Exultante y feliz. Así se siente Pastora Soler tras la elección el sábado de la balada Quédate conmigo, su favorita, para competir en el Festival de Eurovisión de Bakú. La sevillana y su equipo ya están trabajando en la nueva versión del tema. “Voy a luchar para que Quédate conmigo se enriquezca en cuanto a los arreglos y enganche un poco antes. Además, haré hincapié en que se necesita un coro muy poderoso y afinado”, asegura en una entrevista con eurovision-spain.com.

EUROVISION-SPAIN.COM: ¿Cómo estás viviendo este momento? Es una gran responsabilidad tu elección directa y ahora que se haya elegido tu canción preferida…

PASTORA SOLER: Es una responsabilidad. No sabía que era tan valiente, muchos compañeros me lo dicen. Yo soy de ilusionarme, me gusta, y aunque mi primer pensamiento fue decir no, luego reflexioné y pensé que podía ser muy bonito. Y ahora estoy disfrutando, pero pasando también muchos nervios por eso de estar en el punto de mira. No estaba acostumbrada a ser tan analizada y criticada, pero me está viniendo muy bien para aprender y aceptar las críticas constructivas, y ser fuerte ante las negativas. Por lo demás, está siendo todo muy bonito. Y lo que me queda hasta Bakú quizá sea lo más bonito. Lo más difícil ha sido tomar decisiones sobre la elección de canciones, quitar unas para poner otras.

E-S: Hasta el momento has tenido libertad de decisión, ¿será igual a partir de ahora y hasta Bakú?

P.S.: Tras las navidades, empezamos a tener reuniones con TVE y mi compañía. La última palabra la he tenido yo, porque soy la que tengo que subirme a un escenario y dar la cara, la que está exponiendo su carrera. A partir de ahora, espero que siga siendo así. Voy a luchar por ello.

E-S: Y en esa toma de decisiones ¿qué será lo primero a tener en cuenta?

P.S.: Lo primero y más inmediato es la canción. Voy a luchar para que se enriquezca en cuestión de arreglos. Hay que darle una vuelta y gastarse unos eurillos en meter una buena cuerda. Es importante. Los autores, Antonio Sánchez y Thomas G:sson, están ya en ello, y ellos han trabajado con arreglistas de Leona Lewis y Celine Dion. No es que el tema vaya a cambiar entero, porque tiene que guardar la esencia, pero sí hay que darle una vuelta. Eso es lo próximo por lo que me voy a pelear, pero no creo que tenga que pelearme mucho.

Y después está la puesta en escena. Este martes ya hemos tenido la primera reunión.

E-S: ¿Cómo vas a potenciar Quédate conmigo?

P.S.: Aún no lo tenemos claro, pero sí voy a hacer mucho hincapié en el coro, que me tiene que ayudar. Será un coro muy poderoso y afinado, haremos un casting, porque es muy importante. También quiero que la canción enganche a la gente un poco antes, nos vamos a poner en eso, dependerá de mi interpretación y del arreglo.

E-S: ¿Qué tiene Quédate conmigo de diferente respecto a otras baladas?

P.S.: He escuchado Per sempre de la italiana Nina Zilli y Verjamem de la eslovena Eva Botto. Quédate conmigo no sé muy bien qué puede aportar de novedad, es una balada emocionante, con un crecimiento amplio, va desde un registro grave hasta el agudo, pero tiene ese momento de ruptura y ese ‘quédate conmigo’ que se repite muchas veces y puede quedarse en la cabeza de la gente que no entiende el castellano.

E-S: Cuando te eligieron para representar a España en Eurovisión, ¿cuáles fueron tus miedos?

P.S.: El hecho de que España haya quedado los últimos años en los últimos puestas. Las votaciones serán para mí el momento de más nervios y menos bonito. No estoy acostumbrada ya que no he estado en concursos. Pero después hay cosas muy bonitas y positivas tanto para mí como para mi carrera, gente que no me conocía y ahora me conoce y que antes me encasillaban en el Corazón congelado o la copla y el flamenco. Si no hubiera sido por Eurovisión, no hubieran accedido a mi música. Muchos dicen que va a ser el final de mi carrera, pues mira, si es así, hasta aquí he llegado o hasta aquí tenía que llegar. Llevo 17 años haciendo lo que me gusta, y no creo que la gente me cierre ahora las puertas, tengo un público fiel que me sigue.

