¡Eurovisión ha vuelto más fuerte que nunca! Después de la cancelación de la edición de 2020 debido a la pandemia provocada por el coronavirus, Eurovisión 2021 ha conseguido una excelente audiencia de 183 millones de espectadores y un share medio del 40,5 % en los países participantes, lo cual supone el doble de la media habitual entre las correspondientes cadenas. Así lo acaba de publicar eurovision.tv en su página web, en la que también resalta su enorme éxito en plataformas online, con 50,6 millones de usuarios únicos viendo el festival. Destaca la franja de personas de 15 a 24 años, en la que el share asciende al 52,8 %, cuatro veces más que en su franja habitual. Por último, la organización recalca la extraordinaria repercusión que ha tenido el evento en redes sociales (por ejemplo, hubo 5 millones de tuits sobre el festival, con un alcance de 80 millones de visualizaciones).

Como viene siendo habitual en los últimos años, el país que más espectadores aportó fue Alemania, que congregó a 7,8 millones de personas ante la pantalla, un 3 % más que en 2019. En segundo lugar figura el Reino Unido, con 7,4 millones de espectadores. El país anfitrión también se volcó con Eurovisión: la audiencia neerlandesa fue de 5,4 millones (78,5 % de share).

En cuanto al país ganador, Italia, los datos obtenidos han sido óptimos, sobre todo teniendo en cuenta la relación de amo-odio que ha tenido el país translapino con el festival en las últimas décadas. Después de un crecimiento paulatino desde su vuelta en 2011, parece que el festival europeo se está afianzando en Italia, donde 4,3 millones de personas siguieron el triunfo de los Maneskin (24,4 % de share). También destacó la implicación de otros países que acabaron en la parte alta de la tabla: Francia, por ejemplo, aportó 5,5 millones de espectadores que presenciaron cómo Barbara Pravi quedaba segunda (la mejor audiencia para el país galo en la última década). Finlandia, que consiguió su segunda mejor posición histórica, cosechó un share del 81,4 % con 1,4 millones de espectadores e Islandia, un país en el que tradicionalmente Eurovisión arrasa en audiencias, aportó el mayor porcentaje de share, con un abrumador 99,9 %.

También los resultados de España han sido muy positivos en lo que respecta a la audiencia. A pesar del tibio puesto conseguido por Blas Cantó, el festival fue visto por más de cuatro millones de personas, con un 29,4 % de share. El minuto de oro reunió al 42.6 % de la audiencia y la programación eurovisiva permitió a TVE alcanzar su mejor cuota diaria del año con un 15.9 %. Destaca la segunda semifinal, la segunda más vista de la historia de TVE, con unos 600.000 espectadores.

Estos datos de audiencias respaldan el éxito que esta edición ha tenido también a nivel comercial, ya que desde la celebración de la final hay muchas canciones eurovisivas que copan las listas de éxitos de numerosos países. Muchas de ellas se han vuelto virales en plataformas como Spotify o Youtube así como algunos de los temas anteriores de Maneskin, el grupo ganador (por ejemplo, Torna a casa o I wanna be your slave).

Martin Österdahl, supervisor ejecutivo del festival, se ha mostrado encantado con los resultados y Sietse Bakker, productor ejecutivo, ha aprovechado este éxito para agradecer a las 1624 personas implicadas en la realización del evento, sobre todo en un año tan difícil como este.

En los próximos días, publicaremos los datos desglosados de audiencia de cada país.