Parece que fue ayer cuando dio comienzo este programa que tanta espectación había suscitado entre los aficionados al Festival, y ya vamos por la tercera gala.

Echando la vista atrás a la primera, hay que reconocer que las cosas han mejorado mucho:

Paula Vázquez anda ya como Pedro por su casa, Massiel se lanza al escenario micrófono en mano para animar un poco (me pareció escuchar desenchufa joder), y los concursantes (que ya han ido tomando nota de las galas anteriores) cuidan más sus actuaciones, coreografías, etc.

Dicen que no hay mal que por bien no venga, y los nefastos resultados de audiencia cosechados con las dos galas previas, han servido para que algún responsable se ponga las pilas y mejore la dinámica del concurso dentro de lo posible a estas alturas.

La consecuencia más visible es que las votaciones se han acortado. Antes a mucha gente se le hacía interminable.

Y en vista de que ya se había más que descubierto el paripé que estaban haciendo al querer dar a entender a la audiencia que se conectaba con cada Comunidad Autónoma (cuando en realidad todos los portavoces se turnaban delante de una misma cámara en los mismos estudios de Madrid a dar los votos por comunidades), han decidido cortar por lo sano y que sea una sola persona quien lea los votos desglosados por comunidades.

Esto acelera mucho el ritmo del programa al eliminar el rollo protocolario insufrible de Buenas noches Paula buenas noches a todos los españoles hoy estás divina Paula y felicidades a todos los concursantes porque todos son unos campeones vamos allá con la votación de ….

Es la única parte por la que se podía tratar de acortar el programa sustanciosamente porque los videos de presentación ya están montados, y por las actuaciones evidentemente, no.

Ayer ya el notario fue presentado en sociedad. Mucho mejor así para todos ¿no? Será simple casualidad o que se pasan por aquí de vez en cuando, pero ayer nos dijeron que sí, que hay notario y que se llama Luis (no recuerdo el apellido). De ahora en adelante Luis el notario. Y con cara de pícara Paula Vázquez nos lo volvió a repetir ya avanzado el programa, como diciendo para que os quede claro, pesaos. Captado.

Centrándonos en los concursantes, personalmente en esta gala se me hizo muy difícil decantarme por algún favorito único en detrimento de todos los demás, por eso se me hizo extraña. Tenía alguna gente conocida concursando ayer y poniendo toda su ilusión y por eso no pude analizarlo todo fría y objetivamente.

En cualquier caso ayer fue una gala bastante original con respecto a las anteriores en cuanto a puestas en escena.

Ya desde el comienzo aparecen en escena Just 4 Voices, el cuarteto femenino que vestía como Marie N (Letonia 2002) y cantaban como los Cosmos (Letonia 2006). Que viva Letonia. Originales si que eran y no lo hacían nada mal, pero me recordaban mucho al grupo Cosmos y no quisiera igualar la experiencia.

Después Yolanda, una solista con garra y fotogenia, de la que nunca había oído hablar y que me sorprendió gratamente en el escenario. Era capaz de bailotear mientras cantaba y además se arriesgó con Like a prayer de Madonna, sin desmerecer para nada la canción. Llegué a pensar que podría ser la sorpresa de las votaciones.

Luis Fierro. Seguimos siendo injustos a no poder más con los veteranos. Amaia Saizar y Helena Bianco ya pasaron por este mismo trago y ahora le tocaba a este hombre, que no sólo cantó e interpretó impecablemente sino que es muy conocido de mi generación hacia arriba. Viendo los criterios de votación del público era previsible su mal resultado desde el primer momento. Una pena.

Lourdes Savarese, la argentina, tenía tipazo e imagen (y ganas de hacer footing por el escenario) pero su voz resultaba más que justita para cantar un tema tan identificado con el vozarrón de Alaska. No logró convencer.

Paris venía del mundo de la interpretación y eso se notaba mucho. Le puso ganas y lo bailó. Sabía mirar a las cámaras. Pero su voz no lució nada.

Sheila Rodríguez además de buena imagen y una voz algo dulce y peculiar acorde con su imagen, cantaba con un buen chorro, pero en algún momento me vino a la cabeza aquello de la afinación dudosa. Me gustó mucho en un principio pero a medida que avanzaba la canción se me fue desinflando.

Arde Troya, el duo formado por Cristina Conde (que ya pasó por la primera gala) y Rafa Artesero (amigo de esta web, conocido de buenos ratos en Kiev y Atenas por muchos, autor de las canciones de Andorra 2005 y 2006, y compositor del 20% de las canciones finalistas del programa ayer anunciadas, etc. etc) no tuvieron la suerte suficiente en las votaciones como para poder clasificarse como intérpretes.

Sin embargo, transmitieron muy buen rollo, como diciendo nos importa un carajo pasar o no, hemos venido a montar el show y a divertirnos y nos lo estamos pasando en grande con Drive my car.

