Primer día de ensayos en tu ciudad, la mía, nuestra ciudad, Copenhague, o lo que es lo mismo, la ciudad de Eurovisión 2014. Las continuas noticias y actividades, y el caos tan desconcertante y a la vez tan maravilloso, me ha impedido publicar en texto tan rápido como hubiera sido mi deseo mi análisis del primer ensayo inidividual del Big 5 y el organizador. Nunca es tarde si la dicha es buena por lo que aquí están algunas de mis ideas y opiniones sobre Alemania, Dinamarca, Francia, Italia, Reino Unido y España.

ESPAÑA

Ruth Lorenzo ya ha pisado por primera vez el escenario del B&W Hallerne de Copenhague, su sueño hecho realidad de representar a España en Eurovisión, un momento que, según las palabras de muchos de sus antecesores, no va a olvidar jamás. El primer ensayo de España ha conseguido una gran ovación en el centro de prensa, posiblemente una de las más grandes que he presenciado durante nuestra estancia, y en todas y cada una de las cuatro pruebas. La sensación general se puede resumir en tres palabras, optimismo, seguridad y tranquilidad.

Nuestra representante en Eurovisión 2014 ha hecho una buena primera toma de contacto, excelente a nivel vocal, con un gran directo, sin llegar a forzar ni a mostrar todo su gran potencial. El equipo artístico ha hecho caso a todas y cada una de las críticas que se han vertido hacia su apuesta, algunas con más educación y fortuna que otras, aunque todas efectivas al fin y al cabo. Su voz y su expresividad se han controlado y suavizado pero sin perder su carácter y su sello personal.

La escenografía incluye, por primera vez en la historia de Eurovisión, un elemento digital, algo que no se verá en el escenario pero sí en televisión, la deseada y discutida lluvia. Una tormenta al inicio de la actuación empapará la pantalla y, gota a gota, mojará las pantallas del suelo en un precioso plano. Los fondos combinan los blancos y negros con la lluvia en azules en un diseňo en el que, más importante que la animación en si, destaca la iluminación, con fogonazos de luz que hacen aparecer y desaparecer a la intérprete en medio de la tormenta. El efecto queda realmente original y sorprendente.

ALEMANIA

Después de la ansiada y deseada victoria de un país del Big 5, Alemania ha continuado el mismo camino que le llevó al número 1, candidaturas comerciales, frescas y modernas, productos fácilmente comerciables y exportables, sencillos sin renunciar a la calidad. Elaiza e Is it right cumplen a la perfección este patrón, en forma de grupo de chicas tradicional, a medio camino entre el pop y el folk, y una imagen actual con influencias ochenteras. El problema es la indiferencia, Alemania gusta a todo el mundo, sin ser la favorita de nadie, lo cual la condena irremediablemente al pozo de la clasificación.

DINAMARCA

El gusto es algo personal y subjetivo, todos tenemos nuestros amores y odios, nuestras filias y fobias. Dinamarca es una de las tres candidaturas que menos me gustan de Eurovision 2014, lo cual unido al hecho de ser la anfitriona me hace tenerle más manía, me resulta soporífera y tonta. Todos los años hay una candidata a la que comienzas despreciando y acabas aceptando, esta ocasión probablemente sea esta, a base de escucharla una y otra vez. Yo soy consciente de que es una de las favoritas en las casas de apuestas, también para los fans en general y, una vez visto su primer ensayo, lo será para el jurado y el televoto. Dosis de buen rollo, alegría y diversión, una melodía fácil y sencilla hasta el absurdo, y una escenografía resultona. Una mezcla entre lo clásico y lo moderno, cierto aire vintage, sin renunciar a ser cualquier ídolo forracarpetas al uso. Yo no le termino de ver la gracia pero cuando ves a todo el mundo disfrutar con algo hay que rendirse ante la evidencia.

FRANCIA

Nuestros vecinos vuelven a sorprender con un nuevo cambio de registro, una propuesta muy acorde a la historia de Francia en Eurovisión, contemporáneos, originales y multiculturales. Sus posibilidades de triunfo son nulas, incluso un buen resultado seria una sorprendente, aunque es digno de mención el riesgo que asumen anualmente presentando una gran variedad de estilos. Una apuesta alternativa, divertida y fresca, la cual podría sonar en cualquier discoteca o radiofórmula del mundo, con un directo simpático pero sin fuerza, quizá por el escaso carisma o trayectoria de su grupo, y sin suficiente gancho escénico o musical para enamorar en un concurso de estas características. Una nueva rareza de Francia, la cual pasará sin pena ni gloria, aunque formará parte de la historia.

ITALIA

Italia vuelve a apostar por si misma, sin caer en convencionalismos, ni efectismos, ni tópicos, simplemente por una de las mayores estrellas de su panorama musical, un tema identificable y reconocible, y una actuación sencilla, carente de estridencias, como un concierto. Calidad en definitiva. Probablemente ninguna de las candidaturas desde su esperado regreso al festival fuera suficiente para ganar pero si, holgadamente, para conseguir tres top diez consecutivos que quizá se conviertan en cuatro. La mia citta crece en directo gracias a la arrebatadora presencia de Emma Marrone, su diferente y personalísimo timbre de voz, y su actitud de diva decadente. Buen ensayo, bien recibido en general aunque sin despertar pasiones, probablemente más susceptible de apoyo por parte del jurado que del teléfono.

REINO UNIDO

Una de las candidaturas favoritas Eurovision 2014 y, a título personal, mi absoluta preferida. La BBC, por fin, después de la larga travesía en el desierto, salvo alguna excepción, apuesta por una candidatura acorde a su mercado musical. Molly tiene carisma, un ángel especial que enamora a la cámara, y una voz diferente, dulce y rasgada a la vez, la cual encabeza la lista de las voces peculiares de este año. Children of the universe es un himno, una canción universal que podría pasar a engrosar la lista de ganadoras de Eurovisión, extremadamente pegadiza, con un mensaje claro y directo, y fácilmente reconocible. Los coros son mi debilidad, me enamora su juego armónico, sus tonos graves y su inspiración tribal, un añadido extra que redondea la composición. El hándicap es su condición de favorita, no tanto por partir en los puestos de cabeza de las casas de apuestas y encuestas, sino por sonar a ganadora a primera escucha, aunque el apoyo de los jurados parece lo probable, y el beneplácito de la audiencia seria lo razonable.

Copenhague, a 4 de mayo del 2014.