Sí señor, en sorteo nos ha tocado cantar en último lugar, y digo nos ha tocado, porque aunque será nuestra querida Soraya la que dará el cayo y cantará en Moscú, todos y todas, estaremos desde donde sea cantando con ella La noche es para mí. ¿Quién sabe? esa fuerza de nuestro corazón y aunque no demos el acorde exacto, porque no somos cantantes, espero infunda energías positivas que lleguen a las frías y lejanas tierras rusas.
Y esta columna quiere ser una fiesta a la que están invitadas aquellas cantantes que cantando en último lugar se han llevado el Primer Premio del Festival de Eurovisión. Y aunque sea hacer historia ficción porque Soraya todavía no ha participado, yo ya la invito, porque me da la gana, a esta fiesta de GANADORAS.

Y es curioso porque todo han sido mujeres, bueno hubo un grupo, liderado por una mujer, claro. Pues bien, la primera fue Jacqueline Boyer por Francia el 25 de marzo de 1960. Quiso vengar el último puesto obtenido por su padre Jacques Pills, en 1959 en representación de Mónaco. El Pierrot del papá se convirtió en un Tom Pillibi que ganó por goleada a los ingleses en su casa. Fue el primer tema puramente festivalero, de muy buena factura, alguno lo calificó de infantil, pero fue estupendamente defendido por una Jacqueline de 19 años. Esta mujer tuvo éxito en esa década, y luego se vio eclipsada por el carisma del propio Pillibi y le costó salir de la etiqueta eurovisiva, llegando incluso a odiarla un poco porque camuflaba todo lo demás. Con los años lo vio con otra perspectiva ya que estuvo en el 25 Aniversario de Eurovisión cantando el tema en Noruega en 1981. Tuvo una carrera fluctuante. Pasó a llamarse Barbara Benton y se le perdió el rastro al irse a vivir a los Estados Unidos. Su nombre verdadero es Eliane Ducos y nació en París en 1941, hija también de la gran cantante de época de entre guerras Lucianne Boyer. Actualmente vive en la ciudad francesa de Saint Gaudens muy apartada de las luces del espectáculo, pero sin olvidar su paso eurovisivo ya que en alguna ocasión ha visitado la televisión de su país y otros cantando el Tom Pillibi, ¿por qué no?…

Diez años después una cándida chica nacida en Londres, pero criada en Irlanda del Norte, Dana o Rosemarie Brown Scallon, salió la última a cantar en Amsterdam el 21 de marzo de 1970 y ganó esa mini edición de Eurovisión. Digo mini porque sólo eran 12 candidatos, pocos, pero sustanciosos, lo mejor de cada país. Nosotros llevamos a Julio Iglesias, para qué decir más. Pues Dana, de 19 años como la Boyer, salió sentada en un cajón y triunfó con su All Kinds of Everything, balada sentimental y de acordes pegadizos muy apropiada para la comedia musical de otros tiempos, no de 1970, claro. Esta mujer después se hizo líder política conservadora, ultra católica, presentándose a la presidencia de Irlanda en 1997 como Independiente. En esas lides no ganó, pero siguió con su labor evangelizadora por estos mundos de Dios, visitando muy asíduamente al Papa y luchando en contra del aborto, matrimonios gays y demás cosas que ella cree están fuera de sus convicciones. Bueno, ahí está su intervención en Eurovisión. Hizo muchos álbums de cantos religiosos en los últimos años, pero sin tener una carrera muy exitosa fuera de su país o el mismo Vaticano. A sus 57 años, sigue en activo con la música evangelizadora y la política.

El 7 de mayo de 1977 en Londres, Wembley concretamente, Francia volvía a ganar cantando en último lugar con la portuguesa afincada en París desde muy joven María Micaela Lopes o Marie Myriam que es como se la conoce artísticamente. Era otra balada, cadenciosa, de corte clásico, pero con un empaque impresionante que dejó, como Jacqueline Boyer y Dana, a los ingleses en segundo lugar, curiosa coincidencia. L'oiseau et l'enfant se hizo un tema muy conocido en todo el Mundo, versionado en muchos idiomas, entre ellos el español. Otra de las curiosidades es que la Myriam también tenía 19 años como las otras dos, y es que hasta el día 8 de mayo no cumplía los 20 años. Son cosas que chocan, pero es así. Dicen que estaba como un flan, y de hecho se nota en su puesta en escena y después cuando casi deja tuerto a uno de los cámaras de la BBC al salir a recoger el premio. Tardó algunos minutos porque le estaba poniendo hielo al hombre ya que la pobre había tropezado entre bambalinas con el señor y este casi se traga la cámara, en fin, lo circunstancial era la cara de boba que ponía la presentadora Angela Rippon, al ver que no salía la francesa a cantar de nuevo. Todo quedó en susto y lo hizo fantásticamente. A esta mujer, nacida en Braga (Portugal) en 1957, la hemos visto muchas veces dando los votos de su país de acogida ya que es presentadora de fama en Francia. Sus padres emigraron a París cuando ella era una niña, pero antes incluso vivió en el Zaire, y se inició en el mundo musical de la mano de la misma Amália Rodrigues. El tema de Jean-Paul Cara y Joe Cracy se hizo un histórico del Festival y Marie ha estado presente en todo lo referente a Eurovisión, porque algo me dice que es una eurofan también, eso se nota. Estuvo en los 25 y 50 Aniversarios del Evento en 1981 y 2005.

