Sorpresa: Mónaco volverá a Eurovisión. Así lo afirma el periódico local L’Observateur que publica una partida presupuestaria del gobierno monegasco de 100.000 euros para el regreso del microestado al festival en 2023.

La TMC (Télé Monte-Carlo) pertenece desde 2016 a la televisión privada francesa TF1, sin intervención pública, lo que en los últimos años era el principal escollo para su participación en Eurovisión, pues no solo promocionaba indirectamente una marca de la cadena estatal, sino también a su principal rival en los audímetros, France Télévisions.

Mónaco debutó en Eurovisión en 1959 y participó en todas y cada una de las ediciones hasta 1979, inclusive. A lo largo de esos 21 años logró una medalla de oro, la de Séverine con Un banc, un arbre, une rue en 1971; una plata, la de François Deguelt con Dis rien en 1962; y tres bronces, los de -nuevamente- François Deguelt con Ce soir-là en 1960, Romuald con Où sont-elles passées en 1964 y Mary Christy con Toi, la musique et moi en 1976. Cabe destacar también a otros representantes que eran auténticas estrellas de la canción en la época como Françoise Hardy (1963), Jean Jacques (1969) o Michèle Torr (1977). A pesar del triunfo en 1971, el principado no pudo organizar el certamen en 1972, tras rechazarse la propuesta del estadio de fútbol Louis II y carecer de otro recinto apropiado.

La delegación monegasca se retiró en 1979 y no regresaría hasta 25 años después, en 2004, fecha en la que se agregaron las semifinales y la participación creció hasta rondar los 40 países por edición. Esta segunda historia solo duraría un trienio y ninguna de sus abanderadas, Maryon, Lise Darly y Severine Ferrer, consiguieron el pase a la gran final. Cuenta la leyenda que la Princesa Grace Kelly elegía personalmente algunas de las canciones en Eurovisión, tarea que heredarían sus hijos Alberto y Estefanía en su breve rentrée entre 2004 y 2006.