cambiado la fecha de la final no ha sido la UER con el festival de Eurovisión, cuya final se sigue celebrando un sábado y no un miercóles como dice Pons, sino la Champions League, que a partir del año próximo ha decidido emitir su final un sábado en vez del tradicional miércoles.

Pons también desconoce, al menos cuando grabó el programa, que la UER y la televisión noruega NRK han fijado ya como fecha definitiva para la final eurovisiva el 29 de mayo de 2010, con lo cual no hay coincidencia alguna con la final de la Champions, que será una semana antes, el 22 de mayo.

SUPERPOSICIÓN DE DOS CONTRATOS

Sobre las causas que llevaron a la cadena pública a no emitir en directo la segunda semifinal de Eurovisión, la directora de Programas de TVE ha esgrimido lo siguiente: «Se superponían dos contratos en tiempo de emisión y cadena. Por un lado, el tenis a las 20.00 horas, y por otro, la segunda semifinal de Eurovisión a partir de las 21.00 horas.  Para no incumplir ninguno de los dos contratos, TVE decidió emitir primero el Master de tenis de Madrid e inmediatamente después y en diferido e íntegramente la segunda semifinal de Eurovisión».

Cebrián ha pedido disculpas porque con esta decisión se sacrificó el televoto. En ningún momento, ha hablado de «problemas técnicos» como en su día argumentó la corporación pública para justificar la no emisión en directo.

TEORÍA DE LAS MAYORÍAS Y LAS MINORÍAS

Por su parte, el director de TVE, Javier Pons, sí se refirió a los acuerdos deportivos y esgrimió la teoría de las mayorías y las minorías. De esta forma se expresó Pons: «TVE tiene múltiples acuerdos de derechos deportivos con diversos interlocutores. Eso implica que tienes que conjugar una programación que atienda el cumplimiento de los contratos a los que nos obligan esos derechos y al mismo tiempo intentar conciliar eso con el mayor interés general. Ese es nuestro criterio de actuación».

Según dijo, «hay eventos deportivos que por su propia evolución van variando su programación y con muy poca capacidad de reacción en el timing horario, nos proporciona nuevos horarios y tenemos que actuar sobre la marcha. Cuando sucede algo así, tenemos que atender al cumplimiento de ese contrato, y cumpliendo eso, para no comprometer a TVE, que es la casa de todos, y meterla en una situación comprometida legalmente, atender al interés general. A veces hay minorías que se sienten incómodas con determinados eventos donde no se puede atender a todo el mundo, me disculpo, pero es una minoría y nosotros tenemos que trabajar para la mayoría de espectadores».