ISLANDIA 2007 o la vuelta en solitario de Eiríkur Hauksson

Queridísimas amigas: El otro día Maite Ripoll me invitó a una cena fría en su casa. Resulta que la acaba de pintar, ha comprado un sofá precioso, varios cuadros y un par de chucherías nuevas en las rebajas y no sabe cómo presumir de decoradora. Por eso, para hacerse la fina, me llamó y me […]
Publicado el día 03 de diciembre de 2020
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ISLANDIA 2007 o la vuelta en solitario de Eiríkur Hauksson

Queridísimas amigas:

El otro día Maite Ripoll me invitó a una cena fría en su casa. Resulta que la acaba de pintar, ha comprado un sofá precioso, varios cuadros y un par de chucherías nuevas en las rebajas y no sabe cómo presumir de decoradora. Por eso, para hacerse la fina, me llamó y me dijo que trajera algo que ella ponía el vino. Como sabía que luego me esperaba sesión eurovisiva intensa (con lo mal que me sientan a mi las preselecciones entre semana), acepté por no hacerle un feo y aparecí con una tarta de queso, hecha, por supuesto por mí, con la bandera islandesa decorada con mermelada de fresa, arándanos y nata montada. Bueno, aquello era todo menos la bandera de Islandia. Y es que, amigas, esa noche tocaba ver el SONGVAKEPPNIN 2007 de Islandia, compuesto por la friolera cifra de 24 canciones repartidas en tres semifinales, más la gran final y las actuaciones de Mihai Traistariu (Rumania 2006), Ruslana (Ucrania 2004), Helena Paparizou (Grecia 2005) y Gina G (Reino Unido 1996). Voy a empezar con la tarta, para ver si me animo.

Generalmente, servidora, siempre ha tenido predilección y cierta debilidad por las canciones que Islandia envía al ESC. No sé si por ser la hermana menor de las nórdicas o porque siempre ha sido, junto con Finlandia, una de las mal paradas en el reparto de votos. Debe ser decepcionante para los seguidores del ESC en Islandia, al igual que en otros países de los llamados "históricos" que no han ganado el Festival todavía (como Portugal, Malta, Chipre…) ver cómo delegaciones recién llegas a Eurovisión consiguen hacerse con el triunfo.

Quizás sea por eso, o porque Islandia sea la patria de Bjork o porque ha contribuido al ESC con aportaciones como la gran Selma (ESC'1999 y ESC'2005) , con iconografías tan petardas como la de Paul Oskar (ESC'1997) o Silvia Nótt (ESC'2006) o por haber llevado intérpretes tan queridos, para servidora, como Telma & Einar Ágúst (ESC'2001) Birgitta Haukdal (ESC'2003) o Jonsi (ESC'2004). No lo sé. Pero siempre terminan gustándome las canciones islandesas, aunque he de admitir (y esto habrá que decirlo bajito) "que su lengua, desde el punto de vista musical, es la cosa menos afortunada del mundo".

Y es que esta vez, amigas, viendo la Preselección Islandesa en casa de la Ripoll casi me quedo ciega. Entre la nueva iluminación que ha puesto (y que no se ve ni tres montados en un burro) y que el islandés es una lengua complicadísima, me pasé toda la noche mandándole a Maite que pusiera "pause" en el DVD para copiar, con fundamento y cierto rigor eurovisivo, los nombres de los intérpretes y de las canciones. Menudo dolor de cabeza con los nombrecitos que se gastan. Y total para nada, porque luego el corrector automático del "word" te los borra y te los cambia a su libre albedrío. Qué coraje.

Pues, eso, reinas, así están las cosas. Y, como ya han cantado "línea", ahora vamos para "bingo". Señoras y señores, a continuación, el comentario de la preselección islandesa. Qué ustedes lo pasen bien.

País: ISLANDIA

Tema: ÉG LES Í LÓFA ÞÍNUM (Valentine Lost)

Intérprete: EIRIKUR HAUKSSON


Foto de estudio de Eirikur, en plan madrastra de Blancanieves

Este año la preselección ha estado floja. Bueno, floja y oscura, porque hay que ver qué oscuridad más grande durante toda la noche. Hasta las cortinillas anunciando los temas y los intérpretes eran negras. Ya sabemos todas que este año triunfa lo siniestro, lo gótico y todo eso, pero es que ya empieza una a estar harta de tanto negro, chiquilla. Con lo bonito que son los colores, las luces, lo dorado y lo plateado (que esta primavera-verano se usan tanto)… Y ellos, dale con el negro y con lo oscuro. No lo entiendo, porque esa gente se pasa medio año con nubes, lloviendo, haciéndose de noche a las 4 de la tarde y llega Eurovisión y no quieren otra cosa que no sea negro. No lo sé. Allá ellos.