E-S: ¿Te planteas el puesto que ocuparás?

P.S.: No. Claro que me gustaría ganar, pero no me pongo a pensar mucho en eso. Estoy feliz con la canción que voy a defender y lo que quiero es disfrutar de hacer una actuación muy bonita, que le llegue a la gente de Europa y de España. Y que la gente se sienta bien representada. Eso ya es mi triunfo. Si luego quedamos bien, bienvenido sea. Si quedamos de los últimos, lo hemos hecho con la mayor dignidad posible.

E-S: Los artistas consagrados en España suelen rehuir del festival. Después de tu elección, te has aproximado más a Eurovisión y has visto sus interioridades y lo que puede aportar, ¿animarías a otros artistas a repetir tu experiencia?

P.S.: Hasta hoy, está siendo todo muy positivo. De hecho, animo a todos mis amigos a artistas a repetir experiencia. Además, es un trabajo paralelo a tu carrera, en el fondo divertido y muy bonito. Quizá la parte negativa es que te cuestionen después de llevar tantos años en esto. Es lo único que quizá se hace cuesta arriba. Lo pase mal la semana que estuve en Miami, cuando salieron las canciones. Estaba sola y ahí sí tuve un momento de pensar el por qué me había metido en esto. Pero después te compensan noches como la del sábado y el apoyo general del público, e ir por la calle y tener a la gente mucho más cercana porque les vas a representar en Eurovisión, o que conozcan tu parte más humana. Eso es importante para un artista. Al final, prima lo bueno sobre lo malo. Y aún quedan partes muy emocionantes. Me lo han contado artistas que ya han pasado por el festival. Y por eso, animaré a mis compañeros. Al fin y al cabo, estamos haciendo lo que llevamos años haciendo, cantar sobre un escenario, disfrutar y representar nuestra cultura.

E-S: En la gala del sábado hubo algún artista, como David Bustamante, que manifestaron estar dispuestos a recibir tu testigo, ¿a quién se lo darías?

P.S.: David Bustamante es un gran profesional y se está convirtiendo en un gran amigo mío y de mi entorno. Creo que lo haría muy bien. Sería un buen candidato. Y tengo también muy cerca a Malú. Aunque ella cuando se enteró de lo mío, me dijo que estaba loca. Después hemos hablado y profundizado sobre el asunto. A nuestra generación le está costando mucho trabajo esta carrera, antes se vendían discos y había otra repercusión. Está la cosa difícil y hay que buscar alternativas de promoción, caminos que antes ni te planteabas, y Eurovisión es una gran plataforma. Aunque voy a ser valorada, me quedo con que no voy a hacer otra cosa que no vengo haciendo desde hace años, que es cantar sobre un escenario, y el 26 de mayo será uno de los momentos más importantes y emotivos de mi vida, quede como quede.

E-S: ¿Has recibido consejo de alguno de los participantes eurovisivos?

P.S: Sí. He hablado con Sergio Dalma y con Soraya, y me dicen que disfrute de ese momento, que es único e irrepetible, y que los nervios y las críticas no te hagan no disfrutar del momento, que es una experiencia única, muy emocionante. Yo quiero disfrutar al máximo los días que estemos en Bakú.

E-S: ¿Has notado ya la repercusión en tu carrera de ser la representante en Eurovisión?

P.S: Sí. Se nota tanto en la venta de discos y entradas para conciertos, como en las contrataciones para el verano. Con lo cual, les diré a mis compañeros que esta promoción también se nota, y más ahora con lo difícil que está todo.

E-S: ¿Has tenido tiempo de analizar a tus rivales en Bakú?

P.S.: He mirado más las baladas. He visto que había mucho pop-dance y muchas solistas femeninas. Siempre me fijo en las grandes voces, y una de las primeras que se eligió, que fue Albania, creo que la cantante tiene una potencia vocal impresionante. También la italiana Nina Zilli tiene mucha presencia escénica, y la francesa Anggun será una gran rival, así como la elección de Reino Unido, Engelbert Humperdinck, que estaba creando mucha expectación. Es un gran cantante con una gran trayectoria, hay que temerle. Pero me gusta que haya mucho nivel con grandes profesionales.

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