1 de agosto: La fecha límite para que Eurovisión se quede en Israel
Nuevo capítulo del culebrón eurovisivo. El próximo miércoles 1 de agosto finaliza el plazo que la Unión Europea de Radiodifusión ha dado a Kan, la televisión pública israelí, para depositar los 12 millones de euros de fianza para la organización de Eurovisión 2019. Si el pago no se realiza antes de esa fecha, Israel perderá definitivamente la sede del festival.
Eurovisión 2019 tendrá uno de los presupuestos más elevados de los últimos años, 35 millones de euros. La fianza, un tercio del total, supone la garantía de que el festival se va a celebrar, dentro o fuera de Israel, frente a contratiempos de última hora. Esta medida fue implementada por primera vez en la conflictiva organización de Kiev 2017 que, además, derivó en el endurecimiento de las normas relativas a los anfitriones para no repetir todos los problemas vividos esa edición.
A pesar de que desde el primer momento el Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que iba a poner todo de su parte para garantizar la correcta organización de Eurovisión, parece que el dinero no estaba incluido en esa disposición. Netanyahu recuerda que Kan recibe un presupuesto anual de 165 millones de euros, del cual debería salir también la organización del festival.
En una carta dirigida al Primer Ministro, al Ministro de Finanzas y al Ministro de Comunicaciones, los directivos de la televisión pública instan al gobierno a facilitarles la fianza requerida por la UER a la mayor celeridad para evitar la cancelación de Eurovisión en Israel. «La preparación del festival es extremadamente compleja, necesitamos mucho tiempo para prepararlo y deseamos que todas las partes cumplan con su cometido», explican. Además, defienden que no aumentar el presupuesto de Kan implicaría un deficit al finalizar el presente ejercicio que contraviene la ley y pone en riesgo las demás producciones.
El Ministro de Comunicaciones, por su parte, ha ofrecido un préstamo a Kan para poder afrontar la fianza, propuesta que ha sido totalmente descartada por los directivos del canal que vuelven a insistir en la necesidad de recibir «los fondos apropiados para organizar el evento».
TEL AVIV, JERUSALÉN Y EILAT DENTRO, HAIFA FUERA
Paralelamente, en la carrera por alojar Eurovisión 2019, Tel Aviv, Jerusalén y Eilat son las tres ciudades que, oficialmente, optan a convertirse en sede. Haifa también había manifestado su interés pero, finalmente, no envió a tiempo su candidatura. En cuanto a los estadios, Tel Aviv propone el Pabellón 2 del Centro de Convenciones con capacidad para 10.000 personas; Jerusalén el Pais Arena, para 16.000; y Eilat los hangares de su puerto, para 10.000.
«JERUSALÉN NO CUMPLE CON LOS REQUISITOS PARA ORGANIZAR EUROVISIÓN»
El diplomático israelí Michael Oren ha afirmado esta semana en la TVM, la televisión pública maltesa, que Jerusalén no cumple con todos los requisitos que la UER exige para organizar Eurovisión. «Tel Aviv sí podría acoger el festival, por lo que no hay problema», sentenció. No es la única voz que en los últimos días ha apuntado en esta dirección, pues numerosos medios de comunicación locales cuentan que Tel Aviv se ha puesto primera en la carrera, ciudad que también aliviaría la incomodidad que muchas delegaciones sienten hacia la posibilidad de que Jerusalén sea la elegida.
Conversación
De ser en Israel, que sea en Tel Aviv, puesto que es la ciudad más cosmopolita y preparada para celebrar el festival.Pero todo esto cansa. Que la UER ponga las cartas sobre la mesa y diga que las cosas son así y si no se cumplen, no hay vueltas que valgan. Eurovision Chipre, Austria, Reino Unido o de nuevo a Portugal.
Por preferir, lo preferiría en un país donde no estén en conflicto. De las posibles sedes dentro de Israel, me quedo con Tel Aviv.
No caerá la breva, pagarán como sea y lo celebrarán allí. Estos desacuerdos son como el nuevo sistema de revelar las votaciones... Para aguantar la emoción hasta el final