Anne-Marie David, ganadora del Festival de Eurovisión en 1973 representando a Luxemburgo y tercera en el Festival de 1979 representando a Francia, recordó sus experiencias eurovisivas en su paso por el Congreso de OGAE España. Para ella fueron “un sueño, una experiencia dulce”, pero “muy diferentes”.

En 1972 se encontraba representando a María Magdalena en el musical Jesucristo Superstar, y un equipo de la televisión luxemburguesa le vio y le ofreció representarles en el festival que organizarían un año después, en 1973. “En ese momento Eurovisión era lo más grande”, recuerda.

“Estaba preparada para aceptar la propuesta y les pregunté si me iban a proporcionar todas las condiciones para ganar. Me dijeron que sí. Entonces nos pusimos en marcha y me dejaron elegir la canción. Recibimos 300 de diferentes compositores, ya que tuvimos tiempo para trabajar en ello”.

“Con esa cifra -continúa- tienes posibilidad de elegir una buena. Nos sentamos un comité de expertos a escucharlas y elegimos diez. A la hora de la votación, la condición que puse era que si había un empate, yo elegiría, y así fue. Empataron Lui y Tu te reconnaitras, y me decidí por esta última porque la veía más himno y con más opciones de ser votada”.

En aquel festival, donde debutaba Israel y con la matanza de israelís en los Juegos Olímpicos de Munich un año antes muy reciente, se respiraba una “atmósfera de seguridad tremenda”, recuerda Anne-Marie. Tanto es así, que la artista fue escoltada por dos patrullas de la Interpol cuando fue a comprar un nuevo vestido, ya que un camarero del hotel le manchó el suyo inicial, muy español, en rojo y amarillo.

En 1979 fue muy distinto. “Había varios candidatos y semifinales, y yo pasé a la final. Hubo una huelga en la televisión francesa y no se pudo emitir la final. Entonces, la decisión recayó en manos de un comité de expertos y me eligieron a mí. Me escogieron para representar a Francia gracias a una huelga”.

A Anne Marie le sorprende que muchos seguidores del festival se sepan incluso mejor su vida que ella misma. “Cuando gané en 1973, muchos ni siquiera habíais nacido”, señaló. Relató que tras ganar en 1973 estuvo tres años haciendo una gira por todo el mundo gracias a su victoria en Eurovisión. “Eso ahora no ocurre”, se lamentó.

PARTIDARIA DE LAS LENGUAS MATERNAS EN EUROVISIÓN

La cantante se mostró partidaria de que cada país cante en su lengua materna. “Lo peor que puede pasar es que la mayoría de los países europeos canten en inglés. Creo que un país te puede transmitir más cantando en su lengua materna”, explicó y dudó sobre si España tendría más puntos si cantara en inglés. “Yo apuesto a que no”.

Además, aseguró que se sorprendería mucho si países como España o Francia no cantaran en su lengua materna. “Las canciones en inglés para los ingleses”, sentenció. Sobre el último festival de Oslo, Anne-Marie David confesó que adoraba la canción del español Daniel Diges y la de la islandesa Hera Björk. “El español tenía una magia especial”, reconoció.

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