Todo listo de facto en el interior del complejo B&W de Refshaleøen en Copenhague. En las últimas horas han terminado las instalaciones de los últimos equipos y su puesta a punto, para dar comienzo desde hoy a los ensayos técnicos de toda la infraestructura instalada. Cada medio instalado se pondrá a prueba ahora para comprobar que está perfectamente conectado y en pleno funcionamiento. La idea de la organización es realizar incluso simulacros de errores, supuestos técnicos de emergencia en directo, entre otras estrategias. Queda justo un mes para la gala final de Eurovisión 2014.

Las cámaras de la DR han visitado junto a Jan Lagermand Lundme, jefe del proyecto, el interior del complejo. “Es absolutamente increíble” como ha quedado el escenario, ha llegado a afirmar el ingeniero, que no ha querido mostrar aún cuál es el resultado definitivo del diseño. La construcción del esqueleto, de las estructuras necesarias y el propio escenario se lleva realizando desde hace apróximadamente un mes. Ahora, durante las próximas dos semanas y media, se dejará todo en perfecto funcionamiento para comenzar los primeros ensayos con las delegaciones el lunes 28 de abril.

Durante las pruebas de las próximas semanas se somenten a examen todas las instalaciones de sonido, iluminación y equipos de cámara. “Toda la tecnología se pondrá a prueba, de manera que encontremos y solventemos todos los errores y omisiones antes del comienzo de las emisiones reales”, explica la jefa de producción, Kamilla Monies, en referencia a los simulacros y ensayos ficticios que se llevarán a cabo durante los próximos días.

“Todos nuestros técnicos han entrado a las nueve por primera vez al arena para estar al tanto de su ubicación de trabajo. Esto significa que todo el equipo de realización sabe ahora su posición y comprueba su equipo”, explica la productora danesa a los compañeros de prensa de la DR. También “deben ser revisados los monitores y los gráficos del enorme escenario para que todo funcione de manera óptima”, puntualiza.