La historia quiso que fuese así, y en 1982 y 1983 ganaron dos mujeres también cantando las últimas. Se trata de Nicole por Alemania y Corinne Hermès por Luxemburgo. Nicole dio la primera victoria a su país, delegación que concursaba desde 1956 y nunca había conseguido el Primer Premio. En Harrogate, el 24 de abril, por fin les tocó. El tema en forma de himno, Ein bisschen frieden era un canto a la paz del mundo, unido a una imagen también muy candorosa como las tres anteriores cantantes, se llevó a los jurados de calle ya que obtuvo 61 votos más que el segundo clasificado que ese año fue Israel con Avi Toledano. Nicole (Hohloch) Seibert nació en Saarbrucken el 25 de octubre de 1964. Cuando ganó tenía 17 años y cantó sentada, como Dana. El tema se hizo número uno en muchos países, en España tuvo una gran repercusión también porque la canción es además muy pegadiza. Dieron en el clavo los autores, Ralph Siegel y Bernd Meinunger que se quitaban la espinita de tantos y tantos intentos con estrellas de su país en Eurovisión. Esta canción estuvo entre los temas más valorados y que participaron en el 50 Aniversario de Eurovisión en 2005 quedando séptima de las catorce competidoras, con votos dados por todo el público europeo. No la vimos en la Gala, pero sí mandó un mensaje de todo lo bueno que el Festival le había traído, cómo no, le dio la fama.

Al año siguiente, el 23 de abril de 1983, la parisina, nacida en Lavigny-sur-Marne, Corinne Hermès en representación de Luxemburgo ganó con Si la vie est cadeau. Como un regalo para ella fue esa victoria. Corinne tenía 21 años y era amante de las canciones de Barbra Streisand. Tuvo un éxito hasta finales de los ochenta grabando su último trabajo de esa etapa en 1989 para volver al mundo de la canción en 2006. El tema de Corinne es una gran balada que tiene la influencias de las baladas de otras ganadoras como Anne-Marie David o Vicky Leandros, y que quizá en los años ochenta estaba algo desfasada, precisamente en una década donde privaba lo festivalero. Con todo, como tiene ese portento de voz hizo un número que dejó helada a la sala olímpica muniquesa, no había para menos. Con ese torrente y ese porte, vestida de rosa chicle, y esos ojos, Díos mío qué ojos mirando a cámara, no podía perder. Israel volvía a quedar segunda esta vez con la malograda Ofra Haza.

Y en 1989, el 6 de mayo, otra mujer, Emilija Kokić, líder del grupo Riva, fueron los ganadores cantando los últimos uno de los temas más criticados de la historia eurovisiva por considerarse una tema demasiado “facilón” y calificado de “poca calidad” en comparación con los demás competidores. Pero es que la extinta Yugoslavia venía buscando la victoria durante toda la década quedando cuartos en 1983 y 1987 y sextos en 1988. De hecho, algún periodista dijo que se quería dar la cara amable de esa Perestroika con los yugoslavos, y obteniendo así la primera y buscada victoria para un país que debutó en 1961 como España y nunca había ganado. Tuvo batacazos sonados a lo largo de su historia, algún año faltó como en 1977, 1978, 1979, 1980 y 1985. El triunfo de Riva con Rock me no traspasó fronteras y dejaron a los británicos en segundo lugar con una balada cantada por Ray Carvana líder de Live Report que quizá ese año sí merecían la victoria. Por su parte Emilija tenía 20 años cuando ganó, había nacido en Zadar el 10 de mayo de 1968, le faltaban cuatro días para su cumpleaños cuando venció en Lausanne. Desde mediados de los años noventa hizo su carrera en solitario siendo una de las artistas más conocida de su Croacia natal a sus 40 años cumplidos, y también la vimos en el 50 Aniversario de Eurovisión.

¿Por qué la historia 20 años depués de eso no nos puede deparar a nosotros ahora la victoria cantando últimos? Soraya es nuestra flamante propuesta y por eso en ella tenemos puesta la esperanza, sabiendo que no es la única que cantando la última puede ganar, que ya ha habido otras seis mujeres. Yo quiero pensar que puede ocurrir con La noche es para mí y que España, ya que no lo consiguió con Betty Missiego cantando última en 1979, lo haga Soraya treinta años después. Son muchas las coincidencias, pero es que también es mucha la garra de nuestra extremeña de oro para Moscú. ¡Suerte Soraya! ¡Suerte España! para el próximo 16 de mayo.

Reyes del Amor, 13/04/2009