¿Por qué Mirela?

Pocos dias después de ver como Leklein se alzaba con la victoria del Eurocasting los eurofans nos enfrentamos a una nueva elección y esta vez no podemos fallar porque es la última oportunidad que tenemos.  En primer lugar deberiamos pensar qué puede ofrecer España, a qué tipo de canciones no le podrian hacer sombra ninguna […]
Publicado el día 03 de diciembre de 2020
IMAGENES WEB-03

¿Por qué Mirela?

Pocos dias después de ver como Leklein se alzaba con la victoria del Eurocasting los eurofans nos enfrentamos a una nueva elección y esta vez no podemos fallar porque es la última oportunidad que tenemos.
 
En primer lugar deberiamos pensar qué puede ofrecer España, a qué tipo de canciones no le podrian hacer sombra ninguna “potencia eurovisiva” como Suecia, Rusia o incluso la recien llegada Australia. En cuanto a Suecia creo que no hay mucho que describir, ya que al parecer todos tenemos en la cabeza que es una “suecada”. Rusia por otra parte siempre apuesta por un tema con una gran posibilidad escénica, porque unos cuantos años atrás no recuerdo aun una puesta en escena sobria del país. Y Australia simplemente sabe como combinar los dos elementos a la perfección hasta conseguir un segundo puesto e incluso la victoria por parte del jurado.

Una vez analizado también podriamos analizar que nos ha dado a España un TOP10 en estos últimos 16 años porque irse más allá seria poco útil. Empezando por David Civera hasta llegar a Ruth Lorenzo pasando por Rosa López, Beth, Ramón y Pastora Soler, siendo estos nuestros mejores puestos, podriamos hacer un pequeño balance. La mayoria de estos son temas latinos, bailables y con calidad que son adjetivos que no siempre van juntos. También vemos el triunfo de grandes voces como Pastora Soler o Ruth Lorenzo que defendieron al país con unas baladas a la altura de Eurovisión e incluso con puestas en escena algo llamativas en el caso de esta última. 

En el lado contrario veamos nuestras peores posiciones desde la vigesímo quinta plaza de ESDM hasta la reciente vigesímo segunda de Barei. Entre estas también hemos tenido grandes chascos como ese Amanecer de Edurne o aquella noche que no fue para Soraya Arnelas. Se puede decir, por tomar como ejemplo estas tres, que siguieron un patrón parecido porque no se puede decir que en ninguno de los casos fuesen puestas en escena sencillas. Porque si no fue efectiva una desaparación “mágica”, se probó con una luz que bajaba del cielo, un vestido que cambió a mitad de actuación o una caída espontánea en mitad de la canción, que aunque de otra forma también utilizó Rodolfo Chikilicuatre de manera más cómica, pero que incluso dio un mejor resultado. Visto esto podriamos sacar en conclusión que las puestas en escena no son el fuerte de España. Esto sin tener en cuenta a RTVE a la que se ha intentado hacer culpable de un fracaso trás otro pero que no justificaria para nada casi una última posición estos años atrás, porque cuando Ruth Lorenzo consiguió esa 10/9 posición o Pastora Soler consguió la mayor puntuación desde Anabel Conde nadie dijo nada. 

Entonces una vez teniendo claro que por ahora no podemos competir en el campo de Suecia o cualquier otra país “estrella” del festival porque nos podemos encontrar chascos como el de (…), 2009, 2013, 2015 o 2016 (A pesar de ser el tema “más europeo que España jamás haya enviado” o esa propuesta “que nunca se ha visto en Eurovisión”) paremonos a pensar que puede ofrecer España a Europa, que es lo que identifica a España musicalmente. 

¡Está claro! Canciones latinas, bailables, de “chiringuito” que no tienen porque ser una cutrez. Si algo triunfa en España son las canciones de verano, frescas, agradables y que te hagan bailar incluso aunque no te guste el estilo. Es por ello que creo que España deberia volver a probar esta formula que no garantiza el éxito pero al menos no caemos en el intento de parecernos a Europa en un sonido que España no sabe del todo hacer bien. Seria como si España se presentase a un certamen gastronómico con una tortilla francesa, pasta o albondigas suecas, en vez de con una paella valenciana, una torilla de patatas o un buen gazpacho andaluz. 

Este año teniamos a Brequette como mejor opción internacional si queriamos probar algo asi por el simple hecho de que también aporta ese rasgo étnico que no todos los países llevan. Y por otro lado teniamos a Javian con una canción veraniega y que daba buen rollo pero que en los directos se vio que no estaba preparado para enfrentarse al gran escenario de Eurovisión. Descartadas estas dos opciones se abre una nueva posibilidad de “triunfo”. Mirela. 

“Contigo” es una canción fácil de escuchar con mucho ritmo y que te pone a bailar. ¿Del Caribe Mix 2005? pudiera ser, pero,  ¿a quién no le gusta eso?. Recordemos que hace un año veiamos a las Ketchup en Suecia en ese festival tan idolatrado por todos, el Melodifestivalen. Y mientras patinaba sobre hielo en Praga el año pasado sonó la misma canción. Y La Macarena, Vamos a la playa, e incluso los Pajaritos de Maria Jesús son entre otras canciones por las que no habria apostado nadie y han triunfado fuera de España.
En 2017 deberiamos quitarnos ese prejuicio hacia lo español y apostar por algo que nadie mejor que España sabe hacer. Porque realmente deberiamos pensar en lo que gusta fuera antes que pensar en los gustos musicales personales, por que quizás si tenga más calidad el “Ouch!” de Leklein o el “Do it for you lover” de Manel Navarro pero pensad si ha triunfado en Europa algun tema que no lleve la “marca España” por algun sitio. Lo siento pero a Europa no le vale con llevar unos lunares en la camiseta. El continente europeo espera de España alegria, luz, y buen rollo que viene a ser lo que buscan cuando vienen. 


Porque no hay una formula para triunfar en Eurovision, pero no es excusa para fracasar año trás año.

Mirela, “Contigo”


La Macarena “Los del Rio”

Las Ketchup “Aserejé” en el Melodifestivalen 2016

Conversación