Con el título “Eurovisión 2005, elige nuestra canción”, doce candidatos presentan sus temas para ir a la 50 edición del Festival de Eurovisión que se celebrará en Kiev el 19 y 21 de mayo.

Entre el 4 y el 5 de marzo se decide el candidato para Kiev, y sinceramente la Gala anoche fue algo acelerada, con temas muy previsibles e interpretaciones mediocres. Los presentadores, Carlos Lozano, Ainhoa Arbizu y Patricia Pérez gritaban como descosidos, parecía que tenían mucha prisa y se atrabancaban con el guión, claro a esa velocidad.

Se presenta a los cantantes como en Eurovisión ’83, ’61 o ’59. Todos van saliendo al escenario conforme Carlos Lozano les va llamando a grito pelado. Buen inicio, aunque después, conforme vamos escuchando las canciones entramos en la cruda realidad de esta alocada preselección. No se han matado mucho en buscar temas de más calidad, salvando alguna excepción que más tarde comentaré.

María Lorente abre la gala. Esta chica de 20 años nacida en Jérez de la Frontera está actualmente estudiando la rama administrativa. Su tema tiene aire andaluz con toques recitados y algo simples. “Vente pal sur” es una canción sin pretensiones. María Lorente baila regular tirando a mal y el coro acaba de estropearlo todo. Este tema está muy trasnochado y es uno de los más mediocres de la noche, totalmente prescindible.

Los Jaster (Víctor, Pilar, José y Patricia), con “Cómo olvidarte” buscan el efectismo de los cuartetos mixtos eurovisivos que tanto éxito tuvieron años atrás. ¿Iban de ABBA o de Bucks Fizz?, creo que en el intento se pueden dar el batacazo, porque las comparaciones son odiosas y Carlos Lozano los comparó con los prodigiosos ABBA. Bueno, si lo hizo para darles ánimos no está mal, pero la verdad, no estamos sordos ni ciegos y vemos que esto no tiene nada que ver. La coreografía de Jaster es efectista, pero de voz están algo flojos. El tema no es malo del todo si no fuera por las voces.

Vicky, Luisi y Susi no son otras que Las Supremas de Móstoles que habrán revolucionado los patios de vecinas de su pueblo, pero también al público de la gala. El tema tiene un estribillo pegadizo, buscando la gracia y el chiste. Estas señoras se recorrieron salas de aquí y allá formado parte de la Orquesta Jerusalén. Denuncian que “su marido les pone los cuernos por las páginas web de sexo”. Tema actual y doméstico que no va a dejar indiferente a nadie. Son las más comentadas en foros y por los diarios. Esa publicidad ya la tienen, que es lo importante. No cantan mal y si se esmeran más en el vestuario y los arreglos musicales puede resultar un tema algo más atractivo. En fin, a mí me divirtieron, que es lo importante en estos casos.

Antes del cuarto intérprete los concursantes siguieron los “sabios consejos” de la niña Mª Isabel, ganadora del 2º Festival Eurojunior. Eso sí, los consejos estaban escritos en una pizarra a forma de chuletita, donde la niña podía añadir alguna que otra gracia muy manida ya.

Lanco nació en Lérida, es un apasionado del fútbol y estaría encantado de representar a España en Eurovisión. Su nombre de pila es Alberto y él mismo es el compositor de “Nada para ti, nada para mí”. Se trata de una balada al uso, muy mediterránea. Tiene un buen sonido acústico y la voz del chico no esta mal del todo. Pero los nervios le juegan una mala pasada en alguna estrofa, es como si le faltara el aire. Por lo menos la composición es de calidad, que seguro mejorará si es elegido.

Ya lo dijo Patricia Pérez. El tema de A-Crew “ es una propuesta tan arriesgada como tirarse en parapente con un paraguas”. Austin, Fidel, Marco y Simón son tres catalanes y un gaditano. Pero no tienen voz, ni gracia, ni educación. El tema no puede ser más soez, de mal gusto y con un estribillo tan repelente como ellos mismos. Encima bailan fatal, están desacompasados. Si eso intenta ser un “hip hop”, chicos mejor que os quedéis en vuestro barrio dando la nota, porque el tema resultó en algún momento ofensivo, no sólo por la letra, sino por los gestos machistas y ordinarios que iban haciendo todo el rato.

Enzo nació en Jaén y es un chico muy formalito y atractivo en escena. Desde los 6 años estudia en conservatorio de música y por lo visto es un prodigio del piano y la guitarra. Su voz rota nos recuerda a la de tantos cantantes españoles o italianos y su canción “Quien dirá” tiene un estribillo pegadizo. El tema es muy latino, pero arreglado con toque roqueros que le da un estilo especial. Aunque no sea elegido es un tema de calidad, entre tanta canción poco agraciada.