Pues, nada, que comienza el Songvakeppinn 2007 y aparece una chiquilla llamada Bríet Sunna Valdemarsdottir con una canción titulada "Blomabörn". Menudo nombre se gasta la criatura. Como te pongas mala en España y vayas a un Centro de Salud, la enfermera que te tenga que llamar en alto se acodará de ti toda la vida. Vaya nombrecito, mi niña. Mientras eso ocurre, que dios no lo quiera, tú te has plantado en la preselección de tu país con un recogido imposible. Pero, ¿quién te ha hecho esa barbaridad, cielo? Vamos, ni Dayana Paqui cuando tuvo que hacer un proyecto de fin de curso en aquel Simposium de Moños Portugueses de Lisboa en el 2004. ¡Es una especie de recogido o moño de los años 60`s, pero a un lado y al que luego le han clavado flores de tela, a juego con el traje! Y, para complementar la cosa, te han puesto a dos niñas de gimnasia deportiva haciendo elementos de acrobacia sobre dos pedestales, mientras tú cantas, con esa voz chillona que dios te ha dado, la balada con la melodía más imposible que pudiste encontrar; y, claro, todo esto en tu idioma. Dios, la que me espera esta noche.

Aparece luego Matthías Matthíasson con "Húsin hafa augu", una canción espantosa que parece sacada de cualquier recopilatorio de Schlager germano y que me recuerda al consagrado "Ein bißchen frieden" de Nicole (Alemania'1982). A continuación viene Sigurjón Brink con su canción "Afram", la cual parece la segunda parte del tema de Matthias. Entre la oscuridad del escenario, del salón de Maite Ripoll y lo aburridas que están siendo las canciones, me está entrando un sueño tremendo. Qué va, qué va… Esto no puede seguir así y, en un momento que la Ripoll no mira, le doy "Avanzar" al DVD y lo coloco en Jonsi.

Qué alivio. Aparece para alegrarnos la vista Jón Jósep Snæbjörnsson, "Jonsi" para nosotras, con su tema "Segðu mér". He de reconocer que, al principio, me quedé lela al verlo y el sueño se volatizó. ¡Pero como las islandesas no han elegido la reaparición de este guapísimo Jonsi, con chaleco negro y en camisas sin mangas, luciendo y marcando bíceps para gozo generalizado de todas las que nos enamoramos de él en el ESC'2004! ¿Y para qué se trajo a esas dos bobas vestidas con un body negro, camisa de cuello y estética de vampiresas de disfraz de fiesta de carnaval de crucero? Qué decepción, el chico está demasiado estático y qué serio, para cantar un tema que se me hace un poco rollo, aunque su voz rasgada es una gozada. Qué pena de intérprete. Quizás si la canción tuviera otros arreglos, la cosa hubiera pintado diferente. Pero se me hizo muy complicada oírla. Lo peor son las dos bobas que lo acompañan a cada lado y la mirada al vacío de los del coro. Jonsi vuelve al ESC, pero no con esto, please.

Y, como nos quedamos un tanto desilusionadas con el tema de Jonsi, tenemos a continuación otro Jonsi, pero en pequeño. Se llama Andri Bergmann y su tema es "Bjarta brosid". El muchacho está buenorro también aunque es medio bruto, pero creo que con el tiempo mejorará. Se muestra nerviosillo, pero, por lo menos, se mueve más que Jonsi. Su tema es una sosa balada con una querencia de schlager que tira para atrás. Qué manía con este estilo de música en Islandia, por dios.

Y llegamos al intérprete que quedó tercero. Se llama Hafsteinn Þórólfsson y nos trajo una canción titulada "Þú tryllir mig". Arranca el tema y nos lo encontramos sentado, en la inmensidad de ese escenario oscuro, en una de esas sillas blanca giratorias, de diseño danés y al más puro estilo "pauloscar" (aunque sin tanto glamour y sofisticación como nuestro Paul, todo sea dicho). Se hizo acompañar de dos bailarinas descalzas que realizaron una coreografía un tanto desconcertante y desordenada. Ahora me pongo aquí, ahora me voy más allá. Sospecho que debajo de esa fachada inquietante se esconde una loca armariada que no sabía si regalarnos un tema movidito o un medio tiempo diferente, sólo apto para las emisoras de radio de Islandia. Lo mejor, por lo extraño, fueron unos efectos de gato furioso que hacían los chicos del coro en determinados momentos de la canción.

En segundo lugar quedó el tema "Eldur" interpretado por Friðrik Ómar, un rubiales con una cara redonda, como un sol de verano a las 12. Qué fea, la criatura y qué mala la balada plana y remontona que eligió. Para acompañar el tema, se trajo a dos chicos con tambores, a los que no le sacó provecho ninguno. Hombre, si te traes unos tambores, hazlos sonar ¿no?. Pues, ni eso.

