Uno siempre trata de ser optimista en relación a la corporación pública, y tiende a pensar que este año sí que sí se va a tomar en serio la participación en Eurovisión… como hacen la mayoría de televisiones implicadas en el certamen, que lo consideran lo que es: un auténtico escaparate internacional y una posibilidad de ganar en imagen e incluso generar negocio.

Sea como sea, tengo que romper una lanza en favor de TVE. Me veo obligado después de todas las veces que la he criticado, a por lo menos reconocer algunos pasos que ha llevado a cabo en los últimos días. Cierto que también estos serían mejorables pero… ¿se merece un voto de confianza? Vosotros diréis.

El caso es que el pronunciamiento público sobre la candidatura de Karmele Marchante, asegurando que será imposible contar con ella en la preselección me parece acertada. Vale que quizá no son las formas y vale que este mismo razonamiento se lo pasó por allí mismo en 2008 con el Chikilicuatre, que señores de TVE, era la misma clase de esperpento y tenía la misma intención de reirse y ridiculizar el certamen que Karmele. Entonces sí que valía, no? Demasiados intereses creados…

Pero como voy a intentar no mirar al pasado sino analizar el presente e intentar disfrutar del futuro, me alegro de esta tarjeta amarilla que TVE ha sacado a candidaturas como las de esta… “periodista”. Y lo pongo entre comillas porque periodistas hay de muchos tipos, y la gente seria no se dedica o no nos dedicamos a estos menestere, como no nos dedicamos ni a querer jugar con la selección española en el Mundial de Sudáfrica, ni a rescatar náufragos. Es que cada cual, cuando es serio, sabe cuál es su profesión… y esta señora que yo sepa no es cantante.

Pero bueno, que me lío… que entre eso, y que TVE ha anunciado ya las bases para la preselección, se nos ha olvidado que la han sancionado económicamente por no emitir la semifinal segunda en la edición pasada.

Por cierto que el otro día tuve la oportunidad de estar con Joaquín Guzmán y me comentaba que a él le avisaron de que esta no se emitía en directo un minuto antes de comenzar la emisión… y fue durante las canciones cuando le confirmaron que iría todo en diferido… Y ale, a improvisar, porque obviamente el se había preparado un guión para las votaciones…

Así jugó TVE el año pasado… y obviamente la UER le ha castigado, como lo hicieron muchos países el año pasado. Porque desde el momento que muchos comentaristas hicieron referencia al asunto durante la retransmisión, eso condicionó en cierta manera el voto de España. A sabiendas de que la canción ni la puesta en escena fue la mejor de aquella noche. No nos arrebataron ni mucho menos la victoria, pero para quedar penúltimos…

En fin, que todo eso es agua pasada y quiero mirar hacia el futuro. El caso es que estamos a finales de noviembre y empezamos a ver que TVE se mueve por organizar una preselección. Otros años nos da el mes de enero y aún no sabemos nada -mientras otros países ya tienen hasta representante- así que no podemos quejarnos. Empiezan a moverse las historias, y empezamos a saber que hay gente interesada en participar, como es el caso de Coral.

Serán las ganas de que llegue la nueva temporada eurovisiva, pero a mí todo este movimiento, ya en el fondo, me motiva… Un abrazo.

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