La emisora ​​pública australiana SBS ha confirmado que, lamentablemente, Montaigne y el resto de su delegación no podrán viajar a los Países Bajos para la celebración del Festival de Eurovisión 2021 y, por lo tanto, y tal y como recoge la normativa para esta edición, competirán desde casa, utilizando su “actuación de respaldo” (backup).

La difícil y dura decisión fue aprobada por el Grupo de Referencia de la UER para el Festival tras analizar la situación que presenta la SBS con motivo de la pandemia de la COVID-19.

Josh Martin, editor comisionado de SBS y jefe de delegación de Australia, explica cómo llegaron a tener que tomar esta decisión:

“Australia ha abrazado el espíritu de Eurovisión durante más de 35 años en SBS, y nuestro afecto y entusiasmo por el concurso ha seguido creciendo desde que competimos por primera vez en Viena en 2015. En 2021, Australia volverá a competir en el mayor concurso de canciones del mundo. pero esta vez nuestra artista, Montaigne, actuará desde casa y no en el extranjero.

Después de una evaluación exhaustiva, la SBS ha decidido no enviar una delegación y un artista australianos a Rotterdam para el Festival de Eurovisión de este año. Llegamos a esta difícil decisión después de considerar los desafíos de la pandemia en curso, incluidos los muchos factores involucrados en viajar al evento desde Australia.

SBS y Montaigne agradecen el apoyo continuo de la Unión Europea de Radiodifusión a la participación de Australia en el evento y su compromiso de garantizar que Eurovisión continúe en medio de los desafíos que presenta la COVID-19. También debemos felicitar a la emisora ​​anfitriona por el excelente trabajo que se está realizando para crear un exitoso concurso de canciones este año. Estamos trabajando con ellos para ayudarlos a crear una transmisión memorable y exitosa.

Con el verdadero espíritu australiano, Montaigne seguirá compitiendo ferozmente en el evento de este año con su edificante y poderoso himno Technicolor , que sorprenderá y deleitará a Europa, y mostrará a todos que estamos aquí para ganarlo. ¡Estamos encantados de estar de vuelta y esperamos mostrar lo mejor de Europa! “

Por su parte, la artista que abandera a Australia en esta edición, Montaigne, también ha declarado que:

“Naturalmente, me entristece que durante dos años seguidos no haya podido participar en el espectáculo en directo de Eurovisión. Mi compañero y yo habíamos estado discutiendo con qué videojuegos nos refugiaríamos en una habitación de hotel en Rotterdam entre los ensayos para el evento final, y estábamos entusiasmados con eso. A pesar de esa decepción, sigue siendo un inmenso privilegio poder participar y competir en Eurovisión, en su fandom y sus procesos, dos años seguidos. He podido enviar dos canciones de las que estoy orgullosa y que han significado cosas importantes para la gente. ¡Todavía estoy absolutamente emocionada de poder presentar Technicolor este año, en cualquier forma en la que pueda presentarse mi actuación final! Es una fiesta tan hermosa y ni siquiera una pandemia puede acabar con ella. Eurovisión vivirá para siempre “.

Además de la delegación australiana, Martin Österdahl, el nuevo supervisor ejecutivo del Festival de Eurovisión y máximo responsable del certamen, ha querido sumarse a las declaraciones y añadir que:

“Lamentamos no poder recibir a Montaigne en Rotterdam en mayo. Sin embargo, entendemos los desafíos únicos que se le presentan a la ardua delegación australiana que, hasta el final, ha hecho todo lo que estaba en su mano para hacer posible su presencia en los Países Bajos. Nos complace que todavía podamos dejarlos competir con los otros 38 participantes gracias a la grabación “live-on-tape” de la canción Technicolour de Montaigne . Australia siempre ha aportado diversidad, entusiasmo y energía al Festival de Eurovisión y, a pesar de que su equipo está lejos este año, estarán cerca de todos nuestros corazones en Rotterdam “.