Felicitaron a la barcelonesa Katherina en su 18 cumpleaños. Realmente la canción de esta chica no innova, machaca en el estilo latino caribeño con una voz algo engolada. Tampoco baila mucho y estoy segura que si fuera a Kiev pasaría totalmente desapercibida porque ese estilo en Europa es un desastre.

Pierre N’Sue, también nacido en Barcelona es modelo de profesión. Un mulatito interesante y musculado que volvió “loca” a la presentadora Patricia. Pero Pierre tiene poquita voz, es poco comunicativo y sólo luce palmito, porque está cañón, eso es evidente. La canción que nos propone “Quizás mejor así”, es algo gris, sin nada de especial que pueda llamar la atención y cuando acaba olvidas su melodía al momento. Como sabemos esa no es la fórmula para triunfar en el Festival de Eurovisión.

Como ayer comenté en el foro el tema “Brujería” de Son de Sol (Lola, Esperanza y Sole), es un calco del “Aserejé” que hicieron tan popular la Ketchup. El inicio del tema es prácticamente igual y como no innovan no me parece correcto. Se han copiado descaradamente. Si TVE confiaba en esa propuesta que lleve a la Ketchup y punto. Estas hermanas nacidas en Ecija son profesoras de baile de renombre en su tierra. Poseen una academia de baile y han hecho galas por varios países. Pero la coreografía de estas chicas es muy previsible, el vestuario está muy poco trabajado, como ese look entre lo moderno y lo rancio. Encima en medio de la canción sale un esperpéntico señor que estropea la canción en su momento más pegadizo. Horroroso.

El cordobés Felipe Conde fue el que trajo más calidad en la gala de anoche. Sinceramente es un claro candidato. Primero porque canta bien, ofrece una imagen impecable, y además es el más experimentado de todos. Ya tiene grabados cuatro discos desde su primer álbum en 1999. Empezó en el mundo artístico a los 6 años. A los 14 ya formó un grupo musical llamado Calle sin fondo, según la presentación que se le hizo en la gala. Se trasladó a Madrid a los 19 años y hace poco se hizo muy popular con la canción “Los ángeles también bailan”. La canción de Felipe Conde “Echo de menos” es una balada con claro sabor latino. Sabemos también que ese estilo llevado por hombres al Festival nunca ha tenido grandes resultados si exceptuamos a Sergio Dalma. A ver, a ver, porque en Felipe hay un buen intérprete.

Gema Castaño es madrileña. Presenta radio y televisión una emisora y cadena local. Participó en una edición de Festival de Benidorm con el tema “La fruta prohibida”. Ha grabado un disco y ahora tiene muchas perspectivas de trabajo con su candidatura al Festival de Eurovisión. Pero la canción que Gema nos propone, “Santo Job”, dedicada a la paciencia, es algo repetitiva. La voz de la intérprete es muy nasal y poco atractiva. Ciertamente, aunque el tema busque el ritmo, no es más que otro tema de montón que ya se ha propuesto otros años sin éxito en Eurovisión.

Como dicen los presentadores, Yulia nació en Siberia, pero es ucraniana, le gusta la salsa, fue subcampeona mundial en este género, y lleva 5 años en España. Habla castellano a la perfección. ¿Es un intento de fusión?, porque la canción “Arriba el mundo” es una especie de himno algo pesado en su composición, con toque muy latinoamericano que en OTI gustaría mucho, pero en Eurovisión se puede llevar un gran chasco. Tal y como esta arreglado ahora no es el idóneo para Kiev. Tampoco Yulia canta mucho, más bien se pierde entre tanta letra interminable. ¿Para qué tanto texto si allí no nos entienden?. A veces Yulia pierde el aire entre las estrofas y el baile. Este tema tampoco mata teniendo en cuenta las perspectivas que se tenían de esta chica. En cuánto al vestuario, como el de Gema Castaño, mejor corramos un tupido velo. Necesitan que las arreglen un poco más, porque la primera era, como dije ayer una especie de Karina en sus años bajos. Además con el pelo recogido y los tirabuzones parecía sacada directamente de los años ochenta. Y Yulia lleva look a lo punk que nos recuerda algo a una especie de “vampiro” por la pintura en los ojos. Es una pena porque teniéndolos bonitos se los afea bastante. El intento de fusión entre lo orientalizante, lo latino y lo moderno, se queda en un mejunje incalificable hasta el momento.

Para acabar la gala, cantó Sergio Dalma una nueva versión del “Bailar pegados” aclarando “que no volvería nunca más al Festival”. Dijo “que esa situación es irrepetible”. Hijo tampoco te fue tan mal digo yo, si no hubiese sido por ese Festival… En fin, dio ánimos a los candidatos. Y también cantó Rosa, David Civera y Rosario para promocionar sus nuevos trabajos. Lo hicieron en playback. No lo entiendo. Ya que tanto se quejan de que los cantantes tienen pocas oportunidades en las televisiones para promocionarse, si salen lo podían haber hecho cantando en directo como los demás concursantes.

Esta noche se desvela el misterio.

Reyes del Amor 05/03/05