L,EUROFESTIVAL È FEMMINA

Permitídme que titule esta columna con este juego de palabras que nos remite a la canción que Nina Zilli interpretará en Bakú. Y lo hago por dos razones. La primera porque Eurovision 2012 es un festival en el que las mujeres van a adquirir un protagonismo muy importante porque las solistas son una aplastante mayoria […]
Publicado el día 03 de diciembre de 2020
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L,EUROFESTIVAL È FEMMINA

Permitídme que titule esta columna con este juego de palabras que nos remite a la canción que Nina Zilli interpretará en Bakú. Y lo hago por dos razones. La primera porque Eurovision 2012 es un festival en el que las mujeres van a adquirir un protagonismo muy importante porque las solistas son una aplastante mayoria y porque entre ellas, parece estar la ganadora de esta edición, salvo sorpresas de última hora.

 

No es la primera vez que ocurre esto ya que las mujeres son protagonistas esenciales del Festival a lo largo de su historia y comprobamos algunas ediciones en las que prácticamente monopolizaban las representaciones de los países.

 

Pero si os hablo de mis impresiones generales, más allá de esta pequeña anécdota, debo confesar que a mí me gusta esta edición, hay un buen número de canciones que puedo escuchar una y otra vez sin cansarme con algunas excepciones. Siempre se plantea si el nivel musical es bueno o malo cada año y a mi juicio, la actual edición supera desde luego a la anterior con una buena cosecha de canciones.

 

Es verdad que predominan las baladas. Si me apuráis predominan las baladas especialmente en los países balcánicos. Pero tenemos pequeñas gotas de variedad de otros géneros, desde el indie de Israel que es mi canción favorita este año, pasando por el rap de Austria, el rock eslovaco, el country holandés, el dance de Bulgaria, Chipre y Grecia, el pop-rock de Suiza o Bielorrusia, la pachanga rumana o los ritmos étnicos que nunca pueden faltar en Eurovisión, entre otros.

 

Como siempre, voy a comentar alguna de las canciones. Siempre advierto lo mismo: son mis opiniones personales e intransferibles. No comento todas porque creo que tendrán un papel algo menos relevante esta edición y en algunos casos, me reservo la opinión para que ninguna sensibilidad se vea afectada. También es habitual que haga mis predicciones que no sólo están basadas en mis gustos personales, sino también en una intuición que a veces acierta como en 2010 y otras falla estrepitosamente como en 2011. Total que ninguno tenemos la llave del triunfo porque de existir, alguno se forraría.

 

Hay ediciones en las que hay un absoluto favorito y otros años ese cartel se reparte entre varios países. Este año la impresión era que nos encontrábamos en el primero de los casos. Suecia, con Loreen y su Euphoria, se presentaba como la única con posibilidad real de triunfo en Bakú. Desde mi punto de vista, eso se rompió el día que Nina Zilli decidió cambiar su “Per Sempre” por “L,amore è femmina”. Y aquí llega el segundo motivo de mi título. Ya sé que algunos preferían la balada italiana, francamente era muy bonita pero no dejaba de ser una de esas canciones que uno parece haber escuchado mil veces en su vida.

 

La nueva apuesta italiana es otra cosa. Una canción vibrante que además, intuyo que va a crecer en el escenario de Bakú cuando veamos los coros en directo que acompañen a la siempre elegante Nina Zilli. A diferencia de Loreen que prácticamente interpretará la canción como en el Melodifestivalen, la cantante italiana aún tiene margen para sorprendernos en directo. Y por eso, yo no tengo tan claro quién de estas dos será la vencedora y me arriesgaría incluso a apostar por un triunfo mediterráneo.

 

El posible top 10

 

Empiezo por repasar los países que, a mi juicio, tienen opciones de un top 10. Luego repasaré algunas sorpresas que creo que también tienen posibilidades, especialmente la canción de Israel que yo diría que puede dar la campanada.

 

Italia. Pongo a Nina Zilli en todo lo alto de la clasificación. Ya he explicado que es una gran canción con posibilidades de crecer en el escenario eurovisivo. Creo que le puede poner las cosas muy difíciles a Loreen y en todo caso, cualquiera de las dos podría ser una dignísima ganadora.

