Estonia cuenta con 178 temas candidatos para competir en Róterdam, cantidad inferior a los 216 recibidos el año pasado. De todos ellos, 76 están escritos en estonio.

A pesar de haber recibido 38 composiciones menos que hace un año, el productor del Eesti Laul, Tomi Rahula, ha insistido en que el nivel ha subido y se mantiene la gran diversidad que caracteriza a la preselección. “Será una tarea difícil para los jueces”, asegura Rahula. Un jurado compuesto por 14 expertos musicales evaluará, a partir de ahora, los temas recibidos. Tras una votación electrónica, 24 canciones serán escogidas para competir en dos semifinales. Las candidaturas elegidas se anunciarán en el programa Ringvaade, de la ETV, los días 13 y 14 de noviembre, doce cada día.

El plazo para enviar temas a la ERR comenzó el uno de septiembre y finalizó ayer. Las semifinales del Eesti Laul tendrán lugar los días 13 y 15 de febrero en el Sports Hall de la Universidad de Tartu, mientras que la gran final se celebrará el 29 del mismo mes en el Saku Suurhall de Tallin. Tanto las sedes del concurso, como el propio formato, son las mismas que en la edición pasada. 12 candidaturas competirán en cada semifinal, de las cuales la mitad se clasificarán para la final. Los jueces escogerán cuatro en una primera criba, y el público en una segunda ronda elegirá dos. En cuanto a la final, el sistema volverá a ser mixto, entre jurado y televoto. Los tres participantes más votados competirán en la súper final, de donde saldrá el representante Estonia en Eurovisión 2020.