Y, después de muchas horas de oscuridad, tras zamparnos toda la tarta y bebernos media botella de vino, llegamos al que creo es el ganador indiscutible del Songvakeppnin 2007 y que no es otro que Eiríkur Hauksson, con su canción "Ég les í lófa þínum", traducido ahora como "Valentine lost".

Evidentemente, amigas, el tiempo ha pasado y nuestro Eiríkur ya no es aquel pelirrojo trajeado, con gestos algo amanerados y con guantes negros que formaba parte del grupo ICY, el cual nos cantó esa pequeña maravilla ochentera llamada "Gleðibankinn" (Islandia'1996). No, reinas, olvídense de aquello. Mucha nieve ha caído desde entonces en Reykjavik y ahora el chico va de duro. Se nos ha hecho rockero y serio. Pero, que no se asuste nadie, que el hombre ha ido a mejor. El pelo ya no lo tiene cardado (cosa que se agradece), se lo ha dejado más largo y ha cambiado la laca Sudanesa por el frío y gélido viento del Polo, el cual se lo mece libremente, como lo hemos visto todas en el video-clip promocional. Está mucho más mayor, pero ni de lejos está tan mal como en esa foto difundida por todas las webs, con la cara regañada y que se parece al hermano mayor de Chucky.

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Eirikur Hauksson en el SONGVAKEPPNIN 2007

De todas formas, Eiríkur, permíteme un pequeño consejo sobre tu pelo de una esteticién titulada. No se trata de que te laves, sin más, el pelo con agua helada y te lo seques a lo bruto por la ventana de tu casa de Reykjavik. Que eso, rey, sólo se ve en las películas. Te lo digo porque en el video y en la final me dio la impresión de que lo tienes un poco grasiento y sin volumen. Y tú así no te me puedes presentar en Helsinki. Para ello, te aconsejo que te compres la gama completa de Pantene Pro-V (mascarilla incluida) para pelos grasos tuyos y, después de aplicarte el tratamiento, te des un viaje-relámpago a una de las peluquerías franquiciadas de Dayana Paqui por donde ya han pasado otras "siniestras" como Natalia Barbu o Gerli Padar. Y míralas ahora, qué monísimas que están. Es que donde Dayana pone la mano…. Bueno, llámame y te doy el móvil de su pelu.

Y, todo este cambio (a mejor, según mi juicio, todo sea dicho), ha sido para traernos una balada rockera, elegante, sin estridencias, muy bien estructurada y mejor interpretada, como manda la ley. El único pero, por decir algo, es que yo ya estoy de "lo siniestro" un poquito hartita ya. Me explico. Al principio, cuando salieron las canciones de Moldavia y Estonia, la cosa pintaba graciosa y diferente. Y todas decíamos aquello de "¡Ay, qué interesante, este año hay canciones diferentes al estilo de Evanescence, qué variedad!" y chorradas por el estilo, pero, luego, al ver que Islandia, Finlandia, República Checa o Bulgaria también han decidido llevar lo mismo (por no hablar, en parte, de la estética de Suiza o Chipre), yo ya he empezado a cansarme de tanto rock, de tanta goticidad y de tanta oscuridad en el ESC. Tanta afinidad le encuentro que, servidora, cuando pone la canción de Natalia Barbu (Moldavia 2007) y luego ésta de Eiríkur las ve como dos gotas de agua. Y no sé yo si esto será bueno. Sólo nos faltaba que a los finlandeses les diera por apagar las luces en su propuesta de escenario para este año y nos ofrecieran un Festival oscuriento. ¡Con lo que odio yo los festivales iluminados con dos velas!


Eirikur encuerado y con pose de rockero cabreado

Por último, comentar del video-clip que, al igual que la canción, es muy elegante y está bien hecho. Me encanta la estética fría de Islandia que aparece en el clip. Seguramente será porque me recuerda al paisaje de Lanzarote, pero con mucho más frío y nubarrones amenazando lluvia todo el rato. Las escenas del coche en marcha, con ellos dentro, por esas carreteras inmensas y las montañas al fondo son preciosas. El tema, amigas, se deja querer y él seguro que nos regalará una buena interpretación con su voz rasgada y su saber estar, tal y como demostró en el Songvakeppnin 2007.

Bueno, ya me callo. No sin antes decirle que, este año, tengo la impresión de que Islandia sí pasará a la Final. Espero no equivocarme porque creo que este año se lo merece de sobra.

Y hasta aquí llegamos.

Saludos desde Lanzarote.

MASHIEL

 

 

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