EL DESASTRE DE LOS BIG FOUR

Sí chicos y chicas, tanto pagar, tanto dinero para ser los Big Four y son los cuatro últimos de la fila en esta 50 edición de Eurovisión. Parece mentira pero han sido castigados de una manera impresionante. Si a eso añadimos que los semifinalistas han sido los más brillantes, tanto en números como en los […]
Publicado el día 03 de diciembre de 2020
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EL DESASTRE DE LOS BIG FOUR

Sí chicos y chicas, tanto pagar, tanto dinero para ser los Big Four y son los cuatro últimos de la fila en esta 50 edición de Eurovisión. Parece mentira pero han sido castigados de una manera impresionante.

Si a eso añadimos que los semifinalistas han sido los más brillantes, tanto en números como en los votos, ¿qué invento es este?. Lo de Grecia era también evidente porque lo vienen persiguiendo desde hace años. Ya destacaron con Helena Paparizou en 2001 formando el dúo Antique, y con Sakis Rouvas en 2004, ambos en el tercer puesto, aunque quedaron fatal con Michalis Rakintzis o Mando en el 2002 y 2003 respectivamente. Han tenido las de cal y las de arena en los cinco años que llevamos de década. Ahora ganan por fin merecidamente. Debutaron con Marinella en 1974 y fueron undécimos. Nunca olvidaron el folklore y este año, con la modernidad del tema “My number one” –Mi número uno- han arrasado. Pero la delegación griega ha querido cantar en inglés porque sabían que eso era garante de la victoria.

En cuanto al Festival, todos lo habéis visto, mucho folklore, glamour, rock y alguna balada que precisamente han destacado como Malta con la experta Chiara y Letonia con el dúo masculino Valters & Kaza, la sorpresa de la noche porque nadie los tenía en los pronósticos. Eso también es previsible porque destacan a veces los menos esperados. Realmente ha sido histórico el Final dando el premio de oro macizo a Helena el presidente de Ucrania Yushchenko y Ruslana, ganadora del año pasado. Por fin iremos a Grecia y el Mediterráneo se impone al Este y el Norte, como en el 2003. Ritmo pegadizo, tema de calidad y seguimos con triunfadores de impacto en esta década.

Pero lo que más asombra es que los países fundadores, Alemania y Francia, como otros dos históricos y pioneros como Reino Unido y España, han estado en los puestos 21, 22, 23 y 24. Para el año que viene supongo que se pondrán manos a la obra para no hacer el ridículo. Con todo tampoco había para tanto porque estos cuatro temas no estaban tan mal. Pero como todo el Festival ha sido brillante, no ha habido una sola canción mala, es difícil escoger. No se puede criticar a ningún intérprete porque todos lo han hecho muy dignamente.

Sigo pensando que la vecindad es vital como lo es el intercambio de cantantes. Unas estonias han representado a Suiza, una bielorrusa a Rusia, como lo hizo en la semifinal un noruego por Finlandia, una francesa por Mónaco, habitual también. Así como la cantante ganadora es muy famosa en Suecia porque reside allí y uno de los muchos doces que Grecia ha recibido le ha venido de allí.

Destaco de esta edición la luminosidad, la gran producción, espectáculo a tutti plein. Además parecen haberse puesto de acuerdo todas las delegaciones para hacer números similares, pero muy distintos en cuanto a puesta en escena. Por eso este Festival se le puede calificar como el Festival del folk, del glamour y el rock. Ucrania ha sido una excelente anfitriona. Por eso está este show más vivo que nunca porque los países de nueva incorporación han traído sangre nueva, le ponen ganas y han salvado a este Certamen de lo monótono. Magistrales las canciones de Hungría, Rumanía, Moldavia y Croacia. ¿Dónde quedaron los históricos?, Irlanda, el país que más veces ha ganado sufrió la eliminación, hemos visto la deblacle de los “cuatro grandes”, y otros como Holanda o Bélgica, fundadores también se quedaron en la semifinal. El caso de Austria que debutó en 1957, otro histórico este año han dado la nota y no han pasado a la Final, pero ellos también hacen eso en alguna ocasión. Por lo menos Suiza que fueron los primeros ganadores este año han salvado los muebles, pero cantando en inglés y con unas estonias como antes comenté. Esto ha cambiado, pero mucho, mucho.

En general me ha parecido una gala estupenda, el mejor Festival de esta década hasta el momento, mejor incluso que el 2003 que me pareció genial y que tuve la suerte de ver en directo. El año que viene espero poder ir a Atenas porque allí sí me apetece ir.

Reyes del Amor, 22 de mayo de 2005

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