 

Suecia. Loreen crea una atmósfera alrededor de esta canción impresionante. Su Euphoria no va a pasar desapercibida pese a que los seguidores del Festival lleguemos al evento un poco hastiados de oirla. Afortunadamente para ella, ese día votarán muchos que la escucharán por primera vez. Juega en su contra también que pocas veces, el país líder en las clasificaciones eurofans triunfan y que como comprobó Vicente Rico en ese gran reportaje sobre la historia de las apuestas en Eurovisión, casi siempre los suecos obtienen peores resultados de lo que figura en ellas.

 

Rusia. Mis queridas abuelitas serían máximas favoritas a la victoria si la decisión fuese televoto al 100 por 100. Ya sé que generan mucha polémica pero yo personalmente me resisto a considerar friky a un grupo de mujeres por razón de su edad, por interpretar una canción que se considera para jóvenes o por vestir sus trajes regionales. Este verano, en una sección sobre música europea que realicé en el programa “Afectos en la Noche” de RNE, les dediqué un espacio porque en Rusia, se hicieron famosas por versionar canciones de los Beatles en ruso. Os recomiendo a quienes las consideráis frikys, que escuchéis en Youtube esa otra faceta musical, a diferencia de Chiquilicuatres, Karmeles, etc.

 

Alemania. Hace años que este pais inició la senda de presentar muy buenas apuestas. Los primeros años no obtuvieron demasiados resultados pero luego, hasta ganaron el Festival. Debemos tomar nota por la parte que nos toca. Este año presentan una balada sencilla pero moderna, una delicatessen para los sentidos, al menos para los mios. Confío en que los alemanes vuelvan a brillar.

 

Serbia. No soy yo muy amante de las baladas balcánicas ni siquiera de las de Zeljko que ha demostrado su efectividad en el Festival. Reconozco que acabo de escuchar la versión en español y me ha cautivado. De hecho, hubo debate sobre la posibilidad de interpretarla en inglés o serbio pero debería hacerlo en nuestro idioma porque creo que crece mucho. Aunque no sea de mis favoritas, reconozco que la fuerza del intérprete, la buena prensa que tiene entre los seguidores del Festival, le ayudará. Y no preveo con él un efecto “ex eurovisivo que se queda en semifinales”.

 

Turquia. Es una canción que a mi juicio, está pasando excesivamente desapercibida en las semanas previas. Tras el fiasco del año pasado, los turcos retoman sus ritmos étnicos y eso es una apuesta segura en Bakú, donde jugarán casi en casa. La mezcla con otros sonidos mucho más modernos, la sitúa, en mi opinión, en los puestos altos de la clasificación el 26 de mayo.

 

Reino Unido. Se trata para mi gusto de otra de las delicatessen de este año. El gran Engelbert Humperdinck presenta otra canción sencilla que va subiendo poco a poco, con ese estilo crooner que tantos éxitos le ha proporcionado en su trayectoria. Juega en su contra que muy pocas veces los veteranos han triunfado pero las estadísticas están para romperlas siempre.

 

Islandia. Reconozco mi debilidad por Jonsi pero creo ser equitativo si meto la balada islandesa en el top 10. A diferencia de otras, la melodía de Greta Salome y Jonsi empieza con toques folk y va ganando en épica según avanzan. No es que sea la canción más original de este año pero sí puede ser muy efectiva.

 

Francia. La primera vez que escuché la canción de Anggun no me gustó excesivamente, me pareció un poco extraño y además planteaba dudas su directo porque se paseó por toda Europa en playback. Disipados esos temores, los franceses presentan una canción que si viniera de los países nórdicos, acercaríamos al concepto de schlager aunque con un estribillo más actual. Tengo la impresión que el año pasado nuestros vecinos se dieron un buen batacazo y este lo van a compensar aunque no partan como favoritos.

 

España. ¡ Qué gusto me produce meter a nuestro país en esta clasificación! No lo suelo hacer porque otros años tenía serias dudas y porque creo que es difícil ser objetivos. Sin embargo, este año hay grandes esperanzas por fín de hacer un buen papel. No nos vamos a engañar. La canción es una más, de las muchas que escucharemos. Nuestra gran arma será, sin duda, Pastora Soler, una de las mejores voces de este año, según reconocen ya en muchos mentideros. Ojalá eso nos ayude aunque siempre diré que lo más importante es sentirnos orgullosos al escuchar el nombre de España en el Festival y a partir de ahí, hablamos de un concurso en el que se puede ganar o perder por pequeños detalles.