Se curraron una vistosa y fresca coreografía y sacaron un socorrido elemento de atrezzo al escenario (el coche), algo que solo se le ocurre a alguien que ya conoce el Festival. (Quiero esa gorra).

A continuación venían tres actuaciones seguidas que no eran para nada de mi gusto:

Yanira Figueroa, ganadora de Gente de Primera y con indudables cualidades vocales. Pero sintiéndolo mucho no me gustó el conjunto, no se por qué. Su forma de interpretar es la típica de cantante de copla, con cara de circunstancias y tal. Y para Eurovisión, pues como que no.

Javier Enzo fue indudablemente apoyado por su club de fans. Pero a mi no me convenció nada en cuanto al conjunto de imagen, interpretación y voz. Para Eurovisión, tampoco.

The Sweet Metal Band, aportaron mucho ruido y pocas nueces. Una cosa es ser heavy, y otra pretender ser el que más ruido mete y sin aportar nada original, de calidad, o novedoso.

Tras estos tres interpretes que no eran de mi agrado, venía Javier Rios. Simplemente correcto, no se qué decir. No me impresionó como para animarme a votarle. Me recordaba físicamente mucho a aquel cantante mexicano de los '80 que participó en la OTI del '79 y co-presentó luego el Festival una década más tarde, Emmanuel.

Luego venía Robin. Cantó bien y con las cámaras parecía simpática, pero fue eclipsada por otras solistas femeninas de la noche. Mucha competencia.

Y por último 3 actuaciones consecutivas que esta vez si que me gustaron bastante:

Rebeca, con el número de la mala suerte, y con sus éxitos internacionales como carta de presentación, salió al escenario con la mejor imagen de la noche, o la imagen más eurovisiva de entre las féminas, o no se.

El micrófono y sus variaciones de volumen a las que ya estamos acostumbradísimos se cebó con ella, pero sin embargo llenaba el escenario con su presencia y su melenón. Es cierto que en algunos momentos pareció quedarse sin aliento al principio de la canción, pero también es cierto que después aguantaba la voz en las notas largas como no la habíamos visto en sus otras canciones.

Por primera vez en toda la noche se veía a una cantante que iba vestida y peinada como para poder salir a cantar a Eurovisión. Que ya se que la gente viene arreglada de casa, y que los medios son limitados y que luego en Eurovisión peinan y maquillan bien a todo el mundo, pero en este caso no hacía falta echarle imaginación porque ya lo estábamos viendo.

Luego Nash, con apoyo de quinceañeras entre el público y suponemos que en todas partes. Arrasaron en las votaciones como jamás se ha visto, y creo que fue justo. Después del susto con Santa Fe (lo siento pero me espantan) lo agradecí especialmente.

Ofrecieron un espectáculo vistoso, y aunque probablemente ninguno de los cuatro integrantes como solista se habría comido un rosco, sus voces como grupo están muy bien complementadas.

Además tienen un look muy cuidado y perfectamente compatible con Eurovisión. Comparados con los grupos masculinos de niños monos que han desfilado por el Festival (como los One de Chipre 2002) estos en conjunto vocalmente convencen mucho más.

Vamos, que además saben cantar. No me importaría que nos representasen ellos. El tema de la canción para ellos ya es otro tema.

La última en salir fue Marta Llenas, que según explicó Paula Vázquez estaba allí casi por casualidad animada por la organización. Lo cierto es que para mi estaba entre las tres mejores de la noche. Tenía una cara muy agradable, una voz espectacular y cantaba aún mejor.

Las votaciones fueron un poco de infarto viendo la lucha por el tercer puesto, del que Rebeca fue desbancada, aunque se le veía muy tranquila. Afortunadamente para ella fue rescatada por la organización, para tranquilidad de muchos Eurofans.

Alguien del público en un arrebato de alegría (no me quiero imaginar quien) gritó es la mejor de tal forma que ni la presentadora pudo obviar el grito e hizo un comentario.

Ah, también se aprovechó la gala de ayer para dar a conocer las canciones más votadas por el público en la página oficial (que por cierto ha cambiado de dominio probablemente para no ser confundida con el podcast Misión Eurovisión) Ahora es www.mision eurovisión.tve.es

Sobre las canciones seleccionadas, ninguna sorpresa, lo cual es buen síntoma, ya que si hubiese habido algún desagradable susto y conociendo como conocemos lo que piensa la mayor parte de la gente que entra a votar (los Eurofans), habría olido a tufillo el tema de la elección. Afortunadamente no fue así.

Lo único que me asombró es que pasase la canción Me gusta hacer canciones con un hey en lugar de Ain veri japi nau. Puestos en este estilo, me parecía infinitamente mejor la segunda, pero bueno.

Las canciones eliminadas eran las más desapercibidas, así que no ha habido histerismos colectivos. Ya habrá tiempo.

Hasta la semana que viene!

MIKI