La vigente campeona del Festival de Eurovision, la ucraniana Jamala, ha sido galardonada con el título de Artísta Honorífica de Ucrania en Kiev tras su victoria el pasado fin de semana con la canción 1944. El presidente Petro Poroshenko, el cual le entregó el premio en mano a la cantante, califica la victoria de positiva y aclamada; victoria por otro lado bastante controvertida y polémica. Todo esto, después de que el propio presidente tuiteara “Increíble actuación y victoria. Toda Ucrania te da las gracias, Jamala“.

ТАК!!! Неймовірний виступ та перемога! Вся Україна сердечно дякує тобі, Джамало! pic.twitter.com/hpwYQ8m7NN

— Петро Порошенко (@poroshenko) 14 de mayo de 2016

Como un rayo de luz aterrizó la flamante ganadora en el aeropuerto de Kiev, donde fue recibida por una marabunta de gente alabándola y dándole la enhorabuena. Ya en la residencia presidencial, Jamala fue atendida por el presidente, el cual le entregó el premio y mantuvieron una charla sobre su experiencia eurovisiva.

“No lo hice por las medallas ni los premios; lo hice de forma muy sincera por la gente, porque se lo merecen” afirmó la ganadora de 2016 a los periodistas tras su conversación con el alto cargo. “Hemos sufrido mucho. Primero fue una revolución, luego la annexión, luego la guerra. Hemos sufrido tanto que he querido traer algo de reconocimiento al pueblo ucraniano”.

Por otra parte, el Ministro de Asuntos Exteriores ha propuesto a Jamala como Embajadora de Buena Voluntad de UNICEF. Pero su triunfo no se ha hecho eco únicamente dentro de las fronteras ucranianas, el propio presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdoğan, llamó personalmente a la artista para felicitarla y desearle lo mejor en su futura carrera. Hecho que ha destapado rumores sobre una posible vuelta del país turco a Eurovision en 2017.

Como todo no podía ser bueno, la otra cara de la moneda la protagoniza el gobierno ruso, desde el cual se ha propuesto boicotear el Festival del próximo año. Además, han impugnado la victoria de Ucrania y han propuesto que se revisaran los resultados, propuesta estudiada por la organización de Eurovision y que finalmente ha quedado en nada ya que la organización considera válida la victoria de Jamala en Estocolmo.

Sea como fuere, Jamala ha sido recibida en su país como una auténtica heroína, saludando a sus compatriotas entre elogios y vítores, concediendo entrevistas a nedios nacionales e internacionales y relanzando una fructífera carrera como nueva ganadora del Festival de Eurovision.