 

 

Las posibles sorpresas de 2012

 

Aquí repasaré alguna de las canciones que no gozan de una posición de privilegio en las apuestas pero pueden sorprender. Ya sé que algunos lo criticaran pero a ellos les digo que si estuvieran entre sus favoritas, quizás no serían tanta sorpresa.

 

 

Israel. Yo creo que es una apuesta completamente diferente, divertida y con un toque retro, propio de muchos grupos de música independiente. Ya he dicho que a mí personalmente es la que más me gusta de todas las de 2012 aunque procuro separar mis gustos de lo que veo posible. Una cosa que me llama la atención es que pocas personas a las que les he puesto la canción, me han dicho que no les gusta. Hablo de gente que no sigue el Festival habitualmente.

 

Países Bajos. Espero que por fín, este país tenga suerte y los veamos en la final. Si es posible, incluso con un papel brillante porque lo merecen con esa melodía country. Recomendaría a Joan Franka que se dejase las plumas en el camerino porque no le veo mucho sentido, por mucho que en la historia pueda parecerlo. Recordemos que si la gente se pone a debatir sobre las plumas, corre el riesgo de que no se fijen en lo importante, la canción.

 

Georgia. Ya sé que a alguno de vosotros, os salen sarpullidos cada vez que escucháis la apuesta de este país. Yo creo que es una canción propia de teatro musical y si en directo logran sonar como en el disco, Anri nos puede sorprender. Además se brinda la melodía a un gran espectáculo sobre el escenario que podría ser determinante en los puestos que ocupe.

 

Letonia. Otra canción que ha sido muy criticada por algunos sectores a pesar de que a mí me produce un “buen rollo” impresionante cada vez que la escucho. Y siempre las canciones que producen esa sensación, quedan medianamente bien.

 

Austria. Ya sé que el rap no es el estilo musical que más guste a los habituales de Eurovisión. Pero por fortuna, los votantes y jurados son colectivos mucho más amplios. Y si en su momento, triunfó el rock en 2006, tarde o temprano otros géneros lo harán. Además los austriacos llevan un estribillo llamativo que les ayudará a entrar por unos oidos sin prejuicios.

 

Suiza. Confieso que han estado a puntito de entrar en el top 10 pero veo un problema en la canción de Sinplus. Me encantaron en la versión de dos minutos que hicieron en su preselección pero al ampliarla a tres minutos, se me hace excesivamente repetitiva y un poco simple, si jugamos con el nombre del grupo. A pesar de ello, pueden obtener un buen resultado.

 

Eslovenia. A mi juicio es la mejor balada balcánica de este año, con permiso de Zeljko. De hecho, si nos olvidásemos del peso que tiene el cantante serbio en el mundo eurovisivo y musical de la zona, hubiera colocado a los eslovenos en el top 10. Aún con todo, espero que hagan un buen papel porque son los parientes pobres habitualmente de esa zona de Europa en Eurovisión.

 

Eslovaquia. Nadie puede dudar del peso que el público rockero tiene en Eurovisión aunque luego lancen blasfemias sobre el evento. Es un dato objetivo que se corrobora mirando la clasificación de los últimos años. Y no sólo Lordi en 2006, mirad Georgia el año pasado. En esta ocasión, Max Jason Mai es el único representante de este género y eso hace que le debamos tener muy en cuenta.

 

 

En fín, con esto termino el repaso. Ya sé que algunos echaréis en falta alguna de vuestras favoritas pero me niego a comentar la pachangada rumana, aunque se interprete en español, o esas canciones dance de todo a cien que presentan Grecia y Chipre. La danesa me parece simplona y el noruego una copia de otras muchas canciones funkys tan de moda en las cadenas musicales. Y las horrorosas mejor ni hablar de ellas.

 

Por supuesto que todas estas opiniones se emiten antes de conocer los ensayos, las puestas en escena, etc que como todos sabemos, provocan cambios importantes en nuestras valoraciones pero tiempo habrá de planteárselo en unos días que comienza todo, por fín.

 

Un saludo a todos y a disfrutar de Bakú 2012

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