Movimiento en la cúpula directiva de la corporación RTVE. Por un lado, el presidente de la Corporación RTVE, Alberto Oliart, ha comunicado su decisión de dimitir como presidente de la Corporación al Consejo de Administración de RTVE, mientras que, por otro, la directora de Programación de TVE, Lola Molina, máxima responsable de las últimas preselecciones eurovisivas, abandona la cadena pública para fichar por Antena 3.

Oliart ha explicado que se trata de una decisión “irrevocable y de efecto inmediato” y basada en “motivos de estricto carácter personal y madura reflexión”. Durante su mandato, el máximo responsable de la corporación pública, de 83 años, ha mostrado escaso interés por el Festival de Eurovisión sin apenas promoción en la cadena pública y llegando a manifestar incluso durante una comparencia ante la Comisión Mixta de Control Parlamentario de RTVE en el Congreso con tono jocoso: “Eurovisión, si de mí dependiera…”

Desde que llegó a la corporación, todo su afán fue acabar con las polémicas que habían envuelto las últimas preselecciones eurovisivas con John Cobra, Karmele Marchante o El Pezón Rojo, y apostar por un mínimo nivel artístico y de calidad musical en las candidaturas.

La vía que escogió para ello fue externalizar la preselección para Düsseldorf y dejar el formato en manos de la productora Gestmusic, que ideó un complejo sistema de selección de candidato y canción por separado con un resultado polémico y poco halagüeño: la cantante gallega Lucía Pérez con un tema que no era de su estilo, Que me quiten lo bailao, compuesto por Rafael Artesero.

Por su parte, la hasta ahora directora de Programación y Contenidos de TVE se convertirá en la directora de antena en Antena 3. Repetirá así en el cargo que tuvo en Televisión Española hasta el año 2009, fecha en la que fue nombrada directora de Programación y Contenidos. Ahora, estará bajo la tutela de Carlos Fernández, otro histórico de Televisión Española al que Antena 3 fichó hace dos años.

Todavía se desconoce qué efectos puede tener la dimisión de Oliart y el abandono de Lola Molina en el proyecto de TVE para Eurovisión 2012. De momento, es el Consejo de RTVE quien asume la dirección ejecutiva a la espera del nombramiento por parte de las Cortes generales de un nuevo presidente.