La anfitriona de esta última edición de Eurovisión, la RTP, ya está evaluando los más de 200 temas recibidos. Tiene una tarea difícil, ya que sólo puede quedarse con uno. El compositor seleccionado tendrá total libertad para elegir al cantante que defienda su canción.

El afortunado que salga de esta convocatoria competirá en igualdad de condiciones en una de las dos semifinales del Festival da Cançao, en el que concurrirán 16 candidaturas en total. Cabe recordar que 14 de ellas serán composiciones de músicos portugueses destacados invitados directamente por la propia corporación audiovisual. Todos ellos podrán también asignar sus trabajos al cantante que deseen. Tienen de plazo el 30 de noviembre para enviar una 'demo', y el 31 de diciembre para la versión definitiva. La radiotelevisión lusa encargará a un productor la supervisión de estos temas en los que podrá además involucrarse si lo solicitan los autores.

El título del tema que la RTP considere el mejor de su proceso abierto será revelado a la par que el de la canción número 16, la que saldrá del programa radiofónico Masterclass, de la emisora Antena 1, enfocado a artistas portugueses que no tengan ningún trabajo discográfico publicado y que busquen su primera gran oportunidad. Un jurado elegirá al novel compositor, que posteriormente deberá crear una canción inédita. Tanto el autor novato, como el procedente de las decenas de canciones remitidas a la televisión pública del país vecino, serán conocidos en breve.